RATNAGIRI ALPHONSO ORCHARD: BAYESIAN DECISION ANALYSIS
FFIORELLACInforme8 de Junio de 2018
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RATNAGIRI ALPHONSO ORCHARD: BAYESIAN DECISION ANALYSIS
En noviembre de 2012, Nirmal Pansare, el miembro más viejo de la familia que poseía el Huerto Ratnagiri Alphonso, tuvo que tomar una decisión: ¿debería la familia arrendar el huerto a un comerciante inmediatamente, o mantener el huerto para cosechar a pesar de los riesgos de lluvia imprevista y fuerte? Una lluvia fuera de estación durante la etapa de floración podría ser perjudicial, dañando al menos el 40% de la cosecha y, a menudo, arruinando toda la cosecha. Sin embargo, las lluvias moderadas en el momento de la madurez de la fruta podrían mejorar el tamaño y la calidad de la fruta.
EL HUERTO
Ratnagiri Alphonso Orchard estaba ubicado en el distrito Ratnagiri de Maharashtra, un estado en el oeste de India. El distrito usualmente vivió cuatro estaciones: el verano de marzo a mayo, seguido de una temporada regular de monzones con lluvias abundantes de junio a septiembre, la temporada post monzón durante los meses de octubre y noviembre, y la temporada de invierno de diciembre a febrero. Sin embargo, los monzones diferidos podrían provocar hechizos de lluvias intensas hasta diciembre. El huerto solo producía mangos Alphonso, el cultivar de mango premium que tenía potencial de exportación. El huerto se extendió sobre 100 hectáreas de tierra. En promedio, se cosechó 1 tonelada de mangos por cada hectárea de tierra. Los mangos se clasificaron de acuerdo con su peso: grado A para mangos de 100 a 150 gramos, grado B para mangos de 150 a 200 gramos, grado C para mangos de 200 a 250 gramos y D para mangos que pesan más de 250 gramos. Cada mango estaba envuelto en papel de seda, empacado en una caja de madera o cartón perforado, y amortiguado con virutas de papel para proteger a la fruta de daños. En general, una caja contenía 10 kilogramos de fruta.
Los cultivares de Alphonso se plantaron a nueve metros de distancia. Cada hectárea de tierra contenía, en promedio, de 120 a 140 árboles.
Durante los primeros tres o cuatro años de crecimiento, fue esencial entrenar los árboles de mango con podas regulares, lo que implicó la eliminación de los brotes cerca del suelo. Una vez establecidos, los árboles de Alfonso necesitaron una poda anual limitada. Los árboles de mango Alphonso bien alimentados por lo general comenzaron a dar sus frutos dentro de los tres a cinco años posteriores a la siembra. Los árboles eran de altura media, vertical y se extendían. La floración en los árboles de mango Alphonso tuvo lugar de diciembre a enero. La lluvia fuera de estación era dañina si ocurría durante el período de floración. Otra amenaza era la helada profunda, que podría ocurrir entre diciembre y febrero. Para proteger los árboles de las heladas, se construyeron techos de paja de arroz para bloquear los vientos. El lado sur de las tejas se mantuvo abierto para la luz del sol y la aireación. La humedad del suelo se mantuvo con el riego, y la hierba seca y las malezas se quemaron en áreas abiertas del huerto para aumentar la temperatura del aire. Alphonso árboles que estaban dando fruto fueron irrigados una semana antes de la floración y luego otra vez después del conjunto de la fruta. Para mantener la humedad del suelo, los árboles pueden ser irrigados mensualmente durante la temporada de invierno, y luego cada dos semanas de abril a octubre. Los requisitos de los árboles para el abono y la fertilización variaron de acuerdo con el tipo de suelo. En general, los árboles de mango Alphonso necesitaban nutrición en función de su edad, lugar y productividad. La temperatura más adecuada para cultivar mangos Alphonso fue de 22 a 27 ° C. La fruta de Alfonso maduró durante junio y julio.
LA DECISIÓN DE PANSARE
Con base en el informe meteorológico publicado por el Centro Meteorológico Regional, Pansare concluyó que había una posibilidad del 50/50 de que la lluvia fuera de temporada golpeara el distrito de Ratnagiri. Pansare ya había invertido el equivalente a US $ 60,000 para mantener el huerto. Si la lluvia golpeara la región de Ratnagiri, la cosecha sufriría en al menos una pérdida del 40 por ciento. Eso significaba que, en el mejor de los casos, Pansare ganaría $ 50,000 en ingresos, lo que significaría una pérdida inmediata de $ 10,000 en su inversión. Pero, si la región de Ratnagiri no fuera golpeada por la lluvia, la granja ganaría $ 90,000 en ingresos, lo que significaba una ganancia de $ 30,000. Pansare aún tenía otra opción. Un comerciante de frutas ofreció arrendar el huerto desde diciembre de 2012 hasta septiembre de 2013 por $ 64,000. Esta oferta fue tentadora porque el arrendamiento generaría un retorno de $ 4,000 en la inversión inicial de Pansare sin incurrir en el riesgo de una pérdida de $ 10,000. Unos días antes, Pansare había aprendido sobre una empresa de climatología que predijo la probabilidad de lluvia. Sin embargo, la empresa cobró una tarifa de $ 1,000. Pansare habló con los clientes existentes de la firma, buscando información sobre la exactitud de las sentencias pasadas de la empresa. Descubrió que en el 70% de los casos en que la región de Ratnagiri fue azotada por la lluvia, la empresa también había pronosticado lluvia. Sin embargo, cuando la empresa pronosticaba lluvia, había un 20 por ciento de posibilidades de que la lluvia no llegara. Pansare necesitaba decidir si valía la pena gastar $ 1,000 para obtener información de la empresa de climatología antes de decidir si la familia debería arrendar el huerto al comerciante inmediatamente, o retener el huerto hasta la cosecha.
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