Seguridad

La personalidad & el conocimiento del yo

Por jugar un papel tan relevante en las relaciones humanas, este capítulo se dedicará a los conceptos de personalidad y sus aspectos distintivos, conocimiento del yo, la seguridad personal y sus tipos, también la toma de decisiones y a la personalidad adulta como elementos fundamentales.

La personalidad

Según Enrique Cerdá, en su libro ¨Una psicología de hoy¨, la personalidad es ¨la integración de todos los rasgos característicos del individuo que determinan una forma propia de comportarse¨. Las personas aún teniendo los mismos órganos, son diferentes físicamente y reflejan personalidades distintas, precisamente por haber integrado los rasgos de forma específica y particular. La personalidad es la manera de ser, la forma como se reacciona, es más bien, la conducta individual de cada persona.

La personalidad se va formando desde la infancia como consecuencia de un entrenamiento deliberado o inconsciente por parte de los padres, educadores y el medio ambiente, por ejemplo se aprende a comer, a vestir, a leer, a oír un tipo de música, a hablar, etc., pero la mayor parte de los rasgos de la personalidad son el resultado de un aprendizaje realizado por el propio individuo mediante un proceso de ensayo y error. Mientras más se ensaya, mas fortalecida quedará la personalidad.

• Según el filósofo Husserl el hombre es el resultado de tres factores: el medio ambiente (35%); la herencia (25%) y la libertad (40%). Estos porcentajes se expresan en un triángulo de la siguiente forma:

Triángulo de Husserl

Aspectos distintivos de la personalidad

La personalidad tiene 4 aspectos claramente identificables, que reflejan el ¨yo¨ a través del comportamiento y la actitud frente a la vida. Estos aspectos son: el físico, el emotivo, el intelectual y el social.

Físico:

Todo lo relativo al aspecto externo, la apariencia personal, lo que se ve, como luce socialmente: su vestuario, su imagen, su presencia, su salud. Sin llegar a extremos de sacrificios para honrar el culto al cuerpo.

Emotivo:

Las reacciones positivas o negativas frente a determinadas situaciones, la actitud positiva o negativa frente a situaciones estimulantes o adversas en la vida y su capacidad para aceptarlas y resolverlas. Ese es el estado anímico.

Intelectual:

La capacidad de pensar, analizar, sacar conclusiones, buscar el porqué suceden las cosas y pensar de forma lógica y racional, en las consecuencias, considerando formas alternativas de solución.

Social:

Habilidad para relacionarse con los demás, la capacidad para establecer relaciones adecuadas, el uso de reglas de cortesía, las atenciones y la solidaridad humana.

No basta con lucir una apariencia personal buena y aceptable, mucho más importante es tener el control del comportamiento emotivo. Las reacciones múltiples a las que hay que someterse en la interacción cotidiana deben ser controladas por usted, así como la capacidad de análisis y búsqueda de posibles soluciones o de aceptación de realidades inmodificables aun para la persona más equilibrada. Esto complementa la facilidad para establecer relaciones adecuadas. Es tan vital que algunas personas dicen: ¨Para resolver esa situación, sólo hay que tener relaciones¨, o ¨si tú tienes relaciones, no se necesita dinero¨.

Cuando se falla en uno o en varios de estos aspectos, se tiene una personalidad desequilibrada o inmadura. Existen personas que han dedicado toda su existencia a la búsqueda del conocimiento

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