Tormentas solares

Se pide al alumno que haga una reflexión sobre la posible incidencia de este fenómeno en España y proponga aquellas actuaciones que a su juicio debieran acometer las empresas para prevenir los posibles riesgos derivados de dicho fenómeno.

Las tormentas solares, por su naturaleza y los efectos en el campo geomagnético de la Tierra, supondrían un grave problema para cualquier sistema eléctrico del que disponemos actualmente. A día de hoy, los sistemas de comunicaciones y posicionamiento GPS quedarían inutilizados, y por tanto, infraestructuras críticas con el suministro de agua dejarían de estar disponibles. Todos estos problemas tendrían un impacto social gravísimo, tanto en España como a nivel mundial. De hecho, durante su mandato como presidente de los EEUU, Barack Obama dictó una orden ejecutiva para preparar al país ante estos posibles fenómenos por miedo a las consecuencias que estos tienen.

En España, estos fenómenos también podrían afectarnos. Sin embargo, gracias a nuestra posición geográfica (latitud), la probabilidad de vernos afectados por las tormentas solares es menor y, por tanto, sus consecuencias y efectos serían más reducidos. Aún así, nuestro país usa tanto satélites internacionales como propios que quedarían gravemente afectados, quedando anuladas nuestras redes de telecomunicaciones basadas en satélites (las líneas telefónicas y la televisión, por ejemplo, no se veían afectadas).

Al igual que en cualquier infraestructura basada en electricidad, las empresas (sobre todo las de índole tecnológica) quedarían gravemente afectadas. Esto se debe a que prácticamente todos los sistemas y procesos de una empresa quedarían inutilizados: procesos productivos, administrativos, comerciales, de comunicaciones, etc. Asegurar la continuidad de negocio ante una tormenta solar, y básicamente, ante cualquier imprevisto o desastre, debería ser la mayor prioridad para una empresa. Para ello, certificar a la empresa con una norma como la ISO 27001 (Sistema de Gestión de Seguridad de la Información) nos permitiría mantener la información, los datos de negocio y referentes a los stakeholders ante estos riesgos, ya que está certificación establece un estándar para implantar, mantener y mejorar estos sistemas.

Además de la certificación ISO 27001, existe otra certificación que nos ayudaría a reducir el impacto de estos riesgos: la ISO 22301 (Gestión de Continuidad de Negocio). Certificarnos en esta norma ISO, nos ayudaría a organizar análisis para evaluar los riesgos y controles de nuestra empresa centrándonos en la gestión de la continuidad de negocio ante escenarios de desastre y el impacto que estos escenarios y sus consecuentes riesgos tendrían en nuestro negocio.

Para terminar, a modo de resumen, podríamos decir que pasar una auditoría que nos certifique en estas normas ISO nos avalarían a la hora de realizar un plan de prevención en el que detallar qué debe hacer cada profesional de nuestra empresa para minimizar el impacto de los riesgos que pueden afectar a nuestro negocio. Y más si tenemos en cuenta casos como el de las tormentas solares, que afectan a la base tecnológica en la que todas las empresas actuales se apoyan e incluso fundamentan.

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