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Antonio Machado. Comentario Poesía.

JASantiago24 de Septiembre de 2013

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POESÍA:

Antonio Machado

(1875-1939).

Camino/viajero.

Juan Ayala Santiago. 2º Bachillerato C.

ÍNDICE.

Página 3 → Introducción. Galerías, Soledades y Otros Poemas.

Página 4 → Soledades. Galerías. Otros Poemas.

Página 5 → Campos de Castilla.

Página 6 → Campos de Castilla.

Página 7 → Poesía de Machado a Partir de Nuevas canciones.

Página 8 → Conclusión.

De todos los temas de las obras de Machado, voy a tratar Camino/viajero. Hablaré de la evolución de este tema a lo largo de las obras poéticas de Machado.

En la poesía de Machado podemos encontrar 3 etapas: Soledades. Galerías. Otros Poemas, Campos de Castilla y La poesía de Machado a partir de Nuevas Canciones.

Soledades. Galerías. Otros poemas. (1899-1907).

El libro de soledades aparece en pleno apogeo del movimiento modernista. Predomina en sus poemas el tono melancólico y doliente, la anécdota argumental es prácticamente inexistente y los temas son los propios del intimismo posromántico: el amor, el paso del tiempo, la soledad, la infancia perdida, los sueños, etc. Es ya muy característico el empleo de símbolos, con los que el poeta desea el mar, el jardín, la tarde, el otoño... Sus significados son muy diversos y a veces muy cambiantes, e incluso en el mismo texto.

En la segunda edición de 1907 se acentúa la línea intimista. El recuerdo, la memoria, el sueño evocan constantemente un pasado perdido. Se incorporan nuevos símbolos, como el de las galerías del alma. Es notable una sensación general de angustia por el fluir incontenible del tiempo y por la premonición de la muerte. Dios aparece también en algunos poemas; racionalmente inexistente, pero vitalmente deseable. El sentimiento del paisaje es muy acusado y característico: la realidad exterior queda impregnado del estado emocional del poeta.

Comentario de la evolución del tema camino/viajero: Con camino, Machado hace referencia a la imagen del tránsito que nos espera y, con viajero, se refiere a la persona que emprende este camino. El viajero es un viajero por el sueño.

Aquí (Poema I (El viajero)). con el símbolo 'viajero' Machado se refiere a su hermano, que pronto se fue para ahora volver con la infancia perdida y que ya no podrá recuperar. Lo deja patente por su aspecto “...Hoy tiene ya las sienes plateadas...”. La tarde otoñal refleja la añoranza de las otras estaciones (“...deshojándose las copas otoñales del parque mustio y viejo...”). Se pregunta si este viajero lamenta su infancia perdida comparándola con la 'pobre loba', que quiere referirse a la juventud a la que se compara con el animal salvaje, fuerte y ansioso que ahora ya se ve muerto. El camino que comienza hacia la muerte lo deja patente haciendo referencia al mar (“... y ve su nave hender en el mar sonoro...”). El viajero ha visto pasar esta situación más veces pero ahora añora poder volver a verla (“... y este dolor que añora o desconfía...”) mientras pasa el tiempo. En definitiva, el viajero ya de vuelta, confiesa su frustración, su fracaso, ha vuelto al punto de partida sin haber conseguido su anhelo, quizás indefinible. Este sentimiento marca el tono de todo el libro. El viajero ya ha renunciado a continuar su búsqueda, ha renunciado a su indefinida aspiración, ha dejado de caminar. La conclusión de su viaje es que la vida es tiempo en espera de la muerte, nada más. Queda vencido por el tedio; todo el poema sugiere cansancio y desilusión. También hace mucha referencia al blanco, color que representa a la muerta (“...la blanca juventud...”)

En este poema (poema II.), Machado, hace referencia a los múltiples caminos que ha recorrido (“...he abierto muchas veredas...”) y a las distintas personas que se ha encontrado. Aquí, en concreto, contrapone al burgués, al cual le hace una crítica peyorativa (“...soberbios y melancólicos, borrachos de sombra negra...”), y al campesino, el español y resignado, a los cuáles alaba por su trabajo, conformismo y por los soñadores que son (“... son buenas gentes que viven, laboran, pasan y sueñan...”). Esta crítica hacia la burguesía es muy común en la G. 98 y el Regeneracionismo. Aquí, se refiere a los caminos que ya ha recorrido anteriormente y lo que ha conocido a través de ellos; personas despreciables y, otras por el contrario, admirables.

En otros poemas como el poema XI, Machado comienza recordando su vida (“Yo voy soñando caminos de la tarde...”), el atardecer en el paisaje es el amor en el sueño. Sin saber donde va el camino, es decir, su vida, (“...¿Adónde el camino irá...?”) y mientras cae la tarde una premonición de la muerte y del paso del tiempo, con la angustia de haber perdido la pasión ((“...la espina de una pasión; logré arrancármela un día...”). También menciona el viento y los álamos. Los álamos son el árbol del amor y el viento es un símbolo erótico masculino (“... suena el viento en los álamos del río...”). A continuación, la tarde cae más en la oscuridad, lo cuál significa la llegada de la muerte(“... la tarde más se obscurece...”), y el camino está difuso hasta que se queda en blanco que le lleva a la muerte (“... y el camino que serpea y débilmente blanquea...”). Y vuelve a la añoranza de esa espina de la pasión que se quitó y nunca debió haberlo hecho.

En otros poemas el camino acompañado de la primavera que aparece como la juventud que añora y ya no va a volver , como se ve en el poema XXXIV (“me dijo un alba de la primavera: yo floréci en tu corazón sombrío ha muchos años, caminante viejo que no cortas las flores del camino...”). Cuando menciona al caminante se refiere al viajero, el cual es el que siente estos sentimientos de pérdida de la juventud y el paso inexorable del tiempo.

En las coplas elegiacas (poema XXXIX), hace una mezcla entre el viajero y el camino como es común a lo largo del libro, ya que, siempre (o casi) el camino lo debe recorrer alguien. Menciona la resistencia y el miedo a la muerte, después de una larga vida, teme que llegue su hora (“...¡ay del noble peregrino que se para a meditar, después de largo camino, en el horror de llegar...”).

En el poema LXX, perteneciente a Galerías, el camino tiene un sentido especial. Aquí, simboliza: la existencia emocional del viajero que es el origen de su poesía y la materia con la que se construye; su búsqueda, es un peregrino en busca de “lo otro” necesario e irrenunciable, sin esto su existencia no será completa (“...los caminos de los sueños....”). Prosigue con la tarde, la cual es una premonición de la muerte, pero aquí valora la muerte como algo bueno, mejor dicho lo que hay después de la muerte como se refleja aquí “...allí te aguardan las hadas silenciosas de la vida y hacia un jardín de eterna primavera te llevarán un día...”. Cuando habla de las hadas, recurso muy utilizado por los simbolistas, la realidad de tiempo entendido Bergsonianamente como símbolo de la existencia y de su duración. Pertenecen a la iconografía infantil y adolescente frente al demonio que pertenece a la del hombre.

En el poema LXXXVII (Renacimiento) vuelve a hacer referencia a la Galerías del alma, con esta referencia Machado pretende dar cuenta del interior de la conciencia. El camino lo refleja como algo nuevo para alguien que nace y retoma el camino que otros han perdido o han dejado de seguir (“... Ah, volver a nacer, y andar camino, ya recobrada la perdida senda...”). De nuevo vuelve a hacer alusión en este poema a la infancia perdida y al paso del tiempo (“...y volver a sentir en nuestra mano, aquel latido de la mano buena de nuestra madre...”).

En definitiva, en Soledades, Galerías y otros poemas, centrándonos en el tema del camino/viajero, casi siempre que el tema aparece es para añorar el camino (vida) que vivía de joven y mostrando a este viajero como peregrino, romero, caminante…su única compañía es el sentimiento de soledad, no se comunica con las vagas figuras que encuentra en su camino .Su viaje ha sido un viaje interior, por su tristeza interior y angustia de vivir. Las calles, las plazas, el campo…son objetivaciones de su sendero interior, de las galerías del alma. Caminar es explorar, buscar, aspirar. La vida del viajero es buscar en el tiempo sin encontrar nada.

CAMPOS DE CASTILLA (1907-1917).

En Campos de Castilla se advierten cambios fundamentales respecto a Soledades: se atenúan el subjetivismo y la introspección y pasa a primer plano la realidad exterior. Si en Soledades el paisaje,

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