Día del idioma (castellano)

Día del idioma

Al hablar de idioma, necesariamente tenemos que hablar de todo lo que esto comprende, la voz, las palabras e incluso el silencio, pero quiero que lo veamos desde un punto de vista diferente…

Se podría decir que el idioma, el cual hablamos hoy en día (en Colombia), tuvo su origen en el “descubrimiento de América” (1492)…

“La historia siempre es escrita por los ganadores. Cuando dos culturas chocan, el perdedor se borra y el ganador escribe los libros de historia. Libros que glorifican su propia causa y menosprecian el enemigo vencido.” Adolf Hitler dijo: “Al ganador nunca le preguntarán si dijo la verdad”… Precisamente por ésto es que hoy conocemos ese gran robo de riquezas literales, culturales y de identidad, como “descubrimiento”. Eduardo Galeano nos replantea, cuál fue el verdadero descubrimiento: “En 1492 los nativos descubrieron que eran indios, descubrieron que vivían en América, descubrieron que estaban desnudos, descubrieron que existía el pecado, descubrieron que debían obediencia a un rey y a una reina de otro mundo (…)”, yo agregaría a ésta frase: en 1492 descubrimos que existía otro idioma, el español. Un idioma que nos fue impuesto, por gente que en los libros históricos son descritos con el eufemismo de “conquistadores”, cuando en realidad son usurpadores; usurpadores de joyas, cultura… usurpadores de idioma, de las lenguas indígenas de América.    …

Reitero: el idioma comprende muchas cosas y quiero que hoy lo veamos desde otro punto de vista.

Jorge Eliécer Gaitán, la voz del pueblo, convocó a una marcha de silencio; marcha a la que asistieron 100.000 personas y el único ruido que se oía, “era el ondear de las banderas negras y los corazones acelerados por la emoción de recordar a los hombres villanamente asesinados.” Silencio que se oyó más fuerte que cualquier alocución política y que movió más corazones que cualquier arenga de Hitler.

El idioma, la voz, la palabra, ha sido trascendental en la historia de la humanidad… por ella se iniciaron guerras, se llegó a acuerdos y fueron escuchados los que no podían hablar, como es el caso de Jorge Eliécer Gaitán, Luis Carlos Galán, Jaime Garzón, Manuela Beltran, Policarpa Salavarrieta, entre otros, que fueron la voz que habló lo que los demás callaban, lo que el pueblo callaba, y con mucha valentía y honor lo hicieron, pues sabían que al mencionar sus ideales de liberación y revolución, estaban mencionando sus propios epitafios… y que los mismos que otrora mandaron a asesinar a esos que hoy conocemos como mártires, son los que hoy les colocan una estatua en un sitio público, que más que conmemorar sus muertes, es como un tipo de advertencia que dan al pueblo para que miren el final de aquellos que quieran seguir sus pasos…

Las palabras tienen un gran poder y peso… Por eso dudo que Jorge Eliecer Gaitán con su famoso “Si muero, vengadme”, hubiera sabido lo terrible que esto desataría. Ya que era él “el Presidente que llevaría al país a la justicia social y la paz” y paradójicamente fue su muerte la causante de una de las peores guerras que ha tenido el país...
“Tres días duró el Bogotazo y llevamos casi siete décadas sin recuperarnos”.
¿Por qué? Por unas palabras.

Puedo pasarme todo el día hablando sólo de este tema, pero quise que viéramos el día del idioma desde otro punto de vista, para poder enfocarme en la conclusión.

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