Había una vez dos amigos inseparables.

Había una vez dos amigos inseparables.

Una pequeña niña llamada Lulú, de bellos ojos azules y cabello largo y hermoso. Su mejor amigo se llamaba Max, un pequeño y dulce cachorrito siberiano.

Eran inseparables y juntos tenían las más grandes e increíbles aventuras, llenas acción y sus aventuras aumentaban cada vez más su gran amistad.

Un día caminando por el bosque Lulú y Max descubrieron una guarida que llevaba a un lugar extraño, que parecía ser otro mundo, lleno de seres mágicos e increíbles que vivían con temor bajo  el malvado gobierno capitalista de una bruja llamada Cosmas.

Preocupados Lulú y Max prometieron ayudar a sus nuevos amigos de Cosmopolitania y de este modo, dos mundos, completamente opuestos unieron fuerzas para derrocar un gobierno de opresiones e injusticias.

Lulú y Max entrenaron día y noche junto con los seres mágicos de Cosmopolitania, juntos entrenaron tan duro y con tanto esfuerzo que se convirtieron en los mejores peleadores de lucha grecoromana y yudo, eran tan buenos que hubieran podido ganar una medalla de oro en los juegos olímpicos, si no hubiera sido porque Lulú se fracturo la pierna entrenando, Cosmopolitania hubiera sido libre del horrible gobierno de la bruja, pero eso solo los retraso un par de meses, porque lulú y Max eran obstinados y juntos iban a liberar a sus amigos, tal y como lo habían prometido.

Después de dos largos años de estarse preparando, había llegado el gran día, el día de la revolución de Cosmopolitania, todos los seres mágicos se estaban alistando cuando se escucho el rugir estruendoso de un gran cañón el cual anuncio que la bruja se había percatado de lo que los seres mágicos planeaban, la bruja molesta mando a sus mejores soldados a combatir, encerrando a todos los seres mágicos, mientras Lulú se encontraba en su examen final de matemáticas, haciendo imposible el rescate inmediato de las creaturas.

Lulú presintió  de que algo andaba mal, lo sentía muy dentro de ella; Cuando su examen de matemáticas logro completar se dirigió corriendo hasta su casa para alistarse y llamar a Max.

Al terminar de alistarse, salieron corriendo este par con dirección a Cosmopolitania, al entrar se dieron cuenta que los seres habían sido encarcelados por los soldados de la bruja, así que con la mayor prisa se dirigieron hacia el castillo de la bruja.

Antes de que estos lograran entrar, vieron que había dos guardias custodiando la entrada del castillo, Max corrió para distraer a los soldados, mientras el distraía a los soldados Lulú se acercó lentamente hacia sus espaldas y los derribo de un golpe a ambos.

Con esto los aventureros lograron entrar al castillo, al entrar había un gran y laberintico jardín, Lulú se frustró al cabo de una hora, ya que tenían mucho tiempo dando vueltas en el laberinto; Casi inmediatamente, Max encontró una escotilla y al parecer conducía a los calabozos de la bruja, llegaron al fondo y ¡Ahí estaban!, la mala noticia era que no estaban solos, sino que sus celdas eran custodiadas por un gran y aparentemente feroz monstruo; pero esto no acababa ahí, el monstruo tenía la llave de la celda colgada como un collar ; Lulú y Max debían de quitársela a toda costa.

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