La verdadera fantástica

LA VERDADERA FANTÁSTICA

Por: Stefanía Alejandra Tabares Martínez Y Carmen Cecilia Arias Polo

La canción “La fantástica” del autor Carlos Vives y Andrés Castro, plasma una ciudad de ensueños, liberada, revolucionaria, aparentemente perfecta e independentista, no obstante, esta ha quedado en el olvido, en la memoria de algunos o a la vista de pocos hoy en día, pues el deterioro social de su gente y sus raíces es cada día peor, siendo consumidas por la corrupción, desigualdad social e inseguridad.

Otro punto es la buena fama que tiene Cartagena, que se extiende por todo el mundo, la canción de Vives retrata la historia, cultura y lo mejor de la ciudad, dado que, sus puertos son los protagonistas donde arribaron por primera vez en América latina los colonizadores españoles. Debido a lo anterior, luego de tanto crecimiento comercial y turístico de la ciudad se esperaría que la desigualdad social bajara, que la cultura ciudadana se reforzara, pero esto no sucedió.

 Así mismo, Cartagena al ser una comunidad icono para el país por su historia de esclavitud, lucha y racismo se esperaría que esta fuera ejemplo para el resto de ciudades costeras, pero los negros en ciudades como Montería- Córdoba siguen viviendo el menosprecio o el racismo por su color de piel, evidenciándose así, que es una problemática sociocultural que aún permanece.  

Por otra parte, el pueblo palenquero liberado por Domingo Benkos Biohó, del que habla el cantante Vives, siguen identificándose como una comunidad africana en tierras colombianas, donde encuentran más seguridad y libertad, pero que se mantiene, con migajas, abandonada por el estado y escases de oportunidades laborales.  Cabe resaltar que, Palenque es patrimonio mundial, por lo que debería tener un mejor mantenimiento e inversión de recursos, sin embargo, la realidad también es desilusionante, pues los recursos destinados a la conservación del mismo nunca llegan y los políticos o aspirantes a presidencia solo aparecen para conseguir votos y falsas promesas cada cuatro años.

No obstante, cuando la canción habla de la libertad conseguida en la época del colonialismo, la lucha por el poder aún no cesa. Estos sujetos, se hacen cada día más ricos, incluyen a extranjeros, que están explotando la ciudad y el dinero que dejan las regalías de los centros turísticos o el comercio, además, nunca se ven en las supuestas mejoras y mantenimiento de la ciudad, así pues, estos recursos terminan en bolsillos de ladrones de cuello blanco, mientras el deterioro en las calles, las inundaciones y el poco fomento de educación o generación de empleo formal por parte del gobierno es cada vez menos.

 Por lo que, la Cartagena fantástica, ni siquiera es la que ven muchos de los turistas, ya que, aunque muchos ven una versión super optimista de una ciudad, estos suelen ser engañados por los vendedores informales que hasta cuatriplican los precios de los productos o paquetes que ofrecen, esto sin hablar de la prostitución, trata de blancas, drogadicción, inseguridad, indigencia, y una comunidad que vive en la otra cara de la ciudad en extrema pobreza, en condiciones inhumanas e insalubres.

En definitiva, no se trata de mirar el vaso medio lleno o medio vacío, sino desde su realidad y es que muchas veces las problemáticas las envuelven con canciones super optimistas, creando o fomentando falsas concepciones, tratando de ocultar así lo que sufre el país o las comunidades de las que se habla, llegando a tal punto de humillar y aprovecharse de estas.

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