El idiota

INTRODUCCION

Fiodor Mihailovitsch Dostoyevski es un ruso de cuerpo y alma, profundamente cristiano y al mismo tiempo un gran conocedor de la condición humana que introduce al lector a través de sus obras en un mundo primitivo y místico^[1] a la vez, en el que por una suerte de paradoja es posible experimentar el tierno y dulce abrazo del horror, propios de quien se enfrenta a de manera simultánea con lo miserable de la condición humana y la Belleza sublime  de lo eternamente Divino.

A Dostoievski –como hombre espiritual y cristiano- le preocupa el problema del hombre y su destino, hay en él una suerte de obsesión por la antropología, su arte está enteramente inmerso en la realidad profunda, en el universo espiritual; en las relaciones que el hombre mantiene con Dios, con el diablo^[2] y con los otros hombres. Por eso más allá de todo prejuicio nihilista, es posible ver en él un pensamiento de corte existencialista.

El presente trabajo tiene como fuente principal el texto “El Idiota”^[3] enriquecido con la bibliografía complementaria propuesta por la cátedra, como así también por los apuntes de debates que oportunamente se realizaron durante el cursado de la materia. En este contexto cabe destacar que la magnitud y profundidad del texto fuente, hace posible que se perciban en él temas diversos como la enfermedad, la locura, la vida; la muerte; el contexto social de la Rusia del siglo XIX, etc. Por lo tanto a los fines acotar los límites de este estudio se propone abordar el tema de la muerte como disparador de preguntas sobre la vida y a partir de allí plantear cuestiones tales como:

¿Qué mirada tiene el autor sobre la vida? ¿Cuál es la finalidad del autor –si es que la tuviere- al plantear el tema de la muerte en el principio de la obra? ¿Es posible comprender al hombre de hoy a partir de los temas desarrollados por el autor en la obra? ¿Constituye la muerte un punto de partida para dar sentido a la Existencia humana para el hombre ruso del siglo XIX y para el lector que en este momento se encuentra leyendo el presente trabajo?

Para asegurar un orden y claridad en el proceso de dar respuesta a la problemática planteada se propone el siguiente esquema de trabajo:

Contextualización del autor y su obra.

Descripción de algunos personajes

Narración del príncipe de la experiencia compartida por un condenado a muerte

Conclusión.

CONTEXTUALIZACION DEL AUTOR Y SU OBRA

En el ámbito social y político, la Rusia de mediados del siglo XIX se enfrenta casi de manera abrupta a cambios profundos en su estructura interna. Se debate entre la modernidad de occidente y el apego a las tradiciones de oriente; no sabe de repente si “encaminarse a San Petersburgo, la “ciudad artificial”, la civilización, o retornar a la tierra aldeana, a la estepa… Todo es desorientación, desasosiego: Frente al zarismo se levanta, sin transición, la anarquía comunista; la ortodoxia, la fe venerable y heredada, se torna de súbito en un ateísmo fanático y rabioso.”^[4]

Fiodor Dostoievski fue el segundo de siete hijos del matrimonio de Mijaíl Dostoievski –médico del hospital para pobres Mariinski en Moscú– y su esposa María Fiódorovna. Finalizados los estudios en la academia militar adquirió el grado  de Subteniente y se incorporó a la Dirección General de Ingenieros en San Petesburgo. Tras abandonar el ejército se unió a un grupo intelectual nihilista acusado de conspirar contra el Zar Nicolás I, en virtud de lo cual fue arrestado y condenado a muerte, pena que posteriormente fue conmutada por la de prisión perpetua en Siberia. Esta experiencia límite constituyó el punto de partida de su reflexión existencial ante el misterio; en esa reflexión por el más allá tomó un lugar preponderante el amor. Finalmente fue liberado en 1854. Muere en San Petersburgo, el 9 de febrero de 1881, de una hemorragia pulmonar

La producción literaria del autor es de una magnitud considerable, rica en títulos, contenidos y estilos; en ella es posible distinguir los géneros: Novela –temática y autobiográfica– relatos cortos, artículos, ensayos, recopilaciones y otros escritos. Entre sus obras es posible contar: Pobres gentes (1846), El doble (1846), Una novela en nueve cartas (1847), Novelas blancas (1848), Niétochka Nezvánova (1849), Stepanchikovo y sus habitantes (1859), Humillados y ofendidos (1861), Recuerdos de la casa de los muertos (1861-1862), Memorias del subsuelo (1864), Crimen y Castigo (1866), El jugador (1866), El idiota (1868-1869), El eterno marido (1870), Los hermanos Karamázov (1879-1880), Diario de un escritor (1873-1881), El señor Projarchin (1846), La patrona (1847), El árbol navideño y la boda (1848), Un corazón débil (1848), Polzunkóv (1848), Un episodio vergonzo (1862), El cocodrilo (1865), Bobok (1873), Una criatura gentil (1876), El sueño de un hombre ridículo (1877).

DESCRIPCION DE LOS PERSONAJES

La novela está compuesta por una gran cantidad de personajes, sin embargo para el presente trabajo nos bastará con referirnos a los que revisten una vital importancia en relación a la problematización planteada en la precedente introducción:

1. El Príncipe  Liov Nicoláyevich Mischkin

Es “un hombre joven de unos veintiséis o veintisiete años, de estatura algo más que mediana, pelo muy rubio y espeso, carrillos chupados y una barbita en punta, casi del todo blanca… ojos grandes azules y fijos”^[5]; una mirada rara que permite adivinar a los individuos aquejados de epilepsia –esta enfermedad es uno de los muchos rasgos comunes del personaje con el autor–. Si bien este personaje no pudo, en virtud de la enfermedad que padece, recibir una educación formal por la continuidad que esta requiere; da señas de ser una persona muy instruida, tiene buena caligrafía^[6] y por sobretodo es una persona muy cortes^[7].

Liov encarna la inocencia como los niños del evangelio. Hay en él una permanente tendencia a manifestarse tal cual es, con transparencia, no conoce la mala intención y por tanto cree en la bondad de las personas; entre los personajes de la novela los que más atraen su atención son los personajes secundarios y maleables^[8]. En virtud de su alma evangélica, los demás personajes –tras conocerle de una manera superficial– le apodan el príncipe idiota –confunden así su bondad con la estupidez–^[9]; solamente Aglaya puede ver que el príncipe es un hombre sumamente inteligente y por sobretodo de buen corazón^[10].

El príncipe idiota es un trasunto ruso del Jesús judío proclamado en el Nuevo testamento, es el hombre en estado edénico, que se ha criado lejos de la sociedad civilizada, en las montañas y lagos de suiza entre pastores y niños. Posee una naturaleza tal que le permite comprender profundamente a los hombres, está siempre pronto a ayudar a los demás aún hasta el punto de olvidarse de sí mismo, debido a que los dolores ajenos cobran vida en su propio corazón^[11]. Este hombre noble se debate entre dos amores: por un lado  el amor por Aglaya, una doncella sumamente bella; y por otro lado un amor de compasión que despierta en él el dolor de un pasado infame que marcó la vida de Nastasia.^[12]

1. Semion Parfenovich Rogochin:

Un hombre de pelo negro vestido de manera elegante, que sin reparo alguno es capaz de alegrarse por la desdicha ajena, indiscreto e invasivo al preguntar sobre la vida de los otros. Resulta ser una persona impulsiva, que recientemente fue liberado por la muerte de su padre heredando una fortuna. Este hombre entra en confianza con el príncipe y le cuenta que se dispone a dar los pasos necesarios para declararse a la bellísima Nastasia Filipovna^[13].

Es un oscuro y ambicioso personaje, que ama desmesuradamente a Nastasia y que desde el principio del relato está destinado a cometer un crimen pasional.

1. Nastasia Filipovna

Es una hermosa cortesana, un personaje cuya personalidad resulta en extremo difícil de comprender, todo en ella es perfección^[14] y en este sentido es ella única. Sin embargo arrastra un obscuro pasado de vejaciones y agravios que se resuelven en un complejo de inferioridad, es una mujer autoflagelante, ser feliz y buena es algo que no se puede permitir, y suple aquello con dinero y bienes materiales, fiestas y reuniones, se rodea constantemente de lo más bajo de la sociedad rusa, borrachos y gente de bajo nivel. Totski le ha destrozado la vida lo cual provocó en ella un profundo desprecio hacia esa alma fría; esto la lleva a vivir en un estado permanente de desesperación que la va a acompañar hasta el fin^[15].

Es este dolor de Nastasia el que conmueve profundamente al príncipe por su capacidad de comulgar con el dolor de las vidas de los demás, pues la primera impresión que en él despierta el retrato de Nastasia es el de una belleza con mucho dolor, asediada por la perdición:^[16] “…ella sabe que este hombre –Rogochin– ha de asesinarla, desde el primer día que la mira; se le revela ese presentimiento todas las veces que le oye hablar; huye de su lado, porque lo sabe, pero torna a él, porque ansía su propio destino”^[17].

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