Etica Social

“la filosofía moral, debe ser importante para nosotros siempre que nos ayude a repensarnos a nosotros mismos en cuanto sujetos surgidos de una realidad socio-histórica específica que ha generado respuestas éticas desde las cuales únicamente se la podrá recibir de modo creador”

Arturo Andrés Roig

Por lo tanto hay que observar el comportamiento de nuestro pueblo, sus valores, actitudes y forma de actuar. Y luego hay que analizarlo y sugerir nuevas pautas de comportamiento que le ayuden en su deseo de ser.

Una lectura ética de nuestra realidad social es muy necesaria. Se ha escrito muchos libros sobre justicia, la verdad, el amor, pero hace falta que analicemos la estructura social de la justicia, la verdad y el amor de nuestro pueblo, tomando los datos fríos y objetivos del aumento del costo de la vida, la distribución del ingreso, la mortalidad infantil, el número de abortos, el porcentaje de matrimonios disueltos, el índice de desempleo, el promedio de calorías en la alimentación, las condiciones higiénicas en que vive la población marginada, el grado de inseguridad social, La interpretación crítica de estos datos constituye uno de los indicadores más claros y objetivos de la moralidad de nuestro pueblo.

Una lectura similar podría ser a través de los acontecimientos diarios, de índole económica, política, deportiva, religiosa, en la lectura y la audición atenta de la información que nos proporcionan los grandes medios de comunicación social encontramos también la imagen objetiva nuestra vida moral.

La ética comienza por tomar en serio e interpretar desde nuestra situación la moralidad de la sociedad en que vivimos. Nuestros patrones de comportamiento están condicionados por la situación de desarrollo y desorganización social que nos caracteriza. Si Colombia es uno de los países con mayor índice de criminalidad y mayor sensación de inseguridad, no se debe a que los Colombianos serán peores que cualquier país de nuestro globo terráqueo, sino a la miseria, el desempleo y la inmoralidad administrativa que se da en ella. El mismo modo de analizarse las causas profundas de la mentira, la desidia, la superstición religiosa, el oportunismo, el clientelismo político, el libertinaje mercantilista, la prostitución, el aborto, la evasión el de los impuestos, la desintegración familiar,

Una tarea de la ética de nuestro país es la recuperación histórica de aquellos pensadores que en el trascurrir de los siglos han defendido los auténticos valores y aspiraciones de nuestro pueblo contra los intereses de los pueblos colonizadores y de las oligarquías nacionales a su servicio.

Pero esto sólo será posible si no se encierran en la búsqueda egoísta de la felicidad del propio sujeto , si resaltan como imperativo moral fundamental, cada uno a su modo, la solidaridad con los oprimidos por el sistema y la responsabilidad que todos tenemos en la injusticia social, con todas las exigencias prácticas que esto conlleva.

La moralidad parte de la conciencia de la situación de opresión en que se encuentra el pueblo, así como los demás pueblos del tercer mundo. Esta situación que atenta contra la dignidad de la persona humana, impide tanto los individuos como los pueblos ser sujetos de su propia historia.

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Entonces desde el punto de vista moral, el sistema justifica esta situación identificando el bien y la perfección con el proyecto propia la totalidad cerrada. Para la moralidad, por el contrario, el bien moral consiste en la práctica de la justicia, que es reconocimiento del derecho del oprimido: respetar al otro como otro, dejarlo ser.

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