La evolución de la noción de "cultura"

En los siglos XV y XVI, empezó a utilizarse para referirse a procesos humanos y sociales. Cultura era un equivalente de civilitas, o sea buenas maneras y modales vistos por las clases altas urbanas. Los libros Pedagógicos eran los que enseñaban esta cultura “civilita”. Se extendió hasta el siglo XX, y muchos libros argentinos incluían lecturas sobre los comportamientos “civilizados”.

En el siglo XVIII, con el Iluminismo, la cultura pasó a ser una cultura letrada y “culta”; y su expresión máxima era la Razón. El iluminismo suponía que todas las culturas avanzaban del salvajismo hacia la civilización europea. Era una versión UNITARIA y racista, que dejaba fuera de la cultura a la mayor parte de la humanidad.

Herder, filósofo alemán de la época, criticó dicha división Francófila y sostuvo que “nada era más indeterminado que la palabra cultura, y nada más ilusorio que su aplicación a todas las naciones y periodos”. La cultura es variada en cada nación, lo cual expresan a través de tradiciones folklóricas.

En fin, Herder logra una cultura UNITARIA, basada en la noción de Folklore, que incluye a toda la humanidad, una unidad nacional en una base cultural folklórica.

Veamos a Argentina, que en 1914 estaba conformada 80% por inmigrantes, una población homogénea, lo cual provocó una “Cruzada Patriótica”, la cual pretendía “argentinizar” a toda la población: conjunto de rituales “patrióticos” para todas las escuelas, se

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