Que Hay Después De La Muerte

“¿Qué hay después de la muerte?, ¿Existe la vida eterna?”

En algunos pasajes de la tan conocida obra dramática “Hamlet” de William Shakespeare, se aborda de una manera bastante explícita el tema de la vida y la muerte, lo que trae consigo una gran cantidad de preguntas existenciales que nos hacemos constantemente, pero que nunca le encontramos una respuesta concreta con fundamentos verídicos que tengan cierto medio de acreditación.

Al leer la obra nos encontramos con un monólogo bastante profundo de Hamlet donde dice, “Existir o no existir, ésta es la cuestión. ¿Cuál es más digna acción del ánimo, sufrir los tiros penetrantes de la fortuna injusta, u oponer los brazos a este torrente de calamidades, y darlas fin con atrevida resistencia? Morir es dormir. ¿No más? ¿Y por un sueño, diremos, las aflicciones se acabaron y los dolores sin número, patrimonio de nuestra débil naturaleza? De la cita anterior podemos desprender que el personaje se plantea el morir como una manera mediante la cual se pasa a dormir un sueño donde las injusticias, dolores y aflicciones del día a día se terminan, pero, ¿Realmente esto es así?

Desde que nacemos, a muchos de nosotros se nos bautiza, acto mediante el cual pasamos a ser católicos, donde un concepto fundamental es “La vida eterna”, pero esta idea se presta para muchas interpretaciones, ya que al tener fe y creer en esto muchos pueden decir, “Si al morir paso a una nueva vida, una vida eterna, donde reine la paz, la justicia y el amor, ¿Para qué sigo en esta vida llena de imperfecciones, donde se da todo lo contrario?”. La interpretación anterior es un pensamiento totalmente válido, que tiene sentido si miramos la vida eterna desde ese lado, pero al analizar detenidamente también podemos pensar, “¿Hay algo que realmente nos compruebe que esto es así? Y aquí nos podemos llenar de preguntas a las cuales no le vamos a encontrar respuesta de ninguna manera, y es aquí también donde toma un rol protagónico nuestra religión, nuestras creencias. En lo personal me considero una persona católica, que cree en Dios, que cree en la vida eterna pero que no ve la muerte o el suicidio como una opción para solucionar nuestros problemas, sino que como un suceso donde dejamos este mundo terrenal para pasar a otro mundo espiritual, donde realmente nadie sabe lo que nos espera, puede que sea un lugar perfecto como el que muchos creemos, pero también es válido pensar que en la muerte todo se acabe, al fin y al cabo todo depende de nuestra manera de pensar y de ver las cosas, donde todos debemos ser respetados independiente cuales sean nuestras ideologías.

Concluyendo esta breve reflexión puedo afirmar que no sacamos nada haciéndonos preguntas existenciales como ¿Qué hay después de la muerte? o ¿Existe la vida eterna? Ya que de la única manera en la que las responderemos es mediante la fe y la

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