ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Congreso Extraordinario de Mexico 1846


Enviado por   •  30 de Mayo de 2020  •  Ensayos  •  3.709 Palabras (15 Páginas)  •  264 Visitas

Página 1 de 15

Título: Congreso Extraordinario de 1846

Por: David Ruiz Limilla

Contenido

Introducción:        1

Preparación para el Congreso extraordinario de 1846        2

Conclusiones:        10

Introducción:

El presente trabajo se propone sistematizar y resumir los principales elementos que aporta el texto La convocatoria, las elecciones y el Congreso extraordinario de 1846 del autor José Antonio Aguilar Rivera, perteneciente al Centro de Investigación y Docencia Económicas.

El texto de Aguilar constituye una investigación sobre los elementos novedosos en cuanto a la forma de elegir y algunas atribuciones que tendría el nuevo congreso, el cual tenía el objetivo de lograr una estabilidad política en México, pero que también ocultamente había planes de establecer la monarquía en México.

José Antonio Aguilera Rivera, autor del texto, es un investigador nacido en la Ciudad de México en 1968, Licenciado en Relaciones Internacionales por el Colegio de México y Doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de Chicago. Es ensayista y escritor. Autor de la sobra de Ulises (1998) y en 1995 fue ganador del premio Carlos Pereyra de ensayo político.

Preparación para el Congreso extraordinario de 1846

El 27 de enero de 1846 se publicó la convocatoria para elegir un congreso extraordinario a través de un método electoral nuevo.

Durante el año 1845 tanto en España como en México se preparaba una conspiración cuyo objetivo era convertir a México en una monarquía representativa y poner en el trono a un miembro de la casa real de España.

Desde ese año un reducido grupo de conspiradores, encabezados por el ministro español, el poeta Salvador Bermúdez de Castro, Lucas Alamán, el comerciante español Lorenzo Carrera, el jesuita Basilio Arrillaga y probablemente el arzobispo Manuel Posada y Garduño, quienes deseaban reinstaurar la monarquía en México.

Durante el gobierno del presidente José Joaquín de Herrera los conspiradores lograron convencer al general Mariano Paredes y Arrillaga. A mediados de 1845 Paredes estaba en San Luis Potosí combatiendo a los rebeldes texanos y a finales de agosto de 1845 ya se había comprometido a trastornar las instituciones republicanas y levantar una monarquía con un Príncipe o Princesa de la Sangre Real de España.

El 14 de diciembre de 1845 el ejército de reserva de San Luis se pronunció contra el gobierno. En el llamado Plan de San Luis se exigía la disolución de los poderes ejecutivo y legislativo. La cláusula tercera especificaba que el ejército ocuparía la capital de la República y convocaría un congreso extraordinario con amplios poderes para construir la nación.

El 15 de diciembre en San Luis Potosí, Paredes aceptaba apoyar la rebelión y advirtió sobre sus propósitos:

             (…) cámaras: se trata de llamar a la nación, para que, sin temor a las minorías turbulentas, se constituya según sea su voluntad, y ponga una barrera a la disolución que por todas partes amenaza se trata de devolver a las clases productoras su perdida influencia, y de dar a la riqueza, a la industria, al trabajo, la parte que les corresponde en el gobierno de la sociedad. (p. 553)

Las guarniciones de Tampico, Querétaro, Veracruz y Ciudad Victoria apoyaron el pronunciamiento y Paredes comenzó su viaje hacia la capital. De igual forma el cuartel general de México se rebeló contra el gobierno de Herrera y apoyó el Plan de San Luis. El líder del levamiento, el general Gabriel Valencia, presionó al presidente Herrera, quien renunció ante el congreso el 30 de diciembre de 1845.

Paredes pudo entrar a la ciudad de México el 2 de enero de 1846, ese mismo día se le adicionaron elementos al plan de San Luis. Las adiciones consistían en crear una junta de representantes de los departamentos, cuyos integrantes designaría Paredes, para nombrar un presidente interino.

[…] el presidente interino expedirá a los ocho días después de que haya tomado posesión de su destino, la Convocatoria para el congreso extraordinario, que se reunirá a los cuatro meses en la capital de la república. (p. 534)

Finalmente, Paredes fue nombrado presidente interino el 3 de enero. Aun así, la Convocatoria no se expidió hasta el 27 de enero de 1846. El sistema electoral que se estableció era completamente nuevo.

El sistema prescindió de la representación de individuos para favorecer los intereses funcionales de clase. Sus antecedentes estuvieron en dos experiencias: la Convocatoria de 1821 expedida por Iturbide y las Bases Orgánicas de 1843.

El documento planteaba que toda clase tenía el derecho de tomar parte en la resolución de las grandes cuestiones de interés popular. Pero los autores de la Convocatoria sabían que no era tarea fácil calcular con exactitud el peso relativo que tenía cada clase social debido a la falta de datos estadísticos.

Los autores de la Convocatoria tenían presente que:

             […] que, si bien es difícil con extremo hacer en tan escasos días una buena ley de elecciones sobre bases enteramente nuevas, es urgentísimo y de la más alta importancia fijar de una vez la suerte del país, acabar para siempre con los gobiernos transitorios, y dar definitivamente paz, estabilidad y orden a nuestra agitada patria. (p. 537)

La Convocatoria también persiguió establecer la elección directa, teniendo en cuenta que cuando más directa es la elección de los diputados, más inmediatamente representan estos la voluntad y opinión de los electores.

La Convocatoria constó de 156 artículos que regulaba los aspectos principales para llevar a cabo la elección de los diputados. El congreso estaría compuesto por 160 diputados que se distribuirían entre nueve clases sociales: propiedad de raíz, rústica y urbana y de industria agrícola (38 diputados); comercio (20 diputados); minería (14 diputados); industria manufacturera ( 14 diputados); profesiones literarias (14 diputados); magistratura (10 diputados); administración pública (10 diputados); clero (20 diputados); y el ejército (20 diputados).

Es importante señalar que a cada provincia se le asignó un número diferente de diputados de cada clase.

Sólo 11 departamentos estaban autorizados a tener representantes de la clase de los comerciantes. Las clases productivas (propietarios, mineros y manufactureros) representaban en conjunto 41% de la representación, los comerciantes 13%, la magistratura y la clase administrativa 12%, los letrados 9%, el clero 12% y el ejército 12 por ciento.

La elección para las clases de propietarios, comerciantes y manufactureros sería indirecta; sin embargo, para las clases de profesiones literarias y mineros sería directa.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (23.4 Kb)   pdf (120.7 Kb)   docx (16.9 Kb)  
Leer 14 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com