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Antecedentes Derecho Notarial

chris100010032 de Marzo de 2014

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Derecho Notarial

CAPÍTULO I.

ANTECEDENTES Y EVOLUCIÓN HISTÓRICA DEL DERECHO NOTARIAL

1. EL NOTARIADO EN LA ANTIGÜEDAD

1.1.Grecia

1.2.Roma

1.3. Época Medieval

1.4. España

1.5. México

1.5.1. Época Precortesiana

1.5.2. Época de la Conquista

1.5.3. Época de México Independiente

1.5.4. Legislaciones Notariales de México antes del Siglo XX

1.5.5. Legislaciones del Siglo XX

1. EL NOTARIADO EN LA ANTIGÜEDAD

En este primer capítulo, pretendemos englobar de una manera concreta los

antecedentes históricos del derecho notarial, que sentaron las bases para que

surgiera esta institución como actualmente la conocemos. Veremos que el derecho

notarial es adaptado de acuerdo a las necesidades surgidas de la etapa histórica

y al lugar en que nacen.

El notariado en sus inicios no se consideraba como figura jurídica, de tal modo

que ni siquiera contaba con fe pública; ésta la adquirió a través del tiempo y

por meras necesidades. Quienes ejercían esta función eran consideradas como

personas que eran capaces de leer y escribir y que auxiliaban al rey o a algún

funcionario de un pueblo para redactar textos.

Los notarios en la antigüedad no eran conocidos con ese nombre, sino por el de

escribas. La función del notario tuvo gran relevancia principalmente en dos

pueblos, el hebreo y el egipcio; que era en donde se les conocía con el nombre

de escribas.

Por lo general, los reyes y funcionarios públicos del pueblo hebreo no sabían

leer y escribir, es por esta razón que se auxiliaban de los escribas para

realizar sus funciones.

Esta función fue colocándose paulatinamente dentro de las funciones de la

administración pública de ese pueblo, lo cual es el antecedente más remoto de

las funciones notariales que conocemos actualmente.

En el pueblo hebreo se conocieron varias clases de escribas, de los que suele

afirmarse que ejercían fe pública, sin embargo, no la ejercían de propia

autoridad, sino que esta dependía de la persona de quien el escriba dependía.

Tal parece que la razón principal por la cual eran requeridos sus servicios era

por sus conocimientos caligráficos, por tal razón no se considera al escriba

hebreo como un verdadero notario.

En estricto sentido, lo que daba eficacia a los actos era el testimonio que

realizaban los escribas.

Lo anterior nos hace ver que las funciones fundamentales del escriba y el

notario actual tienen gran parecido, ya que ambos redactan actos jurídicos y les

dan la notoriedad oficial que la organización en que viven les permite.

En el caso del pueblo egipcio, la función del escriba era similar a la del

pueblo hebreo; sin embargo el escriba egipcio además de saber leer y escribir se

le denominaba al consejero del Faraón, al sacerdote, al magistrado, al

funcionario y al doctor.

Cabe mencionar que entre los egipcios prevaleció el registrador sobre el

escriba, en cambio con los hebreos, este último fue el que se impuso sobre el

primero. Con relación a los sacerdotes, los escribas tenían un carácter

semejante al del notario profesional, el cual se encargaba de redactar

correctamente los contratos; pero estos se auxiliaban a su vez del magistrado,

el cual autenticaba los actos que realizaba el escriba sacerdote, lo hacía a

través de la imposición del sello del magistrado, en virtud de lo cual el

documento que era hasta entonces privado, se le daba el carácter de público.

Debido a que el papiro egipcio es lo más parecido a nuestro papel; más aún que

el ladrillo babilónico o la tabla encerada romana, se considera como el

antecedente más antiguo de la forma de nuestros documentos.

El escriba egipcio fue fundamentalmente un funcionario burocrático indispensable

en la organización en que la administración se apoyaba en los textos escritos.

1.1.Grecia

En Grecia la función notarial predominó sobre la registradora, a diferencia de

lo que sucedía en Roma. En Grecia los notarios asumieron directamente la función

registradora, tanto para los contratos celebrados entre particulares, como para

las convenciones internacionales. En este pueblo existieron oficiales públicos

encargados de redactar los documentos de los ciudadanos, estos oficiales

públicos eran los notarios, los cuales tenían diferentes denominaciones, las

cuales eran: Apógraphos o Singraphos, aveces eran llamados Mnemones o

Promnemones, todos estos nombres eran alusivos a la función escrituraria o a la

recordación y constancia de los hechos que la requerían.

Los Singraphos eran considerados como verdaderos notarios, cuya principal

función consistía en llevar un registro público. Estos sujetos eran muy comunes

en la ciudad de Atenas, en la cual no se otorgaba contrato alguno si no se

inscribía en Registro Público llevado por ellos. Cada tribu contaba con dos de

ellos, los cuales estaban más circunscritos a la familia o gentilicio y gozaban

de grandes consideraciones y honores.

Los Mnemon, Promnemon o también conocidos como Sympromnemon, se consideraban

como los representantes de los precedentes griegos del notario; ya que se

encargaban de formalizar y registrar los tratos públicos y las convenciones y

contratos privados.

1.2. ROMA

Cabe mencionar que el pueblo romano en la antigüedad tuvo un gran desarrollo en

lo que a derecho se refiere, a tal grado, que creó su propio sistema jurídico,

en el cual se basa nuestro derecho actual. Tan es así, que los romanos tuvieron

en su conocimiento conceptos como el de justicia expresado por Ulpiano, que para

la materia que estamos estudiando es de vital importancia, ya que el derecho

notarial debe en todo momento dar a cada quien lo que le corresponde por

derecho.

Justicia: "Constans et perpetua voluntas ius sun cuique tribuendi (la constante

y perpetua voluntad de dar a cada quien lo suyo)".

El Maestro Rafael Preciado Hernández en su obra explica el dar a cada quien lo

suyo como un valor intrínseco a la persona "y que nos manda dar, atribuir o

reconocer a todo ser humano lo que se le debe de acuerdo con su naturaleza,

porque no es un criterio convencional sino objetivo; pues se funda en los datos

constitutivos de la dignidad personal, que son esenciales al ser humano, y que

por esto mismo excluye toda discriminación en el trato a nuestros semejantes,

sin razón objetiva suficiente".

Las funciones notariales en su origen romano carecían de la facultad de

autenticación, al amparo del poder del imperio que se confiere al Pretor. A lo

largo de la existencia del Derecho Romano hubo una multitud de personas a

quienes de modo parcial estuvo encomendada la función notarial.

En Roma la función notarial estuvo atribuida y dispersa a multitud de oficiales

públicos y privados, pero sin que todas las atribuciones de estas personas se

reunieran en una sola.

Se conocen cuatro personas que eran los más característicos de la antigua Roma y

ejercían funciones del tipo notarial, y eran el escriba, el notarri, el

tabularius y el tabellio. Sin embargo el Maestro Giménez-Arnau se refiere a

diversos autores quienes hablan de personas conocidas como tabellio, cursor,

amanuensiis, cognitor, acturarius, axeptor, logofraphis, numerarius, entre

otros.

"Esta variedad de nomenclatura no prueba, en definitiva, sino que la función

notarial está dispersa y atribuida a multitud de variados oficiales públicos y

privados, sin que originariamente se reúnan todas las atribuciones en una sola

persona".

Los escribas acompañaban a los pretores romanos que enviaban a provincia, su

función consistía en extender las actas, escribir los decretos y custodiar en

los archivos las cuentas del Estado.

Desempeñaban el oficio de escribanos al lado de las autoridades constituidas y

daban fe de los actos de éstos. Por las características de estos funcionarios

podrían ser los antecesores de los que actualmente desempeñan fe pública

administrativa, incluso la judicial, pero no así la notarial.

El notarri fue un técnico en la captación de la exposición oral de un tercero

para pasarla por escrito con celeridad valiéndose de signos, abreviaturas,

cifras, etcétera, se consideraba que eran capaces de seguir la rapidez de la

expresión hablada.

Los tabullarius y el tabellio son considerados como los principales antecedentes

romanos del notariado; en comparación con los escribas y el notarri cuyas

funciones se comentaron anteriormente que eran de carácter administrativo. El

tabullarius es una figura que nace por decreto del Príncipe, por tal motivo

pertenece al Derecho Público, este oficial venía a ser una especie de archivero

de documentos privados, además de desempeñar las funciones oficiales del censo y

debido al hábito

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