Comportamiento ético De Los Medios De Comunicación.

PERCEPCIÓN DE LOS ESTUDIANTES DE LA UNIVERSIDAD JAIME BAUSATE Y MEZA SOBRE EL COMPORTAMIENTO ÉTICO DEL NOTICIERO

“ABRE LOS OJOS” DE FRECUENCIA LATINA, CANAL 2 DE TELEVISIÓN,

EN EL AÑO 2013

1.- Planteamiento Del Problema.

1.1. Descripción De La Realidad Problemática.

Un periodista es alguien que, con autorregulación ética y sentido de deber, trata de aproximarse de la mejor manera posible a la realidad.

La ética parte de la filosofía que trata de la moral y de las obligaciones del hombre: la ética del por qué hacemos lo que hacemos y de la responsabilidad sobre ello; así como la reflexión de la moral en sí misma. Se relaciona con la antropología, el derecho, con la ley, y con ciencias empíricas que estudian la conducta humana, como la sociología y la psicología.

La ética estudia qué es lo moral, cómo se justifica racionalmente un sistema moral, y cómo se ha de aplicar posteriormente a nivel individual y a nivel social. En la vida cotidiana constituye una reflexión sobre el hecho moral, busca las razones que justifican la utilización de un sistema moral u otro.

Las Normas Morales son reglas y principios generales que sustentan la acción moral de una persona en relación a ella misma y en los demás. El cumplimiento de las normas morales no obedecen a la existencia de alguna fuerza coercitiva sino en el natural comportamiento del hombre al bienestar personal y colectivo.

La ética esta relaciona con el derecho. La diferencia radica en que la primera tiene, frente a su violación, sanción moral. En cambio el derecho cumple una función coercitivos y sus sanciones son físicas como la cárcel, o privación de derechos.

El derecho fluye del valor mismo que descubrimos en el ser humano, por ser tal, y no por sus cualidades o atributos, o incluso su condición moral.

El Concilio Vaticano II en la Constitución Pastoral Gaudium et Spes, resume bien cuáles son estos derechos: “Todo aquello que le es necesario (al hombre) para llevar una vida verdaderamente humana, como son el alimento, el vestido, la vivienda, el derecho a elegir libremente el estado de vida y a fundar una familia, a la educación, al trabajo, a la buena fama, a obrar conforme a la recta norma de conciencia, a la protección de la vida privada y a la justa libertad también en materia religiosa”.

El hombre como ser racional y parte integrante de la sociedad humana, está sometido a cumplir normas que garanticen el logro del bien personal y social. Debe someterse a modelos de distinto orden que conciernen al bien individual y social.

En el Perú a mediados del siglo XX se establece un primer código deontológico por la

Federación de Periodistas del Perú, que marca una nueva etapa en el compromiso ético de los periodistas peruanos.

Deontología parte del vocablo griego deòn = deber. Es una denominación un poco refinada, equivalente en su sentido a moral y a ética.

La deontología es la ética aplicada. Se ocupa de las obligaciones que surgen en relación al ejercicio de una profesión, y, especialmente, en relación con los aspectos externos que tienen repercusión en la sociedad. La regulación deontológica se expresa en “Códigos” que establecen normas aplicables a la función periodística. Las normas deontológicas, en general, son comunes para todos los códigos. Cada medio puede tener su propio Código Deontológico, sin embargo es recomendable apuntar a una regulación de principios.

La deontología trata del espacio de la libertad del hombre sólo sujeto a la responsabilidad que le impone su conciencia. Asimismo, Bentham considera que la base de la deontología se debe sustentar en los principios filosóficos de la libertad y el utilitarismo, lo cual significa que los actos buenos o malos de los hombres sólo se explican en función de la felicidad o bienestar que puedan proporcionar asuntos estos muy humanistas. Para Bentham la deontología se entiende a partir de sus fines (el mayor bienestar posible para la mayoría, y de la mejor forma posible).

Para comprender un acto humano, primero hay que saber, que es el hombre. Y esta materia corresponde a la antropología, otra rama de la filosofía, la cual estudia al hombre como finalidad. Por tal se desprende, que el hombre es una unidad sustancial de cuerpo y alma. Es decir, todo hombre posee un cuerpo y un alma. Por lo último, podemos señalar, que el ser humano es un fin en sí mismo. Ya que el alma, lo provee de una dignidad íntima.

Como toda actividad profesional que está sometido a principios ético, el periodismo es una profesión doblemente exigente Se trata de encontrar el “justo equilibrio” entre la libertad y la responsabilidad.

El periodismo no maneja solo valor estético o cultural; al servir comunicando, informando a las personas para su recto desempeño en la comunidad, el periodista está tratando con los valores medulares de la convivencia social humana, como son la verdad, la libertad, la justicia, la solidaridad.

Este servicio a los grandes valores de la humanidad muestran el nivel de exigencia y de responsabilidad que sume quien profesa esta actividad.

El periodista debe ser veraz en su actividad profesional; una información debe respetar la integridad de quienes la protagonizan o de terceras personas, obteniéndose siempre con dignidad. Y el periodista debe servir a los intereses de sus lectores y de su empresa, respetando siempre los dos preceptos anteriores. Es que el periodismo debe ser independiente de todos los poderes y la sociología de la prensa y la comunicación, revelan que no lo es en determinados sectores. La prensa es independiente, esa misma prensa que desde el punto de vista constitucional, tiene abierta ella misma la autorregulación ética.

Sobre los procedimientos de autocontrol, dice Barroso:

Los códigos éticos pueden ser definidos como un conjunto de normas deontológicas emanadas de diversos organismos internacionales o nacionales para que los profesionales en este caso los periodistas- conozcan sus obligaciones y deberes, así como sus derechos, a la hora de ejercer con dignidad y honestidad su profesión, anteponiendo siempre el servicio a la verdad y al público antes que a sus propios intereses personales.

Asimismo

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