Descripción arquitectonica de recorrido por el centro histórico

reporte del recorrido

Además de compartir el mismo estilo arquitectónico, los edificios que visitamos también compartían un mismo sentimiento, un sentimiento que va de la mano con la función del edificio. En todas las iglesias por las que pasamos, la fachada principal, tenía tal rigidez, que incluso no siendo católicos, pasar frente a estos edificios, da un sentimiento de respeto, de santidad al lugar, quizá sea por la abundante ornamentación o la magnitud de los edificios (característica que los templos religiosos hoy en día no tienen).

Cuando entramos a la iglesia de Loreto, el estar dentro, casi es igual a sentirse estar en un convento. Los muros de la iglesia son tan gruesos, que no permiten que aya ni un solo ruido al interior, lo cual quita las ganas de querer decir una palabra, es como sentir que en cualquier momento la madre superiora saldrá a callarte.

Muy por el contrarios, estar en el convento de san Francisco, el interior se percibe mas público.

Quizás las demás iglesias tendrían interiores similares a los de la iglesia de Loreto, sin embargo, desde la fachada, el hecho de no tener ventanas da mas a denotar que no se quería una relación de el exterior con el interior, y por la parte exterior, da la sensación de que no cualquiera es bienvenido al lugar.

El abundante uso de imágenes en los nichos y pedestales de la fachada, le dan al edifico la santidad y espiritualidad, para consagrar el edificio e identificarlo como recinto divino, (aspecto característico que pierden los edificios hoy en día, ya que ahora no distinguimos tan fácilmente la función de un edificio, hoy en día hay iglesias que a primera vista, pensaríamos son un museo de arte moderno). Personalmente, opinó que si una persona que no supiera lo que es la religión católica, de ninguna manera, el ver un edificio tan lleno de imágenes, le causaría terror, quizá incomodidad.

Lo que me lleva a concluir, que nosotros en un principio identificamos así nuestros edificios, plasmamos sentimientos y sensaciones que identificasen las funciones de los mismo. Posiblemente hoy en día las características que diferencian un edificio de otro se consigan de distinta manera, y eso ocasiona que nuestros espacios arquitectónicos den sensaciones, en ocasiones confusas. O quizá simplemente sea por las necesidades e ideologías de las diferentes épocas, es decir, hoy en día, una iglesia no tiene la misma jerarquía que en el siglo XVI, incluso ya no hay edificios con mayor jerarquía unos que otros, todos conciben sus espacios arquitectónicos en forma muy similar.

Marín Martínez Luis Alberto

Historia de la arquitectura del Renacimiento al siglo XIX

Grupo: 3AV6

1-Agosto-2016

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