ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Caudillismo

EGLISRAMIREZ29 de Septiembre de 2011

3.075 Palabras (13 Páginas)5.298 Visitas

Página 1 de 13

El caudillismo

Persona que dirige alguna comunidad o cuerpo que actúa como guía o líder

El caudillismo es un fenómeno social y político surgido durante el siglo XIX en Latinoamérica. Consiste en la llegada en cada país de líderes carismáticos cuya forma de acceder al poder y llegar al gobierno estaba basada en mecanismos informales y difusos de reconocimiento del liderazgo por parte de las multitudes, que depositaban en "el caudillo" la expresión de los intereses del conjunto y la capacidad para resolver los problemas comunes. El caudillismo fue clave para la dictadura y luchas entre partidos políticos del siglo XIX. El poder de los caudillos se basaba en el apoyo de fracciones importantes de las masas populares. Este apoyo popular se tornaba en su contra cuando las esperanzas puestas en el poder entregado al caudillo se veían frustradas, y se decidía seguir a otro caudillo que lograra convencer de su capacidad de mejorar el país o la provincia.

Este fenómeno se dio en América Latina durante prolongados períodos de su historia republicana; en algunos casos desembocó en fuertes dictaduras, represiones a la oposición y estancamiento económico y político, pero en otros canalizó las primeras modalidades democráticas y federales en las repúblicas latinoamericanas, así como proyectos de desarrollo autónomo, frente a las expresiones políticas neocoloniales.

Causas

Las causas de la llegada del caudillismo en América Latina fueron principalmente la ausencia de consenso político y las teorías de gobierno utópicas por parte de los aristócratas. Para acceder al poder, los caudillos se rebelaban con sus aliados militares, deponían al gobernante actual, disolvían el Congreso y se autoproclamaban presidentes provisionales. Después de un corto plazo, se elegía a un nuevo congreso y se convocaba a elecciones presidenciales. En las elecciones, salía elegido el caudillo que había presidido anteriormente la revolución y deposición del antiguo gobernante.

Los principales partidarios de los caudillos, aparte de sus hombres de armas de confianza, fueron los miembros de las clases enriquecidas. Así, estos aseguraban un flujo de dinero para el Estado del caudillo de turno y este se comprometía a darles beneficios.

El caudillismo se desarrolló principalmente en México (donde hubo una gran cantidad de presidentes militares en 50 años); en Chile con el gobierno de José Miguel Carrera a comienzos de la república;1 en Perú, donde hubo tres grandes "periodos de militarismo": a los inicios de la república, durante la reconstrucción nacional después de la guerra con Chile, y tras el oncenio de Leguía; en Argentina con el gobierno de Juan Manuel de Rosas; en Colombia con el gobierno de Pedro Alcántara Herrán que promovió a la vez la constitución de 1843; y también en Bolivia, Paraguay, Ecuador y Venezuela.

Algunos de los caudillos de mayor influencia fueron: Jorge Eliécer Gaitán en Colombia, Juan Manuel de Rosas en Argentina, Antonio López de Santa Anna en México, José Gaspar Rodríguez de Francia en Paraguay, José Antonio Páez, Antonio Guzmán Blanco, José Tadeo Monagas en Venezuela, Francisco Franco en España, Jorge Alessandri en Chile, Salazar en Portugal'.

Consecuencias

La inestabilidad política actual es consecuencia de cómo fue organizado el Estado al nacer a la vida republicana, sin base nacional, y también debido a los sucesivos años de enfrentamientos políticos presididos por las diferentes facciones que se disputaban el poder en ese entonces. De esta forma, las repúblicas se constituyeron sobre una base inconsistente, sobre un Estado embrionario, desorganizado económicamente, caótico en el orden político y sin planes de gobierno que sigan disciplina y orden. Por esta razón, la democracia no es totalmente efectiva y se realiza un uso inadecuado de las conquistas del liberalismo, en vez de un correcto uso de la libertad.

El orden impuesto por la fuerza dentro del caudillismo ha quedado como herencia. Además, ciertas características “caudillescas” prosiguen hasta la actualidad. El caudillo, que buscaba gloria y poder, intentaba con sus obras ganarse la simpatía de la población y desprestigiar al máximo al anterior gobernante; así, reorganizaba el gobierno a su antojo y consideraba como malo todo lo que el gobernante anterior hubiese hecho. Hoy en día, muchos gobernantes desprestigian aquello gestado por sus antecesores y lo abandonan, buscando el propio beneficio, o tal vez como una estrategia para su obligada participación en las siguientes elecciones.

Por otro lado, es importante resaltar que, al hablar de caudillismos se habla también de consolidación de fuertes regionalismos, que mermaron el casi inexistente estado-nación. Así, hoy en día aún existen algunos de esos fuertes regionalismos, especialmente en el sur andino, que, a pesar de no ser una consecuencia directa del caudillismo, ayudó a que se solidificaran algunos de ellos. Por esta razón, algunas veces planes unificadores resultan insostenibles.

Política caudillista

Los Caudillos expresaron intereses regionales combinados con sus ambiciones personales. Agustín Gamarra, por ejemplo, representó los intereses del sur andino, especialmente del Cuzco, mientras que Andrés de Santa Cruz, los de Bolivia y Arequipa. Para tener una mejor comunicación en un país mal comunicado establecieron alianzas con hacendados. Eran una posición debajo de los Feudales. los caudillistas se formaron a partir de ver la desigualdad que estaba ocurriendo en el momento de que los españoles llegaron a su territorio imponiendo sus reglas. Además de los grandes líderes en Colombia como Gaitán.

Los caudillos latinoamericanos se caracterizaron por:

1- Poder personal: poseían recursos financieros (eran hacendados, mercaderes y militares, donde se integran el poder- prestigio- economía).

2- Poder de persuasión: por medio de un discurso populista e integrador, adhieren a sus trabajadores como al pueblo de bajos recursos por medio de la retórica simple y dogmática, apelando al nacionalismo, regionalismo y entrega de regalos lo que crea una dependencia hacia su persona.

3- Intereses ocultos: todos poseían intereses específicos, los que trasmitían como una salida única, lo que llevaba a la integración y apoyo de sus objetivos.

4- Manejan la sociedad de acuerdo a sus necesidades: al controlar a todos los actores sociales, por interés, aceptación y a sus oponentes por medio de la represión, integran toda la sociedad bajo sus objetivos. Por lo que las instituciones democráticas lo son en apariencia ya que deciden el destino de la sociedad.

5- Se manifestaron en toda Latinoamérica posterior a las independencias americanas a mediados del siglo XIX y comienzos del siglo XX.

Características del caudillismo en América Latina

Los caudillos tienden a permanecer en su puesto por un periodo extenso de tiempo (continuismo) En tanto que se tiende a despreciar el orden legal y mina, domina, domestica o cancela las instituciones de la democracia liberal, construye las condiciones necesarias para su perpetuación en el poder. La experiencia histórica señala que ningún caudillo permanece poco tiempo en supuesto, y que su salida siempre es forzosa.

Los caudillos generalmente gobiernan de una manera autocrática, que con frecuencia implica la supresión de la oposición, la creación departidos y movimientos oficiales y la supresión de otros. Aunque no siempre lo hace, o no siempre tiene éxito en su intento, el caudillo favorece la formación de partidos únicos o de movimientos que le respaldan y que se proyectan hacia el futuro. El caso del peronismo es el mejor ejemplo de ambas cosas.

Los caudillos han evitado generalmente lo que los estadounidenses llamarían normas democráticas de gobierno; en su lugar, ellos tienden a erigir sistemas estatales orgánicos. Esta situación seda inicialmente con la intervención de los caudillos en las relaciones entre el capital y el trabajo. Por la importancia del sector obrero en las sociedades modernas, la necesidad de controlar a sus movimientos autónomos y aprovechar la energía en su favor, en varios países latinoamericanos se ha experimentado el corporativismo de manera más o menos seria y duradera. Las relaciones laborales, en general, y la organización sindical, en particular, pasaron en forma creciente a ser reglamentadas por el Estado, que se convierte en plenamente orgánico al agregarse otros sectores de la vida económica y política. Brasil y México son los casos clásicos del control corporativista de las relaciones laborales en América Latina, y otros países instauraron su propia variante, como en Argentina durante el gobierno peronista y en Perú durante la presidencia de Velasco Alvarado.

Los caudillos generalmente desarrollan políticas públicas designadas para enriquecerse ellos y a su clientela, a preservar el status quoqueellos han establecido. Desde el vórtice del poder que ejercen, "hacen el bien" repartiendo de manera discrecional los recursos con los que cuentan. En primer lugar, a los que pertenecen al círculo de íntimos y favoritos que les rodean, y luego al "pueblo". Normalmente dirigen su ayuda a sectores determinados y la cobra en obediencia. Tal situación es posible porque usan de manera discrecional los fondos públicos. El erario se convierte en su patrimonio privado, que puede utilizar para enriquecerse y embarcarse en proyectos que considere importantes, sin tomar en cuenta los costos. Para el caudillo populista todo gasto es inversión, y su irracionalidad en materia económica se ha traducido en problemas cuya soluciones lenta y difícil. El resultado

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (20 Kb)
Leer 12 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com