El Papel Del Trabajo En La Transformación Del Mono Al Hombre

“El papel del trabajo en la transformación del mono al hombre”

Introducción

Federico Engels (1820-1895), nacido en Alemania con una familia acomodada, conservadora y religiosa, propietaria de fábricas textiles. Graduado de la Universidad de Berlín, tiempo después fue enviado a Inglaterra frente de los negocios familiares, conociendo las miserias, condiciones de los trabajadores de la primera potencia industrial del mundo, logro plasmar varios libros uno de ellos “El papel del trabajo en la transformación del mono al hombre”, donde contaba con un amigo y colaborador cercano llamado Carlos Marx.

Su obra nombrada anteriormente resulto ser una de las más atractivas en diversos aspectos, donde apoya la teoría darwiniana donde sostienen la tesis que dice que el hombre proviene del mono.

Engels decía que “el trabajo es la condición fundamental de toda vida humana, a tal grado que, hasta cierto punto, debemos decir que el trabajo ha creado al hombre”. Y como punto de partida de este trabajo y herramienta fundamental de nuestros antepasados son sus manos.

Los economistas afirmaban que la fuente de toda riqueza era y es el trabajo. Hace miles de años en una época denominada terciario, en una zona tropical, en un continente hoy desaparecido en las profundidades del Océano Indico, vivía una raza de MONOS antropomorfos muy desarrollada.

Darwin describe estos antepasados como totalmente cubiertos de pelo, orejas puntiagudas, que vivían en árboles y formaban manadas, las manos de estos monos desempeñaban funciones distintas a las de los pies hasta que acostumbraron a prescindir de ellas al caminar y comenzaron a adoptar una postura erecta, para estos antepasados primero fue casual y luego se volvió una necesidad en donde tenían que desprenderse de las manos para ser funciones mas variadas, donde sus manos son utilizadas distintas a sus pies, en donde las manos son utilizadas para recoger, sostener los alimentos, para construir viviendas en las copas de los arboles, para empuñar garrotes, que les sirven para defenderse de sus enemigos, par lazarles piedras o frutos, estos son unos de los ejemplos de la mano del hombre perfeccionada por el trabajo. Este fue uno de los pasos decisivos para el transito del mono al hombre. La mano con el paso decisivo se volvió libre y podía adquirir cada vez mas habilidad, esta adquirida por la herencia y se acrecentaba de generación en generación.

La mano no solo era un órgano del trabajo, si no la mano es algo con existencia propia e independiente. Es un miembro de un órgano sumamente complejo¸ esto como resultado beneficio a todo el cuerpo servido por ella, beneficiándolo.

Al igual que la mano, los monos desarrollaron por necesidad diversos factores para obtener conocimiento, uno de ellos fueron los sentidos como:

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