LA REVOLUCION, LOS AÑOS TREINTA Y LA CONSOLIDACION DE UN ESTADO DESARROLLISTA.

LA REVOLUCION, LOS AÑOS TREINTA Y LA CONSOLIDACION DE UN ESTADO DESARROLLISTA.

Juan Carlos Moreno-Brid y Jaime Ros Bosch

“En 1990, la PAX porfiriana llego a un dramático final con la Revolución Mexicana, una vez más la ausencia de un consenso social –en medio de una pobreza extendida y disparidades agudas en la distribución del ingreso y de la riqueza- se convirtió en un obstáculo para el desarrollo de México...”

Durante la revolución hubo una inestabilidad económica y política importante, además que en la época de reconstrucción post revolución, se vino la Gran Depresión, una crisis muy fuerte en Estados Unidos que repercutió de manera significativa la economía mexicana. Lo que mantuvo a México a flote en esa dura época fueron las exportaciones de petróleo que si bien tuvieron un declive importante mantenían ingresos al país y en menor medida la minería, que si bien no representaba el mayor ingreso, lograba mantener un poco de esperanza en una pronta recuperación.

Se creó una política monetaria, con la cual el gobierno buscaba evitar a toda costa la depreciación del peso y esto lo querían lograr acuñando menos monedas.

Durante el periodo administrativo de Cárdenas, se logró establecer un estado con mayor bienestar social, logro la suficiente autonomía y tener los recursos necesarios, gracias a su buen manejo de las finanzas públicas, para llevar a cabo una política económica coherente.

Se creó el Banco de México, que tuvo su mayor auge durante la gran depresión y sirvió mucho de ayuda, se convirtió en el banco central a principios de los años treinta. Se puso en marcha la reforma agraria y la industria petrolera fue nacionalizada después de varias confrontaciones.

Las exportaciones de petróleo y plata fueron los principales productos de exportación durante los años treinta y gracias a esto se pudo frenar un poco el malestar dejado por la gran depresión y con esto México logro retomar de manera significativa el crecimiento económico.

Por otro lado la manufactura se convirtió en un sector muy dinámico y prolifero para la nación, logrando tener una participación clave en el PIB con un aumento de más del 15% para finales de los treinta. Pero nada comparado con el crecimiento industrial y gracias a la sustitución de importaciones reactivo de manera significativa el sector industrial y trayendo un papel importante en la recuperación de la gran depresión.

Conclusiones:

Después de la revolución vino un panorama complicado para la economía y después otro duro golpe, el de la gran depresión, que gracias a buenos manejos se logró salir adelante y se explotaron de manera correcta los recursos que se tenían, sacando a flote a la nación de una crisis inminente y dejándola con una perspectiva

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