La Sociedad De Los Tres Ordenes. Duby

“La sociedad de los tres órdenes”

Hacia el siglo X, la sociedad se encontraba dividida en tres órdenes, ocupando el primer lugar el clero, que eran los especialistas de la oración. El clero se encontraba exento de impuestos, recibían ofrendas del pueblo, como el diezmo; y además, por la expurgación de pecados cometidos, llegaban a recibir dinero, tierras e incluso tierras con campesinos. Durante el siglo XI y XII creció sin cesar el número de clérigos y monjes.

Sin embargo, no todos estaban tan alejados de la producción, el clero rural, permaneció en su mayor parte al nivel del campesinado, así como algunos eran trabajadores; otros, eran simples consumidores, que gastaban para mayor gloria de dios.

Misma actitud podía verse en los miembros del segundo orden de la sociedad, los especialistas de la guerra, que gastaban para su propia gloria y además, en los placeres de la vida. Era la clase dominante de este tiempo, poseedora de la fuerza. Este grupo, posee la tierra, excepto la parte que, el temor de la muerte le obliga a ceder a dios, a sus santos y a los que lo sirven. Viven en la ociosidad, y consideran a las tareas productivas indignas de su rango. Se dedican a la guerra, al pillaje y es en ello que invierten, se acostumbran a derrochar en fiestas y en banquetes.

El tercer orden está compuesto por los trabajadores, que corresponden a la gran masa del pueblo y sobre la cual, todos coinciden en que debe proporcionar a las dos élites de los oratores y bellatores, los medios necesarios para mantener su ocio y alimento para sus gastos.

Georges Duby “Guerreros y campesinos”

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