Simón Bolívar y la influencia que tuvo en el Perú

Estado de la cuestión acerca de:

Simón Bolívar y la influencia que tuvo en el Perú, durante y después de su independencia, de 1820 a 1830.

Casi dos siglos han pasado, desde que se declaró la independencia del Perú, sin embargo, hasta ahora existen incertidumbres acerca de, por ejemplo, cuáles realmente eran las pretensiones de Simón Bolívar desde que llegó a nuestro país.

Hace unos meses vi una pequeña entrevista en un programa extranjero, al parecer venezolano, que decía “Bolívar muerto por EEUU la verdad”, donde hablan de su polémica muerte y a partir de ese video, me interesé en conocer más sobre su vida y su influencia en el Perú. Además recordaba que en el colegio siempre nos decían que Simón Bolívar fue el libertador del Perú, pero aquí la interrogante, ya que cuando estudiaba en una academia, llevaba un curso de historia en el cual me dijeron que Simón Bolívar trajo consigo muchas desgracias al Perú y no fue más que un oportunista.

Conocer sobre él y la influencia que generó en el Perú me parece muy interesante pues como peruano me gustaría saber cómo sucedieron realmente las cosas. Desde el punto de vista académico, este tema capta nuestra atención pues permite entender la influencia de Bolívar en el Perú, específicamente hablando de territorio.

Si regresamos a los últimos tiempos del virreinato, países como Argentina, Chile, Ecuador, Colombia y Venezuela, que ya se habían independizado, no se podían consolidar sin acabar con la amenaza del ejército realista del Perú, el cual siempre fue la principal posesión de los españoles, ya que en ella había una gran cantidad de riquezas. Afortunadamente, en ese entonces, España misma le había dado la espalda al ejército español, disgustada por el derrocamiento del virrey Pezuela y por las ideas liberales de sus principales jefes, La Serna, Canterac y Valdés. Así que, desde la llegada de San Martín, dicho ejército se defendía acorralado en las inhóspitas cumbres de los Andes.^[1] 

De tal forma, que todas las miradas estaban puestas en la situación de nuestro país, que, después de lograr su tan dichosa independencia, a manos del mismo San Martín, es cuando Simón Bolívar, militar y político venezolano, viene a contribuir para terminar definitivamente con la presencia española que aún existía en el alto Perú.

A pesar de ello se dice que perdimos más de lo que ganamos. Así que, el siguiente estado de la cuestión, nos permitirá entender cómo realmente influyó Simón Bolívar en el Perú durante y después de la independencia de nuestro querido país.

Con el fin de revelar estas interrogantes, esta investigación presentará cinco fuentes, cuyos autores son: Tomas Cipriano, militar, diplomático y estadista colombiano, es considerado una de las figuras más importantes de la historia colombiana; Augusto Mijares, escritor, historiador y educador venezolano. Es principalmente conocido por su biografía de Simón Bolívar, El Libertador; Mario Fabregat, profesor de Historia y Geografía en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE) y magíster en Historia de Europa en la Universidad de Chile^[2]; Herbert Morote, escritor, ensayista y dramaturgo de origen peruano, también fue profesor fundador en la Universidad de Lima; y el novelista, cuentista y periodista Manuel Trujillo quien perteneció al grupo Contrapunto, fue columnista en diversos periódicos y revistas en Venezuela y ejerció la dirección del Suplemento Cultural del diario Últimas Noticias^[3] nos apoyará con su libro donde se tocarán varios puntos de vista acerca de Bolívar.

Se cursaba el año 1820 cuando, después de múltiples manifestaciones indígenas contra los españoles, la Expedición Libertadora procedente de Chile desembarcó en el Perú bajo el mando del general José de San Martín. En su paso por el Perú hubo diversos levantamientos y conflictos bélicos alrededor del país. Una vez que entraron a Lima y luego de no llegar a ningún acuerdo con los españoles, el virrey José de La Serna y sus tropas abandonaron dicha ciudad, rumbo a la sierra central. De tal forma que luego se firmaría el Acta de Independencia y proclamaron la independencia del Perú delante de una multitud de limeños en 1821.^[4]

Paralelamente, el otro gran caudillo del movimiento independentista, Simón Bolívar, quien había dado la independencia al Virreinato de Nueva Granada, la actual Colombia, también había estado interesado formar parte de la independencia del Perú y no iba a parar hasta lograrlo y ser el único que lidere a nuestro país.

La ambición de Bolívar por desplazar a San Martín como el libertador del Perú surgió a medida que fueron aumentando sus triunfos en Venezuela y Colombia, Desde pequeño se le había inculcado el conocimiento de la historia del Perú, de allí nació en él una mezcla de admiración y envidia por la riqueza de este país. Todos estos sentimientos desembocaron en un temor a que el Perú, luego de su independencia, pudiese alcanzar en América del Sur la hegemonía que ya había ejercido en la Colonia. Bolívar tenía suficiente conocimiento que el virreinato del Perú contaba con el apoyo de la aristocracia criolla. Luego, para llenarse de gloria en el Perú y desmembrarlo tenían que ocurrir primero dos eventos: uno, que San Martín fracasara, y dos, poder atravesar Quito, llamado después Ecuador, que estaba en poder de los españoles.^[5]

Lo cierto es que Bolívar venía decidido para quedarse en el Perú, incluso al parecer ya tenía muy claro que San Martín le debía dejar el mando, para lo cual él había pensado en todo, desde el encuentro entre ambos, hasta los argumentos que presentará. Veremos también a continuación cómo poco a poco el Perú iba perdiendo partes de su territorio a manos de él.

En ese entonces, Guayaquil había pertenecido al virreinato del Perú y a pesar que ya se había cedido la nueva Granada a la actual Colombia también se le dio Guayaquil, aun cuando fue con el auxilio de tropas peruanas que ayudaran a declararla parte integrante. La entrada de Bolívar a Guayaquil fue cuidadosamente planeada. Se anunció con la debida anticipación para que el pueblo y sus agentes preparasen arcos triunfales, flores, bandas de música, bailes, etc. A fin de ponerse de acuerdo sobre el fin del dominio español en América, Bolívar y San Martín acordaron tener una conferencia en Guayaquil.^[6] Allí llegaría este último sin sospechar que Bolívar le había tendido la trampa de apoderarse días antes de Guayaquil. Por ello, meses posteriores, tanto Perú como Colombia mantendrían disputas constantes principalmente por el límite que, obviamente para los peruanos, no fue la mejor decisión que tuvo el libertador Bolívar.

El 26 de julio de 1822, en Guayaquil, se dio el encuentro tan esperado entre Simón Bolívar y San Martín, también llamado como entrevista de Guayaquil, sus fines concretos eran discutir la soberanía sobre el Perú y la forma de gobierno más conveniente. Mientras San Martín prefería un régimen monárquico, Bolívar se inclinaba por una república democrática y en la unión de América del Sur.^[7]

También tenían que decidir, entre otras cosas, el alejamiento definitivo de los españoles, ya que en lugares como el alto Perú aún tenían ejércitos instalados, los cuales, a pesar, de la proclamación de la independencia del Perú seguían en pie y no renunciaban a sus posiciones.

Al día siguiente, después de mantenerse en secreto la conversación, hasta ahora, San Martín decidió retirarse, dejando en manos de Bolívar parte de su ejército. Luego llegaría Bolívar al Perú para dirigir el triunfo de las pampas de Junín. El liderazgo patriota en el Perú desapareció, la aristocracia recibió una vez más con los brazos abiertos a los españoles y Bolívar monopolizó todos los poderes.^[8] Con lo cual el destino de la independencia del Perú quedaba enteramente en sus manos, de tal forma que a su vez estaba logrando lo que quiso desde un inicio y lo que también nos traería más repercusiones que seguiremos desarrollando a continuación.

Lo primero que hizo fue terminar con el ejército de José de la Riva Agüero para que luego instruya a Torre Tagle de tal forma que distraiga a los españoles, que aún estaban en el Perú, y así ganar tiempo para después terminar con ellos. Luego Bolívar acusaría a Torre Tagle de negociar con los españoles su expulsión. Así que al final le entregarían a Bolívar todo el poder militar y político.^[9]

¿Traición? Posiblemente, pero ello no desmerece el espíritu libertador que poseía Bolívar, veremos ahora, tal vez, el único gran éxito que tuvo en el Perú, en la famosa batalla de Ayacucho que va a asegurar la independencia del país.

No fue aceptada por todas las fuerzas realistas la rendición de los españoles en Ayacucho sin embargo después de algunos incidentes al final la batalla de Ayacucho fue el último gran enfrentamiento dentro de las campañas terrestres de las guerras de independencia del Perú y significó el final definitivo del dominio colonial español en dicho país concluyendo la independencia del Perú que puso fin al Virreinato. Pero España no renunció formalmente a la soberanía de sus posesiones continentales americanas hasta unos años después. Como recompensa el Congreso del Perú otorgó un millón de pesos de premio al Ejército Unido más otro millón de pesos que agregó el congreso de Bolivia. Lo sorprendente es que los bolivianos nunca pusieron el dinero, y que Bolívar repartió 1,518,316 pesos que salieron de las exhaustas arcas del Perú.^[10]

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