Tlatelolco En El Milagro Mexicano

El milagro mexicano fue un “Boom” económico, político social, y hasta cultural en México, no existe una fecha exacta de inicio y fin, pero se dio en los años comprendidos entre 1940 y 1980 aproximadamente.

Esto se dio ya que en la segunda guerra mundial, se vendió mucha materia prima a países aliados, a cambio de maquinaria de producción, y esta inversión (por así llamarle) Fue muy bien aprovechada, incrementando la economía a niveles donde nunca (antes o después) ha estado.

No sólo esto fue el milagro mexicano, también surgieron organismos de interés social como el ISSTE o el INFONAVIT y se fundó el IPN.

El gobierno podía ser autoritario, pero respetaban los ideales constitucionalistas democráticos.

Ahora no todo fue miel sobre hojuelas, tristemente lo que más se recuerda de lo acontecido en el país durante estos años no es este “milagro mexicano” sino el movimiento estudiantil de 1968.

Este movimiento se fue dando poco a poco, lo que uno puede leer en los textos (aunque algunos testimonios tienen versiones distintas) es que todo comenzó con una riña entre la prepa 8 de la UNAM y la Voca 1 del IPN causada por un partido de football, en la cual intervino el cuerpo de granaderos de manera violenta, los estudiantes se refugiaron el la prepa 1 (Antiguo colegio de San Idelfonso) y el ejército tumbó la puerta de esta con un bazoocaso

Y entraron a detener a los jóvenes que se refugiaron adentro.

La queja principal era que se había violado la autonomía de la UNAM al cometer esos actos violentos y comenzó el movimiento que fue secundado por el rector de la UNAM.

Según lo que he leído en “La noche de Tlatelolco” de Elena Ponyatowska puedo decir que este movimiento le daba vida a los estudiantes, los hacia sentir maduros, les daba una razón, querían defender lo que les correspondía, quería que liberaran a sus compañeros detenidos y desaparecidos, querían justicia, y se sentían pertenecientes a un “algo” .

Bueno, el gobierno tenía esta presión encima mas la venida de las olimpiadas, y se daban el lujo de cerrar dialogo con los manifestantes.

Los intereses se hacían más y poco a poco los maestros, padres, la gente en general, empezó a unirse al movimiento y esto ya era algo muy grande, se hacían marchas pacíficas como la “marcha del silencio” se pedía dialogo con Díaz Ordaz y este se negaba.

El movimiento terminó de la forma más trágica posible, sin más en un meeting en Tlatelolco, específicamente en la plaza de las tres culturas, el ejército fue enviado para controlar a la multitud, del cielo cayó una bengala

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