Cien años De Soledad
aguajeactivado26 de Octubre de 2012
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Juan Pérez Jolote |
|Físico |Delgado, débil, moreno |
|Psicológico |No intenta hacer ningún mal a nadie |
|Económico |Es pobre pero puede ganar dinero fácilmente |
|Filosófico |Es bueno con las personas y siempre las trata de ayudar |
|Religioso |Cree en los dioses como el sol y en dios |
Características de un personaje secundario:
|Sebastián Pérez Jolote |
|Físico |Delgado, fuerte, moreno |
|Psicológico |Le gusta ser el líder, le gusta mostrar autoridad, le gusta abusar de otros |
|Económico |Es pobre y no le gusta trabajar |
|Filosófico |Abusivo, manipulador, mentiroso |
|Religioso |Cree en dioses y en curanderos |
Características de un personaje terciario:
|Funcionario |
|Físico |Débil, moreno, robusto |
|Psicológico |Codicioso y le gusta resolver problemas |
|Económico |Tiene dinero pero no el suficiente para vivir cómodamente |
|Filosófico |A veces abusa de su poder pero siempre intenta hacer lo correcto |
|Religioso |Cree en la virgen, en dios y en dioses como la luna o el sol. |
Narrador:
Es intradiegetico, ya que es el quien narra la historia y se encuentra dentro de ella
Lenguaje del narrador:
Usa un lenguaje coloquial con indigenismos
Opinión personal:
La novela, hablando sinceramente no me causo ningún interés, pero gracias a ella pude darme cuenta de varias cosas o situaciones por las que viven los indios y como son tratados y así darse cuenta que el gobierno y la sociedad no CIEN AÑOS DE SOLEDAD
GRABRIEL GARCIA MARQUEZ
DATOS BIBLIOGRAFICOS
García Márquez, Gabriel (1928-actual)
Escritor, periodista y premio Nóbel colombiano, considerado una de las figuras más representativas de la narrativa del siglo XX.
Vida
Nació en Aracataca, pero muy pronto su familia abandonó esta población atlántica para marchar a vivir a Bogotá. Allí se formó inicialmente en el terreno del periodismo, aunque también estudió derecho. Fue redactor de El Universal, un periódico de Cartagena de Indias durante 1946, de El Heraldo en Barranquilla entre 1948 y 1952, y de El Espectador en Bogotá a partir de 1952. Entre 1959 y 1961, trabajó para la agencia cubana de noticias, La Prensa, en su país, en la Habana y en Nueva York. Debido a sus ideas políticas izquierdistas, se enfrentó con el dictador Laureano Gómez y con su sucesor, el general Gustavo Rojas Pinilla, y hubo de pasar las décadas de 1960 y 1970 en un exilio voluntario en México y España.
El compromiso político de García Márquez está integrado en su obra y se originó en el marco histórico de la Colombia del bogotazo y todo el periodo de violencia que le siguió. Como otros escritores del boom de la Literatura latinoamericana defendió la Revolución cubana, pero, a diferencia de muchos de ellos, sigue apoyando a Fidel Castro y manteniendo polémicas airadas en la prensa y en encuentros con otros escritores sobre la actual situación cubana, especialmente en lo que respecta a los derechos humanos.
Ya premio Nóbel, y precisamente por la repercusión internacional que tiene desde entonces cualquier cosa que haga, aceptó tomar parte en la dirección de la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños, junto con el cineasta argentino Fernando Birri. Y no es que el cargo sea meramente honorífico, pues ha intervenido en varios guiones cinematográficos, tanto de obras suyas como originales.
Publicada en 1967, Cien años de soledad relata el origen, la evolución y la ruina de Macondo, una aldea imaginaria que había hecho su aparición en las tres novelas cortas que su autor había publicado con anterioridad. Estructurada como una saga familiar, la historia de la estirpe de los Buendía se extiende por más de cien años, y cuenta con seis generaciones para hacerlo.La crónica de los Buendía, que acumula una gran cantidad de episodios fantásticos, divertidos y violentos, y la de Macondo, desde su fundación hasta su fin, representan el ciclo completo de una cultura y un mundo. El clima de violencia en el que se desarrollan sus personajes es el que marca la soledad que los caracteriza, provocada más por las condiciones de vida que por las angustias existenciales del individuo.
El realismo mágico (también llamado lo real maravilloso) hace posible que la objetividad de la vida material se vea matizada por la subjetividad de la fantasía. Lo insólito (situaciones parecidas a los cuentos de hadas, levitaciones, premoniciones, la extrasensorialidad presente) da lugar a una atmósfera mágica que atenúa la miseria social y humana, de forma que lo mágico subraya la dureza y desajuste de la realidad, la violencia que domina la vida cotidiana.
OBRAS
Sus primeras novelas reflejan el ambiente de violencia e intolerancia que Colombia vivía en el momento en que las escribió: La hojarasca (1955), El coronel no tiene quien le escriba (1961) y Los funerales de la Mamá Grande (1962). En estas primeras obras ya se percibe una evolución estilística que pasa de la prosa barroca y elaborada de La hojarasca y de algunos de los cuentos de Los funerales de la Mamá Grande al laconismo y la frase desnuda al estilo de Graham Green o de Ernest Hemingway de otros relatos del mismo libro y de El coronel no tiene quien le escriba, una dramática historia en la que ya aparecen algunos de los personajes que reaparecerán en su obra más conocida: Cien años de soledad.
Cien años de soledad (1967) narra en tono épico la historia de la familia Buendía a lo largo de cien años y del pequeño lugar Macondo que acaba sepultado y destruido por las guerras y el progreso. El nombre de Macondo era el de una hacienda próxima a Aracataca, y García Márquez lo convirtió en uno de los referentes geográficos literarios inolvidables, como William Faulkner había hecho con su condado de Yoknapatawpha en Mississippi.
Esta novela, escrita en dieciocho meses durante su exilio en México, muestra ya la escritura y estilo consolidado del autor y sus mundos y obsesiones y, con pequeños matices, constituye el núcleo principal estilístico de su obra. Todo parece arrancar de las leyendas y relatos fantásticos aprendidos en su infancia que le permitieron desarrollar una imaginación desbordada cargada de imágenes obsesivas: es el mundo mágico que se le suele atribuir a este autor. Después añadió su formación literaria que le hace escribir historias lineales, con principio y final secuencial, sobre situaciones comprensibles y reales, personajes identificables y como fondo la historia de Colombia y la denuncia de las injusticias sociales: es el mundo real. De la combinación de estos dos elementos surge el realismo mágico, término que, aunque no agrade a muchos autores y críticos, sirve perfectamente para explicar este género.
Otras obras narrativas importantes suyas son El otoño del patriarca (1975), en torno al poder y la corrupción políticos; Crónica de una muerte anunciada (1981), la historia de un asesinato en una pequeña ciudad latinoamericana; El amor en los tiempos del cólera (1985), una historia de amor que se desarrolla también en Latinoamérica, y El general en su laberinto (1989), una narración ficticia de los últimos días del revolucionario y hombre de estado Simón Bolívar.
También es autor de varios libros de cuentos como La increíble y triste historia de Eréndira y de su abuela la desalmada (1972) o Doce cuentos peregrinos (1992). García Márquez ha despertado admiración en numerosos países occidentales por la personalísima mezcla de realidad y fantasía que lleva a cabo incluso en sus textos periodísticos, como Noticia de un secuestro (1996), un reportaje novelado sobre el narcoterrorismo colombiano. En 1998 publicó su autobiografía.
Recibió el Premio Nóbel de Literatura en 1982 y fue formalmente invitado por el gobierno colombiano a regresar a su país, donde ejerció de intermediario entre el gobierno
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