EL HOMBRE LIGHT Una vida sin valores

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EL HOMBRE LIGHT

Una vida sin valores

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El hombre light es una persona a la que le da todo exactamente lo mismo ya que es muy superficial, no sabe diferenciar entre el bien y el mal, tiene la mente enfocada en cosas materiales y lo peor es que se deja llevar por todo y todos, es decir, la sociedad le forja su personalidad. El hombre light no tiene un juicio propio, sus opiniones cambian con respecto a su entorno.

Siendo un hombre light lo único que buscas es satisfacer tus necesidades, aunque sean innecesarias, por ejemplo, comprar cosas inútiles para sentirte mejor. Lo peor es que, aunque la persona light sacie esa necesidad, a los pocos días querrá comprar otra cosa igual de inservible y así sucesivamente, comprobando que el hombre, en efecto, cada vez es más superficial.

Todos creemos ser auténticos, para nada manipulables, pero enfocando esto al consumismo nos damos cuenta que somos títeres para las marcas publicitarias. Cuando lanzan un nuevo producto o incluso, un nuevo comercial vamos a comprarlo de inmediato, por moda, por “necesidad”, por gusto, etcétera. Y es ahí cuando nos convertimos en esclavos de la publicidad, débiles y completamente vulnerables ante las empresas comerciales y el mercado.

Hedonismo: Placer por encima de todo

Permisividad: Nada es totalmente bueno ni totalmente malo

Con esto podemos decir que a las personas light no les interesa la felicidad. Son conformistas, prefieren su bienestar y vivir bien que ser felices. Que tus prioridades sean cosas materiales y no algo tan simple y barato como ser feliz habla mucho de ti. Y no me mal entiendan, interesarte hasta cierto punto en cosas materiales como lo es el dinero, no es malo, pues de lo contrario no habría gente millonaria, pero como dice la frase:

“Todo en exceso es malo”

¿De qué te sirve tener todo lo material si no tienes con quién compartirlo? ¿De qué te sirve poder viajar por todo el mundo si estás enfermo?

Ordenar sus prioridades sería el primer consejo que yo le daría a una persona light.

“¿La felicidad radica en el bienestar, el dinero, el poder, la fama, la belleza, los honores, los títulos, las distinciones, los placeres?”

Todo esto es considerado como superficialidad y viéndolo de ese modo me siento incluso hipócrita, ya que mi felicidad sí radica en todo lo que se menciona. Si a mí me hubiesen preguntado hace unos minutos “¿qué te hace/haría feliz? Habría respondido que ser exitosa y para mí ser exitosa es ser reconocida, tener poder, dinero, estabilidad económica, saciar mis placeres. Y es ahí a donde quería llegar; todos nos espantamos de las personas que son materialistas, decimos que son lo peor… pero si le preguntas a cada una de esas personas “¿Qué es para ti la felicidad?” Te van a responder con cosas materialistas como tener una casa, estabilidad económica, tener el iPhone más caro, el carro de sus sueños, viajar a París y un largo etcétera de cosas superficiales. Sin embargo, ser feliz es estar en paz contigo mismo, como lo menciona el autor.

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