El Extranjero

El libro “El Extranjero” trata en si acerca de una indiferencia general del personaje hacia la vida y hacia las personas.

Muere la madre de nuestro personaje principal, Meursalt, y naturalmente esperamos algún dolor o pesar de su parte, ya que este es un evento fuerte y traumático para cualquier hombre. A pesar de todo, nos encontramos con un personaje que encuentra este evento como un mero trámite, y hasta como una buena excusa para tener un par de días libres del trabajo. Ignora la edad de su difunta madre, y se niega a ver el cuerpo puesto que no le ve ninguna importancia.

Meursalt comienza a salir con una chica de nombre María, y tiene una relación amistosa con uno de sus vecinos. La diferencia aquí es, él lo hace únicamente para pasar el tiempo. Podría hacerlo o no y sería lo mismo. Todo le da igual, todo es apatía.

Meursalt mata al atacante de su vecino, pero no lo hace en venganza de su compañero. Él lo hace por que puede, por que quiere y posee la libertad de hacerlo. Lo hace para cambiar un día de Domingo, siempre tan monótono.

Por este acto es encarcelado y juzgado. Sólo en este momento se puede notar su preferencia por algunas cosas, que no todo le da igual. Extraña su libertad. Extraña poder estar con una mujer, extraña fumar, pero eso es todo. Está atrapado entre la voluntad y el deseo.

Finalmente, es declarado culpable y condenado a muerte mediante decapitación en una plaza. Como todo lo anterior, lo toma con indiferencia. Es aquí donde podemos observar más reflexión de su parte. Comienza a pensar en su madre y en las historias que contaba ella de su padre, puesto que son el único recuerdo que tiene de él. Aquí comienza a tener la esperanza de ser liberado, únicamente para ir a absolutamente todas las ejecuciones públicas puesto que esta es su única motivación a partir del recuerdo de su padre.

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