MARTÍ Y SU CONCEPTO DE LA AMÉRICA LIBRE

[pic 1]UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA
FACULTAD DE CIENCIAS ADMINISTRATIVAS Y SOCIALES

CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN

Arredondo López Yulise

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Redacción avanzada

MARTÍ Y SU CONCEPTO DE LA AMÉRICA LIBRE

ENSAYO

Dra. Albert Palacios Hilda Graciela              Ensenada B.C., a 30 de septiembre de 2016

América, nuestra dolorosa América, José Martí, tuvo la increíble destreza de escribir un extenso y complejo ensayo sobre lo que solemos llamar nuestra América, en este ensayo de palabras llenas de históricas metáforas, expresa su sentir sobre el desarrollo latinoamericano del siglo 19, además de tocar ese tema, toca muchísimo más, al ser un ensayo tan relativamente intenso que trascendió la época, se vuelve un tanto rítmico para los lectores el leer su tan bien elaborada prosa. Martí, además de tomar consciencia de la fatídica realidad de América, toma la postura de patriota y expresa muy bien su necesidad y lo que espera de toda la población en general. Escuché alguna vez en la letra de una canción, K’naan & Bruno Mars (2009). Ellos nos dicen: “En las calles muchas manos, levantadas, celebrando, una fiesta sin descanso, los países como hermanos” al leer la obra de Martí, el verso de esta canción parece una banal parodia, pero, los países como hermanos, eso es lo que Martí quería lograr con su escrito, solidarizar a los países y motivarlos a unirse, todos como una gran familia, así que esta canción se refiere a otra causa, una festividad utilizada para hacernos olvidar la lastimosa verdad que se vive en el mundo, por lo contrario, el autor de este ensayo, nos pide que abramos los ojos, nos da un llamado a la acción, que nos levantemos a luchar por lo que es nuestro, lo que nos pertenece y de lo que deberíamos estar orgullosos, Nuestra América.

     Desde el primer párrafo, Martí expresa su repudio contra quienes reniegan de sus tierras natales, en la primera línea, tan metafórica como irónica, habla de quienes quieren comerse al mundo, quienes se dejan llevar por cosas tan banales como el poder económico, quienes ven al mundo como su pasarela personal, es a su vez, un llamado a la acción, para dejar de preocuparnos por pequeñeces como pelear por un trozo de tierra, Martí, en su excelente escrito dice que en esta era en la que es preferible un arma en la almohada que los mismos sueños; son las ideas, las ideas, nos dice el, son más importantes que cualquier otra cosa, y son la clave misma del éxito.

     No hay nada que opaque una gran nube de ideas, una gran y buena idea en este tiempo, tan flamante como una fogata en plena noche, utilizarla y moviéndola contra el viento como estandarte, eso tiene gran valor, las ideas puras y poderosas que llamaran corazones.

Al decir Martí que los pueblos que aún no se conocen deben conocerse ya, hace referencia en primera instancia a reconocernos a nosotros mismos, en el interior y exterior, y de esta forma empezar a conocer a los demás, un reconocimiento interno de la extensa diversidad de cada país y pueblo, por pequeño o grande que este sea.

     Claro está que José Martí contaba con una absoluta riqueza en vocabulario, pues en este ensayo expresa perfectamente sus pensamientos con un sinfín de metáforas y fluidas prosas. Estas metáforas, convierten a “Nuestra América” en un texto de difícil lectura, no cualquiera puede comprenderlo a la perfección, su nivel de abstracción es tan elevado, que se pueden entender sus párrafos para diversas situaciones. Además de su ingeniosa prosa, Martí nos muestra un lado sumamente emotivo y un tanto filosófico, pues apela a nuestro lado más sensible al persuadirnos de la importancia que tiene el no sentirse solos y no pelear por cosas que no valen la pena, si bien podemos proyectarnos personalmente, él se refiere exclusivamente a los países como una gran familia.

     ¿Qué pasa si todos los países son una familia? ¿Qué, si son todos hermanos? Y pelear por las tierras como los hermanos lo hacen por un juguete o una porción más grande de pastel, Martí nos plantea esta situación como si fuese real, y al leerlo éste es el sentimiento de realismo, en su ensayo menciona la siguiente brillante metáfora:  

“Los que, al amparo de una tradición criminal, cercenaron, con el sable tinto en la sangre de sus mismas venas, la tierra del hermano vencido, del hermano castigado más allá de sus culpas, si no quieren que les llame el pueblo ladrones, devuélvanle sus tierras al hermano” (Martí, 1891)

Esta extensión el texto puede interpretarse de distintas formas, bien sea la situación en la que estas al leerlo, sin embargo, Martí hace referencia a los países como hermanos, esta situación puede aplicar a diversos países.

     En cada uno de los párrafos de esta obra, se puede notar la riqueza de contextos metafóricos, si bien posee el contexto filosófico, metafórico, emocional y otros, también está dirigido a la política, ya que cuando fue escrito, se luchaba por la libertad de cuba, y fue esta el arma principal de Martí, la palabra, con este y algunos más escritos, el buscaba el apoyo de otros países, el intentaba unir a los países como hermanos, para el apoyo de esta causa.

     Palabra tras palabra, es un llamado a la acción, ¡No más pérdida de identidad! Tras años de sumisión de diversos países, no más casos psicóticos en nuestra América, la historia respalda cientos de casos en que solo queda un averno desierto de dolor e injusticia, con una humanidad que promete destruirse entre sí, con tan solo miles de llantos sin gemido ni fondo siendo inyectados por este veneno de impotencia naciendo  creada y creciente al ver la incapacidad de algunos que reniegan de sus raíces y de su propia madre, y después ya que se ha consumido su vida por completo, llorar lagrimas que no son propias.

     Martí menciona algunos hijos de carpintero que se avergüenza de sus padres e hijos de madres enfermas que las envían a trabajar y viven de sus ingresos, en esto como en diversas partes del texto, sentencia a los nacidos en América que se avergüenzan de serlo, arremete con una gran fuerza contra estos individuos, pero a su vez menciona que la salvación de América es con sus indios, y he aquí proyectada su necesidad de contar con toda la población que le sea posible, al leer cada línea, no se puede evitar un sentimiento de levantarse en armas, ese era su propósito después de todo, que todos países y pueblos, grandes o pequeños lucharan como uno solo, como una familia, y se apoyaran unos a otros como hermanos.

     Reniega profundamente de quienes son nacidos en América y están más influenciados por las tendencias europeas y anglosajonas, esa confrontación con nuestra América y la América que no es nuestra, plasma en su texto diversas interrogantes, como ejemplo de las cientas que pueden surgir en base a estos temas, arrastrando las erres, menciona, como si bien estuviera en la naturaleza del latinoamericano el arrastrar las erres, se demuestra aquí el propio repudio a adoptar esas tantas actitudes de los vecinos países no pertenecientes a nuestra América.

     Este ideario revolucionario de Martí que llama tanto la atención, habla del gobierno, pero también de ciudadanos que creen que la tierra esta para servirles y se quejan de que no se les da lo que desean, pero no se dan cuenta de que son ellos quienes deben servir a la tierra, son las personas quienes deben servir a nuestra América. Martí menciona en esta obra, que el mal gobierno, no sabe cómo gobernar, pues para hacerlo de manera correcta, no es saber cómo se gobierna el alemán, para gobernar correctamente, se debe conocer la tierra gobernada, debe conocer cada elemento de su país, para llegar a un estado de conocimiento puro; (Martí, 1891) “El gobierno ha de nacer en el país. El espíritu del gobierno ha de ser el del país… El gobierno no es más que el equilibrio de los elementos naturales del país”

    Estas líneas me parecieron sumamente reales, lo más genuino de toda la obra, me parece que tiene demasiado sentido, pues un país, no es más que la suma de todos sus elementos, espirituales y diversos, cada uno de los elementos culturales, económicos, y de todo tipo, forma lo que es cada uno de los países, y forma también lo que es nuestra América, y para que sea bien gobernada, se tienen que conocer cada uno de sus elementos, tan explícitamente que pueda recitarlos en un rítmico soneto.

    Martí nos habla de un hombre natural, con esto se refiere a que este hombre no ha sido invadido por lo que ahora llamamos civilización, que no es más que un artificio de lo que solía ser el hombre, es el tipo de hombre que denuncia y grita a todo pulmón lo que ha sido una verdad olvidada, que por alguna parte omitimos conforme fuimos adaptándonos a la civilización moderna, y no hay nada de malo en el progreso, sino en olvidar las raíces que nos dieron vida, y lo que es nuestra tierra y nuestra América.

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