Risto Mejide

Risto Mejide. El método Annoyomics. El arte de molestar para ganar dinero.

El libro comienza con el prologo de Leopoldo abadia, en el que cuenta del método molestia del que va a hablar su libro.

Tras el prólogo, con una introducción cuanto menos chocante, que dice así: la gente es idiota. Cabe destacar un párrafo en el que resume ampliamente lo que desarrolla en estas páginas: “Si juntas a muchos idiotas, tendrás una masa de gente idiota. Si les preguntas sobre cualquier tema, el resultado es lo que llamamos encuesta, sondeo u opinión pública. Si no se lo preguntas pero ellos te lo cuentan igualmente, estarás haciendo un programa de televisión. Y si utilizas muchas urnas para preguntárselo, obtendrás una democracia” Después de esto, seguimos leyendo y nos encontramos con la explicación de qué es este libro y de qué no es este libro. Recalca que no es un libro de autoayuda, ni un ensayo. Lo que quiere transmitir con este libro es el arte de la molestia, y los beneficios que otorgo este arte en el ámbito de la publicidad.

En la primera parte voy a hablar de lo que se entiende por molestia, en la segunda parte explicaré el método Annoyomics, y en la tercera, las conclusiones que se han sacado de las dos partes anteriores.

Primera parte.

En las primeras paginas, para que nos vayamos haciendo a la idea de los beneficios que provoca la molestia, y antes de entrar en los capítulos, Risto nos muestra algunos ejemplos de molestar para crear audiencia. Comienza en el terreno de los automóviles, en el ejemplo de Renault, que diseñó un vehículo que no agradaba a gran parte de los consumidores, pero que al polarizar la opinión publica, logro mayores beneficios. Otro ejemplo es el del director de Ryaner, Michael O’Leary, compañía que ya transporta a 73 millones de pasajeros al año, seis de cada diez de los que llegan a España, y que en plena crisis anunció beneficios por valor de 401 millones de euros. Es la misma persona que anunció en 2009 que cobraría por el uso de los lavabos en los aviones, o que en 2010 decidió que iba a prescindir de uno de los dos pilotos que tienen que ir a bordo por ley. El mismo que utilizó a la Reina de España para hacerse publicidad, y que se puso una nariz de Pinocho para criticar a su competencia ,y que también critica a los sindicatos hasta el punto de prohibir a sus empleados afiliarse a alguno. En definitiva, una persona que sabe utilizar la molestia en beneficio propio. Y otro caso(que en mi opinión es el mas molesto de todos) es el protagonizado por dramaturgo y director de cine estadounidense Neil LaBute (Detroit, 1963) que cosechó triunfos de crítica y público con su montaje teatral The Mercy Seat. En esta obra, ambientada en el 11 de septiembre de 2001, mientras la sociedad estadounidense todavía estaba conmovida por el atentado de las torres gemelas, un trabajador aprovechó la ausencia el su trabajo para hacerse pasar por muerto y asi huir con su amante. Poco después, en una entrevista concedida al diario La Vanguardia, declaró que su principal objetivo con esta obra era disgustar. Textualmente dijo “Prefiero una audiencia disgustada a una desinteresada, porque ésta es la peor ofensa al público que ha decidido emplear su tiempo, que no se puede devolver, en ver una obra”. Pero LaBute no ha sido el único autor en el ámbito del cine o literatura que ha optado por la molestia como base de su éxito. Obras famosas como La última tentación de Cristo, Je vous salue, Marie, La Pasión o El código Da Vinci, que fueron prohibidas en muchos países, han tenido gran éxito en taquilla. Pero no solo molestando a los poderes de la iglesia se alcanzan beneficios. La marca Kalvin Clein lanzo un spot televisivo en el que aparecia la actriz Eva Mendes semidesnuda. Esto provoco gran revuelo entre los consumidores, y muchas televisiones de diferentes países se negaron a emitir este spot. Lo que parecía un fiasco por la negación de este spot acabo siendo un fenómeno viral muy importante. Debido a que nadie quería perderse a la actriz desnuda, portales como Youtube recibieron millones de visitas en busca del video, y así, Calvin Klein se ahorro millones de dólares en la promoción de su anuncio en televison. Aquí en España, el locutar de radio Jimenez los Santos alcanzo gran parte de su éxito molestando, llevando la contraria al poder establecido.

Una vez citados los ejemplos, llevo a cabo esta reflexión: ¿Qué nos pasa? ¿Nos va el morbo? ¿Nos gusta que nos den caña? ¿Nos fijamos en los más molestos? ¿Buscamos que nos polaricen? ¿Cuando tenemos éxito es justo cuando molestamos más? Y lo que suena aún más extraño, ¿nos agrada lo feo? O visto desde la perspectiva opuesta, ¿es bueno molestar? La respuesta es que si, molestar es bueno, muy buenoy a partir de ahora, lo bueno y lo malo significara solo lo que vende y lo que no vende. Y para ello, Risto nos promete tres cosas: la primera, que nos mostrara la verdad, su verdad, pero dando ejemplos en los que esta verdad molesta ha causado benieficios; la segunda, que sea un libro ameno y que lo pasemos bien; y la tercera,que intentara ser lo mas respetuoso posible a la hora de hablar de la molestia.

Capitulo 1. Hablo de la molestia que no necesite insultar.

En este capitulo se habla de molestar sin tener que insultar. Y esto va de la mano de la educación y el respeto. Puedes insultar o molestar sin faltar al respeto ni a la educación, es mas, no hay mayor falta de respeto que mentirle a alguien con buenas palabras para que se vaya contento, ignorando que lo haya hecho mal. Es mas, insultar puede verse como una carencia de ingenio para molestar. Y que quede claro, molestar no es insultar. Molestar es irritar a alguien con palabras, pero no con ofensas. Eso es insultar. De este modo, insultar es demostrarle al mundo que se tiene algún tipo de criterio. Quien no insulta, no opina. Quien no opina, no sabe ni contesta. Y quien no sabe ni contesta, no aporta nada a este mundo. La vida es un conjunto de opiniones, de convencimientos, y es mas, no se conoce a ninguna persona que haya conseguido llegar a algo sino esta plenamente convencido de lo que ha dicho.

Capitulo 2. Molestia HDL.

Aquí, el autor utiliza la metáfora del colesterol con la modestia. Existe un colesterol malo, que daña nuestro cuerpo y que es perjudicial para nosotros. Pero también existe un colesterol bueno, el HDL, beneficioso para nosotros. Pues esto mismo ocurre con la molestia. Existe una molestia mala, una molestia que nos incomoda y hace que seamos peores en nuestros argumentos. Pero también existe una molestia buena, una molestia que buscamos y deseamos, una molestia que nos ayude a VENDER. Y aquí, en el terreno del branding(creación

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