ENSAYO CRÍTICO DE LA PELICULA REGRESO AL FUTURO PARTE III

Esta película es de ciencia ficción y comedia rodada en Estados Unidos.

Director: Robert Zemeckis. Productor: Steven Spielberg

La historia trata de un joven que accidentalmente es enviado al pasado y pone en peligro su propia existencia. Sus protagonistas fueron Michael J. Fox, que interpreta a Marty McFly, y Christopher Lloyd, que interpreta al excéntrico doctor Emmett Brown. El joven de 17 años vive con sus padres y sus hermanos en Hill Valley, California, su padre es un hombre fracasado, tímido y de poco carácter, tiene un trabajo pobre en el que es muy servicial a su jefe Biff Tannen de quien debe aguantar humillaciones y desde la preparatoria le ha hecho la vida imposible. El mejor amigo de Marty es un científico el cual inventa una máquina del tiempo que necesita de Plutonio para poder funcionar Pero cuando le está haciendo su “presentación” a su amigo Marty McFly, aparecen los libios. Marty huirá en el coche, sin darse cuenta que está preparada para funcionar y llevarle al “pasado”. Precisamente al día en el que al buen doctor se le ocurrió la idea de la máquina del tiempo. Para que Marty regrese a su época el auto necesita de una energía la cual se obtenía con el plutonio también había otro elemento como el rayo pero conseguir este también era complicado. En la tercera parte el doctor muere en 1855 Y como ahora el “Delorean” no necesita de Plutonio ni rayos para funcionar, sino que con un convertidor de basura es suficiente, Marty se dispone a regresar de nuevo al pasado, al viejo Oeste, a ayudar a su amigo.

El reloj, como parte central de la historia esta vez en el “salvaje Oeste”. Se volverán a enfrentar con la familia Tannen, esta vez el bisabuelo, “Perro Rabioso”.

Para poner en marcha la máquina del tiempo se tiene que esforzar un poco más haciendo al final que sea empujada por una locomotora en línea recta a velocidades que hasta ese momento no se habían alcanzado.

Existen varias curiosidades en esta película pero dentro de lo que podría o no haber ocurrido con el pasado, el presente o el futuro, mejor no tocar el continuo espacio-tiempo, que sólo nos traerá líos y dolores de cabeza, es mucho mejor disfrutar de las películas con la mente abierta

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