Examen de la escolta

Examen de la escolta

    Cuando empezamos clases en quinto año, el primer día no asistí, ni otros quince días más; que tristeza, me sentí tan mal no tenía fuerzas y mi estómago lo sentí como pelota, pues me enferme del hígado, me dio hepatitis, mi mama hablo con el maestro encargado sobre mi inasistencia y me dieron permiso de faltar el tiempo necesario para mi recuperación; mi hermanita entro a primer año y yo quería acompañarla y cuidarla pero me fue imposible, me sentía tan mal; ya quería conocer a mi maestro saludar a mis amigos correr, jugar y tantas cosas más.

    Cuando por fin fui a la escuela todos mis amigos me preguntaron si ya estaba bien y le dije que si; se acercaban las fiestas patrias y el maestro encargado de bailables enseguida me fue a buscar pues se necesitaba que bailara para esas fechas me sentía muy bien y entusiasmado participe en tal baile que era muy gracioso pues le teníamos que hacer como zopilotes; entre ensayos y lo de mi enfermedad me atrase un poco y nunca pensé que me elegirían para hacer  el examen de concurso para  la nueva escolta; cuando nos mencionó nos dijo que también en los otros grupos de quinto harían la selección, primero realizamos un examen de grupo, después eligieron a ocho de esos ocho hicieron otro examen y eligieron a seis y luego fuimos a un salón los seleccionados para realizar otro examen con los demás grupos en total fueron 18 alumnos.

    Después de realizar el examen estaba ansioso por saber los resultados, ya que el examen lo sentí muy difícil, pasaron los días y un lunes les informaron a todos los alumnos quienes serían los nuevos encargados de llevar la bandera; quede en la escolta y no lo podía creer era el encargado de dar las ordenes, el sargento ni más ni menos. Ensayamos mucho para recibir la bandera y mi uniforme aunque un poco acalorado estaba de lujo.

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