El Fenómeno cultural Bacha Posh, y sus posibles repercusiones psíquicas en niñas de los países de Medio Oriente

UNIVERSIDAD AUTONOMA DE ZACATECAS[pic 1][pic 2]

“FRANSISCO GARCIA SALINAS”

UNIDAD ACADEMICA DE PSICOLOGIA

CAMPUS OJOCALIENTE

Maria Del Socorro Santillan Moreno

Presenta:

El Fenómeno cultural Bacha Posh, y sus posibles repercusiones psíquicas en niñas de los países de Medio Oriente

Para la materia de: Método fenomenológico y Hermenéutico

Docente: Jorge Alejandro Vázquez Valdez

Ojocaliente, Zacatecas, 2016

PREFACIO

Durante una de muchas noches de insomnio mientras deambulaba sobre la plataforma de YouTube, tuve la suerte de toparme con un documental titulado, “She is My Son: Afghanistan´s Bacha Posh, When Girls Become Boys” (Ella es mi hijo: Las Bacha Posh de Afganistán, Cuando las niñas se vuelven niños.)  Después de ver el breve documental de más o menos 27 minutos quede muy intrigada con este fenómeno cultural, así que comencé a leer artículos sobre cómo era que sucedía este tipo de práctica cultural y mi mente comenzó a desarrollar las repercusiones psíquicas que podría suscitar en estas niñas  por tan peculiar forma de vivir; es por eso que decidí hacer mi ensayo final para la materia de Método Fenomenológico y Hermenéutico  sobre el Fenómeno cultural Bacha Posh, y sus posibles repercusiones psíquicas. Solo puedo esperar que estas breves paginas logren captar su interés y habrá para Usted como lo hicieron para mí un mundo completamente distinto a nuestras culturas, tradiciones y problemáticas occidentales.

INTRODUCCION

La palabra Bacha Posh proviene del persa: “بچه پوش‎‎,” que literalmente se traduce a “vestir como niño” es una práctica cultural en partes de Afganistán, Pakistán y de Irán, en donde algunas familias sin hijos escogen a una de sus hijas para que estas vivan, vistan y se comporten como varones. Esta práctica cultural puede parecer muy inusual e incluso traumática para nosotros que tenemos cierto privilegio por haber nacido en los países de occidente, es por eso que podríamos preguntarnos con frecuencia: ¿Porque una familia haría algo así? Es importante recordar las fuertes diferencias culturales que existen en los países de Medio Oriente con respecto a  otras partes del mundo; aunque para nuestra cultura también es muy bien visto el dar a luz a un varón quien pueda prolongar la dinastía de una familia generación tras generación, el contexto es diferente comparado con las familias que viven en países como Afganistán, Pakistán, Irán  u otros del Medio Oriente, donde  carecer de un hijo varón es un estigma social para las  familias musulmanas, capaz de hundirlas en el ostracismo.  Debido a que, en una sociedad patriarcal, solo el hijo varón puede asegurar el futuro del linaje y ser el heredero de los bienes de la familia. La tradición de las Bacha Posh tiene más de un siglo de antigüedad y aun es practicada en la actualidad.  Se cree que su origen está en las épocas de guerra, cuando las mujeres se vestían como hombres para poder luchar como soldados o para protegerse de los saqueos, después de las guerras muchas familias del Medio Oriente comenzaron a reformar esta práctica, tomando a una de sus hijas y convirtiéndola en el varón tanto anhelado por la familia,  hay otras tantas  razones por la cual esto se hace, como para  obtener otro ingreso al dejar trabajar a un miembro más y así ayudar a los ingresos de la familia, las niñas Bacha Posh tienen la libertad de poder salir a trabajar en cosas como vender periódicos, vender vasos de agua , limpiar parabrisas, entre otras cosas. Aunque pueda sonar terrible para un niño pasar por este proceso de negación de su género, los padres de familia le ofrecen un gran incentivo y privilegio a cambio: libertad. El niño puede jugar futbol, correr, andar en bicicleta, caminar en las calles sin que las acechen, no tienen que usar el hijab (velo que comúnmente utilizan las mujeres musulmanas) en la cabeza, pueden trabajar, pueden ver a los ojos a otros, etc. La problemática psicológica

surge desde mi perspectiva no tanto por el tener que convertirse al género opuesto sino más bien porque estas chicas, son obligadas a renunciar a los mismos privilegios que se le otorgaron al convertirse en Bacha Posh, estoy hablando de la libertad de expresión, de vestimenta, de independencia, de equidad de género. Es ahí donde para mí se origina el conflicto psicológico en estas jóvenes, cuando las niñas que son BPs llegan a una edad de madurez adecuada, deben retomar su género original y regresar a ser mujeres para ser casadas. Esto implica renunciar a todo lo que han conocido como normal y retomar el papel correspondiente para la mujer musulmana, de la noche a la mañana toda esa libertad que les proporciono el interpretar al género opuesto se les es arrebatado. Lo que busco en este ensayo es profundizar como es que se permite este fenómeno en una cultura de géneros tan estrictamente definidos, si es aceptado por la sociedad afgana y en específico ¿Qué repercusiones psicológicas puede tener sobre las niñas el dejar de ser BPs para convertirse nuevamente?, y no solo en mujeres sino en mujeres musulmanas, quienes viven en una sociedad meramente patriarcal. En este ensayo expondré y explicare desde un corte interpretativo los objetivos mencionados anteriormente.

Fenómeno cultural Bacha Posh, y sus posibles repercusiones psíquicas.

Ser un bacha posh tiene expiración, generalmente cuando las niñas alcanzan la mayoría de edad, es decir entre los 15 y 18 años de edad deben regresar a interpretar su género original, es decir deben de convertirse nuevamente en mujeres, para así poder ser casadas por los padres. Esta problemática fue la que se me hizo de sumo interés psicológico, en raras ocasiones los padres dejan pasar más tiempo a las niñas BP antes de convertirlas nuevamente en mujeres. Los incentivos para convertirlas de vuelta a niñas son grandes para los padres, la niña puede darse mala fama ya que una adolescente no debe estar cerca de niños de ninguna manera, si un chico la tocara de alguna manera o bien ella inadvertidamente tocara a algún muchacho, ella seria vista como impura y suelta, y eso arruinaría las probabilidades de casarse. Es decir, la fama de toda la familia quedaría manchada. Uno de los grandes problemas con estas niñas es el sentido de identidad, ya que desde temprana edad y por bastantes años se vuelven niños. Prueban la libertar estrictamente reservada para los varones de su sociedad patriarcal, se les permite y enseña a hacer cosas que como mujeres musulmanas jamás podrían hacer, esto abre para ellas un mundo desconocido de maravillas que para nosotros en occidente pueden parecer de lo más común, como utilizar jeans, no tener cubrirse el rostro o la cabeza con el velo obligatorio, el poder trabajar, practicar algún deporte, el poder acudir a la escuela, el aprender un oficio, el ser reconocidas por los hombres de su familia. Puede que al principio se les dificulte comprender porque ellas deben de asumir un papel distinto a su cuerpo, porque ellas deben de cortarse su cabello, vestir como hombres, pero todos estos requisitos pronto se olvidan cuando se les permite andar en bicicleta, acudir a la escuela no tener que hacer quehaceres del hogar etc. A diferencia de las niñas que se podrían considerar “normales” o que interpretan su rol de mujer toda su vida, las BP, están obligadas a pasar por un momento de gran confusión, no es lo mismo un pájaro que nace en el cautiverio de una jaula y jamás disfruto el volar en el aire, a un pájaro que nació libre y después fue capturado a una jaula incapaz de volar de nuevo.  Estas niñas al convertirse de vuelta a mujeres pasan por gran represión ya que la cultura afgana enseña muchas labores a las niñas, que, al casarse, deben de desempeñar en sus hogares, pero si las BPs crecen como niños, entonces como se puede desempeñar como la esposa que un hombre afgano espera, si nada de eso aprendió mientras crecía, esto les genera muchos conflictos en sus vidas matrimoniales y la vida de casada se les hace extremadamente difícil. Ser un niño es lo mejor que le puede pasar a una niña en Afganistán. Con el pelo corto y ropa ancha, estas niñas pasan 16 años de su vida viviendo como si fueran chicos. La pubertad, marca el punto de inflexión en el que hay que retornar al verdadero género. El choque para muchas es enorme. Han pasado 16 años de su vida siendo libres. Ser Bacha Posh significa poder jugar en la calle, ir a la escuela y ayudar a la familia. Ser niña significa vivir encerrada en casa, prepararse para ver el mundo a través de la rendija de un Burca y no tener derecho a recibir una educación. Cuando las niñas BP se convierten en adultas y son ofrecidas en matrimonio sufren un gran desajuste. En primer lugar, porque no se han criado como mujeres y no están acostumbradas a someterse a la sociedad o a un hombre. En segundo lugar, no han aprendido nada de lo que se supone que debe saber una mujer en Afganistán: cocinar, limpiar o atender a su marido. Claro hay unas cuantas excepciones, hay familias que les permiten una “doble” vida a las niñas, fuera de sus casas se deben comportar como varones mientras que dentro deben hacer tareas del hogar cotidianas. Esto puede que facilite un poco el regreso a la interpretación del género femenino, pero no previene del todo los conflictos psicológicos, imaginemos la confusión, la presión y la ansiedad que puede producir el intentar no mezclar sus dos vidas.  Erickson (1968) fue uno de los pioneros al hablar de identidad, refiriéndose a ésta como una afirmación que manifiesta la unidad de identidad personal y cultural de un individuo. Bajo tal perspectiva el desarrollo de la identidad es una tarea larga que inicia en la infancia, adquiere gran importancia en la adolescencia y continúa a lo largo de la vida. Erickson (1968) propuso que la identidad se daba como resultado de tres procesos: biológico, psicológico y social. En lo personal creo que es crucial indagar en cómo les está afectando psicológicamente este cambio drástico de género,” … el escenario se organiza sobre una serie de reglas que delimitan el comportamiento y caracterización de hombres y mujeres reflejándose en el trato diferencial que los padres y las madres dirigen hacia sus hijos e hijas en relación con su propio sexo, el sexo de sus hijos y otras características involucradas con el género como es la identidad.” (Fernández, 1996; Rocha, 2004). Entonces qué efectos tendrá sobre estas niñas el nacer como mujeres luego ser convertidas a hombre y luego nuevamente a mujeres, será algo que las perjudique o será algo que les permita probar la libertad, aunque sea por sus primeros años de vida, es ahí donde se encuentra el paradigma de esta práctica cultural. Es como preguntarse: ¿Cuál de los dos pájaros la tuvo mejor, aquel que nació en cautiverio y no conoció la libertad fuera de la jaula y por lo tanto no tuvo que sufrir el reclutamiento, o el pájaro que tuvo la oportunidad de probar la libertar solo para que se le fuera arrebatada al final?  Refiriéndome al objetico general, como consiguen los padres que este tipo de práctica no les genere problemas, esto se debe a que el gobierno de Afganistán no tiene tan buenos archivos a través de los cuales mantienen la información de los nacimientos. Es por eso que no hay un registro de cuantas niñas actualmente estas interpretando el papel de un varón, no hay ningún tipo de datos que demuestren cuantas lo están haciendo o quiénes son. En cuanto a si es una práctica aceptada por la sociedad, lo es y cada vez se vuelve una respuesta más y más común a la falta de un heredero varón en las sociedades musulmanes rígidas por el patriarcado. Quizás las únicas alternativas que se podrían suscitar es que la práctica de este fenómeno cultural les dé la oportunidad a las niñas musulmanes de probar que pueden hacer y desarrollarse en muchos de los oficios reservados para los varones y de esta forma abrir el camino para que generaciones futuras no se limiten a lo establecido para las mujeres musulmanas. Ceo que es importante observar como la cultura de los países del Medio Oriente el concepto de perfección es lanzado únicamente al nacer como un varón, la mujer en estos países juega un papel tan menospreciado que ni siquiera se le da la oportunidad de demostrar lo que pueden ser capaces de lograr. La práctica de tomar una de sus hijas y convertirla en varón de cierta manera rompe con los limites estrictamente establecidos para las mujeres en los países de Medio Oriente, les brinda la oportunidad para que las mujeres puedan obtener una educación, permite que experimenten todo aquello que de otra forma nunca podrían experimentar. Quizás sea muy difícil romper con los fuertes ideales inducidos del patriarcado, pero son estas mismas mujeres que fueren Bacha Posh las que ahora dirigen movimiento feminista y pelean los derechos de equidad en sus países.

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