ALMA COLECTIVA, LE BON

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

EJIDO – ESTADO BOLIVARIANO DE MÉRIDA

PROGRAMA NACIONAL DE FORMACIÓN EN “PSICOLOGÍA SOCIAL”: COHORTE: 4. SECCIÓN “C”

NOMBRE: ANTONY MARTÍNEZ C. I. 27.533.193

EL ALMA COLECTICA SEGÚN LE BON:

CHIMBANGUELES DEL SUR DEL LAGO.

Los individuos que componen una masa sea el pensamiento individual que sea, sus ocupaciones, genero de vida, inteligencia, o su carácter, por el simple hecho de hallarse dentro de una multitud resurge en él una especie de alma colectiva que le hace pensar, actuar y sentir de una manera radicalmente distinta a lo contrario que es permaneciendo en solitario o de manera aislada, son palabras del reconocido Psicólogo Social Francés Gustavo Le Bon, quien añade también que el individuo Dentro de una multitud se contagia de sus sentimientos sus actos, hasta el punto que sacrifica muy fácilmente su interés

personal al interés colectivo, situación o actitud que se vuelve contraria a su naturaleza cuando se encuentra de manera aislada y de la que el hombre sólo se hace susceptible cuando forma parte de una multitud, o en lo que resume el Psicoanalista Freud, que dice que los seres humanos tienden a repetir los comportamientos que observan en los demás y que se sienten identificados ya sea por temas de religión, nacionalidad, condición social, entre otras, esto hablándose en cuanto a masas nos referimos. En estos temas los miembros se influencian entre sí y comparten un objetivo o interés común junto con sus sentimientos que vienen siendo son los mismos frente a una situación presentada en particular en un escenario. Pero además para que la masa exista dice Mac Dougall (psicólogo inglés de la época de Le Bon) es necesario que algo los identifique y para que esto se forme es necesario el afecto hacia ese algo que el individuo pueda tener. Sin embargo Le Bon también añade que a menudo la masa se comporta como un “niño mal educado o como un salvaje apasionado” y que eso depende en alto grado de lo que haga el líder y que cuando éste la traiciona las consecuencias se expresan en la ruptura entre ambos, generando dispersión y caos, y nuevas identificaciones.

Un ejemplo común del Alma Colectiva, partiendo de lo que ya se ha resumido son los chimbángueles, haciéndose durante todo el año en algunas poblaciones de Sur del Lago donde se ejecutan toques como pago de promesa a San Benito y que de no hacerlo, el peticionario se arriesga a ser castigado y si acaso llegara a morir sin saldar la deuda, existe la convicción de que vagará como alma en pena espantando a los vivos con sus lamentos. Se inician con la presencia de los grupos indígenas que habitaban la zona antes de la llegada de los europeos al Territorio que ocupa el Distrito Sucre del Estado Zulia, que fue poblado por los indios Bobures, Moporos, Tomoporos, quienes habitan en palafitos en la orilla del Coquivacoa; los Torondoies, en la serranía entre lo que hoy es el perímetro de Caja Seca, Nueva Bolivia, Torondoy y sus alrededores; los Jiraharas ubicados en lo que hoy es Arapuey, montaña arriba; los Tucanes ubicados en las márgenes altas del río Tucán, actual centro poblado Tucanizón.  A partir de 1598 comenzaron a ingresar en la zona grandes cantidades de esclavos africanos, que fueron utilizados como mano de obra en la siembra de cacao y tabaco, quienes posteriormente se ligaron a esta prestigiosa celebración.

Dos saxofones, trompeta, trombón, redoblante, bombo, tambores, flautas, maracas y las campanas son uno de los instrumentos y con esto  las voces del pueblo que corean, acompañan al santo en música luctuosa y alegre según el momento, la procesión es iluminada con  cirios, mientras los devotos caminan adorándolo. Cuando es llevado de vuelta a la iglesia y estando allí la música que acompaña su procesión cambia totalmente, los músicos ahora interpretan porros, merengues y otras danzas, mientras los fuegos artificiales arrojan por todas partes sus coloridas formándose el acostumbrado parrandón.

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