LA ANOREXIA

LA ANOREXIA UNA ENFERMEDAD QUE ENGAÑA, CONDENA Y MATA

Desde que el ser humano existe, la relación entre él y la comida ha sido una manera de sobrevivir. La subsistencia es el primer paso para dicha relación: las costumbres, los gustos, los afectos, los estados de ánimo son los otros niveles. Cuando ésta relación se ha perdido, estamos hablando de un trastorno alimenticio. Así, un trastorno alimenticio es la alteración del orden regular de la alimentación. Los trastornos del comportamiento alimenticio más conocidos son la Anorexia y la Bulimia. Estos son enfermedades psiquiátricas con complicaciones físicas, que alteran el estado normal del cuerpo, poniendo en riesgo la salud física y mental. Con síntomas y tratamientos diferentes, pero tal vez con causas y finalidades iguales, pues son enfermedades que pueden llevar a la muerte.

La anorexia, es una enfermedad que engaña, condena y mata. Esta problemática, ha venido en aumento generalmente en los adolescentes y jóvenes de entre 14 y 20 años; se caracteriza por una pérdida del peso corporal producida normalmente por la decisión voluntaria de adelgazar. Las personas con esta enfermedad, manifiestan el temor a aumentar de peso, y tienen una percepción distorsionada y delirante del propio cuerpo que hace que esta se vea gorda, aun cuando su peso se encuentra por debajo de lo recomendado. Por ello inicia una disminución progresiva del peso mediante ayunos y la reducción de alimentos.

La anorexia empieza de manera sutil, la persona no acepta que está enferma, empieza contando la cantidad de calorías que tienen los alimentos, poco a poco deja de comer, y se presentan problemas de concentración, piel reseca, descontrol menstrual, provocan cambios de comportamiento, de la conducta emocional, etc. Cuando se ven a un espejo, ven a una persona gorda y fea, a pesar de que la realidad es otra muy diferente. Para ellas estar gorda es una problema grave, entre otros, como el rechazo y el no tener éxito en la vida. Por estas razones dejan de comer adecuadamente, hacen mucho ejercicio y a veces recurren a “ayudas” como los laxantes y purgantes. Estos últimos usados para eliminar más rápido lo poco que ingieren.

Estas personas desarrollan un carácter fuerte para ser firmes en sus decisiones. Esto los lleva a sentirse bien cuando logran “controlar” la comida que llevan a su boca para así perder peso que supuestamente tienen de más. Finalmente “no sienten hambre” porque en su cerebro, esta palabra no está asociada con los síntomas físicos, como el dolor de cabeza y la fatiga. La palabra hambre inconscientemente la han borrado de su mente, han perdido la capacidad de reconocer sus síntomas. Esto les “ayuda” a verse ante los demás como personas de una sola palabra, capaces de llevar una dieta balanceada y controlar su peso, razón que les hace sentir con poder.

Una de las cosas que influyen en

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