La Celotipia

La celotipia se considera como una enfermedad mental muy común en la actualidad son unos de los principales problemas en las parejas teniendo en cuenta que se considera habitual hasta cierto punto ya que cualquier persona normal puede sentir celos en un momento dado esto a veces causa algunos problemas pero no son demasiado serios ni producen un malestar intenso a ninguno en la pareja pero cuando estos celos se vuelven compulsivos, obsesivos, hasta el punto de llegar a delirar tiende a ser patológicos provocando así una gran dificultad en la relación de pareja.

Por lo general estos celos se generan cuando la persona es insegura o inmadura y es común que los celos aparezcan en la etapa de la juventud y adolescencia ya que es aquí donde el individuo se relaciona de mayor manera con el medio. Los celos producen un estado de ansiedad e inseguridad ante el miedo a perder la atención o cariño del ser querido, normalmente asociamos este sentimiento a las relaciones de pareja, pero también puede darse entre hermanos, amigos, padres, etc. estos manifiestan su miedo a perder su posesión, es decir, consideran que es suyo y no quieren que nadie se los quite. Cuando hablamos de personas celosas nos encontramos con un perfil definido por la pasión, la ansiedad, el neuroticismo e incluso algo de sadomasoquismo, estas personas tienen un profundo sentimiento que pueden venir producidos por el temor a estar solos, esta soledad origina una angustia enorme y aparece el temor de perder a la otra persona. El darse cuenta de que no es indispensable es algo difícil de llevar pero esto acompañado de la soledad que implica les resulta desastroso, resultan teniendo dependencia afectiva, falta de autonomía en el fondo de sí mismo, el celoso esconde una personalidad débil, insegura, carente de autonomía Es un pequeño niño que no soporta la idea del abandono, la idea de que lo dejen solo y su autoestima es tan baja que siente (quizá en forma inconsciente) que cualquier otra persona le puede arrebatar su tesoro, pues cualquier rival vale más que él/ella. Todas las personas que aparezcan en su entorno, y que reúnan ciertas características (edad, valía personal, etc.), se le antojarán al celoso como candidatos a la rivalidad por el mismo trofeo. Piensa que los demás son ladrones en potencia que vienen a él con las pérfidas intenciones de robarle su amor. Esa misma inseguridad hace que el celoso se agarre al objeto de su amor con dientes y muelas, como un niño en edad de transición se agarra a su osito de peluche y no lo suelta ni para dormir.

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