Protagonista Antwone Fisher.

protagonista Antwone Fisher.

Narra la vida de un marino de 25 años, que a causa de sus ataques de ira, es degradado y obligado a seguir una terapia con un psiquiatra de la marina, el Dr. Davenport (Denzel Washington).

Gracias al saber hacer de dicho terapeuta, que conseguirá ganar la confianza de Antwone, conseguirá que se abra, a pesar de las corazas que ha tenido que crear durante su vida, para poder sobrevivir psicológica y físicamente. Y se irá creando una relación que va a trascender lo profesional, para convertirse además de en tutor de resiliencia, en un verdadero padre emocional.

Marcado por la pérdida de su padre, el abandono y rechazo de su madre, el maltrato y abuso vividos en su familia acogedora, y la muerte de su mejor amigo...todo ello no le impidió vivir una vida de lucha, en la que sacó todo lo mejor de sí mismo, en un ejemplo tremendo de resiliencia, que se potenciará en el contacto con el psiquiatra.

Esta figura se dejará impactar por este chico tan excepcional y tan bueno, en todos los sentidos, y se irá transformando paralelamente a la transformación del chico, a lo largo de esta relación profesional-paternal.

Este hombre también muy bueno, le ayudará a dar el paso más temido, de buscar a su familia biológica, para así poder superar esa ira. Pero sin dejarle solo y habiéndole preparado emocionalmente, gracias a toda una labor terapéutica muy bien llevada.

Probablemente esta búsqueda no hubiera tenido sentido sin todo el trabajo anterior de limpieza y aceptación emocional, así como de asumir su verdadera fuerza a pesar del dolor. Y Antwone no hubiera querido ir en esa búsqueda, pues está harto de humillaciones y de sentirse abandonado, pero se apoyará en el amor que puede sentir por su novia y por le propio Dr. Davenport ( que a esas alturas de la película, podríamos decir que lo ha adoptado emocionalmente).

Las escenas de reencuentro son muy emotivas, tanto las positivas como las negativas, pero en ellas podemos percibir la carga humana y bondadosa del protagonista, comprender algo de su pasado y apenarnos y alegrarnos con él por lo que encuentra, tanto lo bueno, como lo malo. Y sobre todo alegrarnos con su autoafirmación como persona, que quizás será lo más importante que saque de esta experiencia, aunque no lo único, pues obtendrá...una nueva vida.

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