COMO ENFRENTARSE A LAS INQUIETUDES DE LA VIDA

Cualquier persona, desea seguridad. Quiere seguridad económica, un lugar hermoso en el cual vivir, trabajo satisfactorio, libertad del temor y tranquilidad de ánimo.

¿Verdad que es difícil lograr todo esto?

¿Quién de nosotros no ha pasado inquietud por su trabajo, su vivienda, su cuenta bancaria o más?

LA INQUIETUD puede afectarnos profundamente. Pudiera compararse a los ruidos parásitos que a veces perturban una bonita canción o música que escuchamos por la radio.

Si las ondas de radio no reciben interferencias, podemos disfrutar de música agradable y relajante. Sin embargo, el ruido desagradable que producen los parásitos puede deformar lo que estamos escuchando y causarnos irritación y frustración.

La inquietud puede tener un efecto similar en nuestra serenidad. Puede agobiarnos hasta el grado de que no podamos atender asuntos de suma importancia.

¿Hemos o seguimos percibiendo estas interferencias en nuestras vidas?

2 Tim 3:1 = “tiempos críticos, difíciles de manejar”.

Y cuando oímos las noticias día tras día, entendemos porque la gente de todo el mundo está intranquila, atemorizada e inquieta por el futuro.

Que escuchamos en las noticias:

- Crisis económicas como la de los “subprimes” en Estados Unidos, que dejo sin hogar a muchas personas

- Guerras y terrorismo = Siria que despierta viejas amenazas como la guerra fría, atentados como los de Paris, o Niza

- Epidemias y desastres naturales como en Haití recientemente

- Desempleo

- Escasez de alimentos y los bienes

- Aumento del costo de la vida, que dificulta cada vez más mantener a la familia.

Muchos de los que estamos aquí, somos emigrantes o hijos de emigrantes. Sabemos muy bien lo difícil que puede ser encontrar un hogar decente o un trabajo que nos permita sufragar los gastos mensuales:

Como el alquiler, a menudo exorbitante, de viviendas que no reúnen las condiciones mínimas.

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