El Cristianismo

ACERCA DE LA REGIÓN COLOMBIANA DEL MAGDALENA MEDIO

Enseguida presentamos la idea de región que orienta nuestras reflexiones y acciones y sobre las cuales edificamos la apuesta de cooperación a favor de la región del Magdalena Medio y su universidad.

1.1 La idea de región que orienta nuestro trabajo

Es evidente que el concepto de región, como cualquier otro concepto referido a un hecho práctico social y territorial, es por naturaleza polémico y elaborado de modo diverso en virtud de diferentes perspectivas teórico-prácticas que afirman diferentes valores e intereses.

En Colombia la idea de región se ha elaborado muy vinculada con las visiones de desarrollo y con las acciones que a partir de las mismas se implementan en los ámbitos gubernamentales o no gubernamentales y nosotros queremos enmarcarla, como bien lo dice Jaime Castro[Pie de página] en un amplio proceso de democratización y participación.

Las acciones gubernamentales se han concretado fundamentalmente desde la década de los sesenta en los planes generales o nacionales de desarrollo, cuyo objetivo principal ha sido la búsqueda del crecimiento económico, dejando de lado variables que conlleven al bienestar integral de las comunidades. En esos planes, además, se destacan componentes regionales y subregionales, en cuya definición las comunidades y la universidad no han jugado un papel destacado. En contraste con eso, por ejemplo, en la región del Magdalena Medio se ha reconocido que la planeación se debe hacer con la participación del Sistema Regional de Planeación, en el cual participan los pobladores, según lo señala José Matías Martínez[Pie de página], “como una instancia de las comunidades para aconsejar lo mejor y viable para el desarrollo de su región”.

Esa participación de los sujetos sociales no gubernamentales, que tienen visiones que favorecen el incremento de la equidad social en un marco de desarrollo planeado, ha ayudado en los últimos años a ganar posiciones coherentes hacia la cooperación regional. Esto fue en parte posible gracias al establecimiento en el país de la elección popular de los alcaldes y la expedición de la Constitución de 1991. Con ello los gobiernos locales se encuentran, en palabras de la Declaración final del Congreso Fundador ”Ciudades, gobiernos locales: el futuro del desarrollo”[Pie de página], con un instrumento adecuado para acentuar la práctica de desarrollo alternativo, pero además para promover la cooperación entre comunidades de municipios vecinos en la búsqueda de soluciones a problemas comunes. Un ejemplo de esta cooperación es el citado por Javier Moncayo[Pie de página],, respecto a los tres municipios de la Cordillera de los Yariguíes, que transformaron la cacaocultura en un proceso de la producción orgánica con soporte técnico de alto nivel, cambiando al mismo tiempo la educación básica primaria y el establecimiento de pautas apropiadas para la financiación y comercialización de sus empresas, reafirmando en la práctica lo que dice el sacerdote de la diócesis del Magdalena Medio, Eliécer Soto[Pie de página], que en la regionalización “los límites deben estar fijados por pautas físicas y pautas funcionales”.

Esta nueva dinámica de cooperación es una buena oportunidad para que la universidad se vincule con las comunidades en la elaboración de estudios y trabajos que produzcan propuestas de desarrollo regional, coherentes con los intereses y necesidades de las mismas y en cuya implementación ayuden a ejercer control en la aplicación de recursos y la evaluación de los logros. En este sentido, la Asociación Morelia y Bananito de Landázuri[Pie de página] considera que la universidad debe responder a las necesidades de desarrollo de las comunidades, ampliar su capacidad de cobertura para facilitar el acceso a la investigación y la tecnología y de esta manera impulsar procesos productivos empresariales adecuados.

Hoy, no obstante el agravamiento del conflicto interno colombiano, se asiste a muchos sucesos de cooperación entre comunidades de municipios vecinos, algunos de los cuales trascienden las fronteras de las actuales estructuras político-administrativas, como se da en los casos de los encuentros regionales pedagógicos, deportivos y de danzas del Magdalena Medio. En la universidad han surgido estudios sobre región y su desarrollo e incluso empiezan a plantearse aplicaciones curriculares relacionadas con el tratamiento de problemas regionales de interés

Del examen de la dinámica de este proceso ha surgido la reelaboración de la idea de región que a continuación seguimos desarrollando:

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