Los amigos verdaderos se dicen la verdad

NÚM.3: Elihú (núm.1). Tema: Los amigos verdaderos se dicen la verdad (It-1 pág. 796)

¿Qué haría usted si un amigo incurre en una falta grave? Lo aconsejara haciéndole ver su falta, o no dirá nada por miedo a perder su amistad.

Por favor habrá su Biblia en el libro de Proverbios 27: 6 Leer…

Este proverbio señala que cualquiera puede colmarnos de elogios, pero solo los amigos verdaderos nos tienen la estima necesaria para señalarnos las faltas graves y aconsejarnos de forma constructiva y cariñosa.

Un excelente ejemplo de esto nos dejó Elihú, Hijo de Barakel el buzita de la familia de Ram y seguramente  pariente lejano de Abrahán.

Elihú estaba presente cuando tres supuestos amigos de Job, se acercaron para consolarlo cuando este se encontraba desanimado. Sin embargo, más que animarlo, estos tres hombres ya mayores, no le dijeron palabras amables a Job, al contrario lo culparon a él por su adversidad, dando a entender que había cometido alguna falta secreta y que Dios lo estaba castigando. Elihù era joven pero sensato, sabía perfectamente que la sabiduría no es una posesión exclusiva de los de edad avanzada, sino que lo que determina que una persona de verdad sea sabia, es el espíritu de Dios. Por lo tanto, confiaba profundamente en dicho espíritu y así pudo discernir correctamente que Job no había reconocido que la vindicación de Jehová Dios era mucho más importante que la vindicación de cualquier hombre, y también que los tres amigos de Job en realidad habían pronunciado inicuo a Dios. Job 32:2-6, 8-9 Leer…

Teniendo en cuenta la amistad que había entre Elihú y Job, y lo mal que lo trataron estos falsos amigos.

¿Qué hubiera hecho usted en la posición de Elihú? ¿Habría tenido el valor de decir la verdad, a pesar de contradecir a otros hermanos y corregir a un amigo?

Muchas personas prefieren mentir con tal de quedar bien con los demás, o tan solo porque no son capaces de contradecir a alguien mayor. Pero ese no fue el caso de Elihú, el escucho con paciencia los argumentos de los demás, así pudo comprender mejor la situación antes de hablar, le mostró a Job que su punto de vista no era equilibrado, pero también lo felicito por su rectitud y le ofreció consejos constructivos.

Su actitud, su valor y la verdadera amistad, llevaron a Elihú a ser un excelente amigo, pues fue capaz de decir la verdad y estimuló a Job a esperar en Jehová. Además, le aseguró que Dios estaba con él y que no conservaría vivos a los inicuos, sino que aquellos que le sirven “acabarán sus días en lo que es bueno”

Hermanos, esforcémonos por ser como Elihú, personas honestas que dicen la verdad a sus amigos cuando es necesario y que corrigen a quienes no hablan con la verdad.

Pero nunca olvide hacerlo con las debidas cualidades que Jehová nos anima a resaltar.

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