Términos de la cosecha

Ten tiempo disponible y escoge un lugar adecuado dónde colocar los frijoles en proceso de germinación. Elige el tipo de frijol que más te guste o aventurarte a germinar las variedades existentes. Recuerda que existen los frijoles negros, los güeros, los rojos y las alubias, así es que escoge entre ellos o úsalos todos. Opta por los más nuevesitos y desiste de los que tienen arrugitas atravesándolos.

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Remojalos en agua tibia por un lapso de tiempo no menor de tres horas. El siguiente paso es germinarlos directamente. Ten a la mano un recipiente el cual puede ser: un frasco de vidrio, una botella de plástico o una cajita de madera. También necesitas algodón que no sea demasiado grueso. Pon agua dentro del recipiente que hayas elegido, ésta no debe cubrir totalmente el algodón. El algodón absorverá el agua y por consiguiente el frijol o los frijoles que coloques encima se verán beneficiados por la humedad y la fuente de luz cercana.

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Coloca tus germinados cercanos a una fuente de luz natural y riégalos diariamente. Lo más importante del proceso de germinado es que les de sol y que tengan siempre agua. Puedes usar varios frasquitos para ponerlos en una especie de invernadero o empezar con uno sólo. S quieres germinar varios al mismo tiempo entonces te será util un tipo de pesera de cristal. Pero si tienes poco espacio y careces de esto, no te preocupes, puedes poner sólo algunos recipientes cerca de la ventana. Cuida que sea una temporada cálida pero no super calurosa. R

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evisa cada día el progreso de los brotes y no olvides regarlos moderadamente. Si sigues estos simples pasos sin duda tendrás éxito y además varios retoños de frijoles que disfrutar. Elimina el mito de que los frijoles engordan, pues son más bien una fuente rica de proteínas y super saludables. Los puedes mezclar para comer con otras leguminosas como las lentejas o el arroz.

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