ALCOHOLISMO EN LA ADOLESENCIA

ALCOHOLISMO EN LA ADOLESENCIA

BEBER LOS FINES DE SEMANA NO HACE DAÑO

Que sea un fin de semana, no el fin de tu vida. El consumo de alcohol durante la adolescencia tiene muchos riesgos. Algunos de ellos son directos porque la ingesta de bebidas alcohólicas es peligrosa para la salud. Otros de los riesgos en el caso de los adolescentes son indirectos y están ligados a los comportamientos derivados del consumo de alcohol. El alcoholismo en la adolescencia a veces supone saltarse esos límites, comenzar a consumir alcohol cada vez que el joven se junta con los amigos, en grandes cantidades y sin pensar en las consecuencias negativas.

El alcoholismo es una enfermedad crónica y progresiva es la ingestión excesiva y descontrolada de alcohol. El alcoholismo es complejo y se desarrolla con el tiempo, poco a poco el alcohol se convierte en una droga para la persona que bebe, que sirve para cambiar el estado de ánimo. En un principio la persona muestra mucha tolerancia al alcohol, pero luego el bebedor comienza a tomar a pesar de sí mismo y el embriagarse se vuelve lo más importante, hasta que la persona pierde el control sobre la bebida. Es aquí donde el alcohol es ya una adicción y la persona siente que no puede dejar de beber, esta adicción es el alcoholismo.

EL ALCOHOLISMO EN LOS ADOLECENTES

Los adolescentes en general, no hablan de alcoholismo  puesto que en general no beben entre semana y no le dan importancia; es algo que se hace normalmente para pasarla bien, sin embargo, sobrepasarse todos los fines de semana y comenzar a depender de ese habito, conlleva también un tipo de alcoholismo, que crea dependencia y adicción. Hay jóvenes que si no beben ya no la pasan bien o no se relacionan adecuadamente, que necesitan el alcohol para sentirse más seguros. Generalmente, los jóvenes que acaban dependiendo poco a poco del  alcohol empiezan a beber también entre semana y a distorsionar sus horarios habituales.

CAUSAS

Entre las causas del consumo de alcohol en jóvenes, las más comunes son:

-Para formar parte de un grupo de amigos.

-Para divertirse más y sentirse bien.

-Para olvidar los problemas.

-Por el gusto al sabor.

-Para “quitarse la vergüenza” para hacer cosas que de otra manera no haría.  

Muchas veces también se presentan otro tipo de factores:

-Problemas familiares (malas relaciones dentro de la familia)

-Problemas sociales (Necesidad de pertenecer a un grupo)

-Problemas escolares (Problemas en la escuela que me llevan a beber para olvidar)

-Problemas de depresión, ansiedad, miedo a crisis de angustia, divorcio o separación de los padres.

RIESGOS DIRECTOS

-Consecuencias negativas para el desarrollo del cerebro.

-Excitación, perdida de la vergüenza y control

-Afecta al juicio y coordinación de movimientos, del habla, etc.

-Afecta la memoria.

-La impotencia y la disfunción eréctil

-Incrementa la vulnerabilidad de los jóvenes frente al consumo de otras sustancias adictivas.

-El consumo excesivo puede llevar una intoxicación etílica (coma e incluso muerte)

RIESGOS INDIRECTOS

Accidentes de tráfico. Una gran parte de los accidentes de tráfico entre los adolescentes están relacionados con el consumo de alcohol y drogas.

Embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual, La falta de control sobre uno mismo que provoca alcohol puede llevar a tener relaciones sexuales sin la protección adecuada.

Violencia. La euforia y falta de control que provoca el consumo excesivo de alcohol pueden llevar a conductas violentas. Los jóvenes se están viendo en medio de peleas o de comportamientos agresivos.

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