Anarquismo
NemesisV25 de Mayo de 2014
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Todo lo que siempre quiso saber sobre Anarquismo
y nunca se atrevió a preguntar
Introducción
El anarquismo es probablemente la corriente política sobre la que se han dicho mayor cantidad de estupideces. En realidad, no tiene nada que ver con creer en el caos, la muerte y la destrucción. Los anarquistas no van por ahí cargados de bombas ni les parece ninguna virtud ir avasallando viejecitas.
No es accidental que la siniestra imagen del anarquista loco haya cobrado tanta aceptación. El Estado, la prensa y todo tipo de instituciones autoritarias utilizan todos los medios a su disposición para presentar la anarquía como un estado impensable de caos y asesinato. Poco podemos esperar de los "traficantes" de poder que, por otra parte, poco poder tendrían en sus manos si nos saliéramos con la nuestra. Necesitan creer en lo esencial de su autoridad y su obediencia para autojustificar sus crímenes. La TV, la prensa y la industria cinematográfica predican la obediencia, y si la anarquía es mencionada, aparece como destrucción descerebrada.
La mencionada necesidad de autoridad está tan arraigada en la mente del ciudadano medio, que la anarquía, que simplemente significa "falta de gobierno", resulta impensable para la mayoría de la gente. La misma gente, por otra parte, admite que los reglamentos, regulaciones, impuestos, intromisiones y abusos de poder (por nombrar algunos) son como mínimo irritantes. Por lo general se piensa que no hay más remedio que aguantar en silencio porque la alternativa de "falta de poder, de autoridad y todo el mundo haciendo su propia voluntad" sería horrible. Sería la anarquía.
Sin embargo existe una variedad ilimitada de sociedades posibles sin Estado, y no todas ellas serían desagradables. ¡Todo lo contrario! Cualquier tipo de sociedad anarquista nos ahorraría las terribles distorsiones que produce el estado. La "parte negativa" del anarquismo, es decir, la abolición del Estado, se verá equilibrada por lo que la sustituya? una sociedad libre y de libre cooperación.
Hay varios tipos de anarquismo, y sus ideas difieren respecto a la organización de una nueva sociedad. Todos tienen en común que el estado deber ser sustituido por una sociedad sin clases y sin violencia (fuerza restrictiva, represión). Es precisamente debido a nuestra creencia en la libertad que nos negamos a establecer pautas muy cerradas. Sólo ofrecemos modelos posibles que se apoyan en la evidencia del día a día. De hecho la sociedad anarquista ya ha existido históricamente e hizo falta nada menos que un asesinato en masa para detenerla.
Otro error típico de aquéllos que saben algo más sobre el tema, es pensar que el anarquismo es una bella utopía, una idea hermosa pero impracticable. De hecho, el movimiento anarquista tiene un largo recorrido histórico y no surgió de teóricos encerrados en sus torres de marfil sino directamente de la lucha por la supervivencia de masas de gente corriente y oprimida. La anarquía siempre ha sido intensamente práctica en sus pretensiones y en su forma de hacer las cosas. El movimiento ha estado muy cerca de abrazar el éxito en varias ocasiones. Si realmente es tan de todo punto inviable, ¿por qué se empeña el Estado en exterminar la anarquía?
Anarquismo elemental
Muy poca gente parece entender el anarquismo pese a que es una idea muy sencilla y clara. Básicamente quiere decir "dirigir nuestras vidas en lugar de que nos manipulen".
No hay nada especialmente complicado en el anarquismo, excepto las terribles discusiones que conlleva, como por ejemplo, "imagínate el caos que habría si todo el mundo hiciera lo que quisiera". Sin embargo, ahora mismo vivimos en el caos. Millones de personas están en el paro, mientras otras están sobrecargadas de trabajo, de un trabajo por demás repetitivo y rutinario. Hay gente que se muere de hambre a la vez que se está arrojando comida al mar para mantener los precios. El aire se encuentra contaminado a causa del humo que desprenden coches muchas veces ocupados por una sola persona.
La lista de locuras y situaciones caóticas en la sociedad actual es interminable.
Incluso los "beneficios" del Estado son en realidad perjudiciales. La Seguridad Social, por ejemplo, se dedica a poner parches como un taller de reparación industrial, y en el fondo es algo parecido. Estos servicios nos hacen dependientes del Estado y lo peor de todo, nos compran por muy poco. Frenan nuestra propia iniciativa de crear una Seguridad Social autogestionada y enfocada hacia nuestras necesidades, no hacia las suyas.
La autoridad, por su propia naturaleza, sólo puede interferir e imponer cosas. Seguro que la gente corriente puede imaginarse alguna forma de organización que impida al Estado la destrucción de sus hogares para construir bloques vacíos de oficinas. Es un principio básico del anarquismo que sólo aquellas personas que viven en una determinada zona tienen derecho a decidir sobre su organización, y sobre los asuntos que conciernen a esa zona.
Todo el casos, a nuestro parecer, deriva de la autoridad y del Estado. Sin clases dirigentes y su necesidad de mantenernos esclavizados no habría Estado. Sin Estado nos encontraríamos en situación de organizarnos libremente según nuestros propios fines. No creemos que pudiéramos dar pie a una sociedad tan caótica como ésta en la que nos ha tocado vivir. La libre organización resultaría en una sociedad mucho más tranquila y equilibrada que la actual, cuyo mayor interés es el del robo sistemático y el exterminio de la mayoría de sus miembros.
Típicos argumentos contra el anarquismo
A menudo nos preguntan cómo una sociedad anarquista trataría a los asesinos. ¿Quién los pararía sin policía?
La mayor parte de los asesinatos son crímenes pasionales y por tanto ni la policía ni nadie los puede prevenir. Esperamos, sin embargo, que en una sociedad más cuerda y menos frustrante no habrá tanta criminalidad.
Nuestros gobernantes dicen protegernos a los unos de los otros. En realidad sólo quieren protegerse a sí mismos y a su propiedad.
Si nosotros, como miembros de una comunidad local, fuéramos dueños de todos los recursos y los colectivizáramos, sería absurdo robar. Un importante motivo delictivo desaparecería.
Estas comunidades necesitarían organizar algún medio con que tratar a aquellos individuos que perjudicaran a los demás. En lugar de varios miles de policías profesionales, todos nos protegeríamos mutuamente.
Las cárceles son un fracaso a la hora de mejorar o reformar a los presos. Los vecinos de una comunidad, conociendo mejor las circunstancias personales de cada cual, aportarían soluciones mejores y más adecuadas tanto para la víctima como para el acusado. Por otra parte, el actual sistema penal es el responsable de la creación de un comportamiento delictivo. Los presos que cumplen una condena larga a menudo se convierten en seres incapaces de sobrevivir fuera de una institución que tome todas las decisiones por ellos. ¿Cómo puede llegarse a la conclusión de que encerrar a unas personas con otras de carácter antisocial (los peores don los carceleros) va a desarrollar en el individuo un modelo de comportamiento responsable y razonable? Naturalmente, lo que ocurre es todo lo contrario? la mayoría de los presos reinciden.
Otra de las preguntas con las que se ha tenido enfrentar el anarquismo durante años es? "Pero quién haría todo el trabajo sucio? Imaginamos que toda comunidad diseñaría un sistema rotativo. ¿Qué tiene de imposible?
Otra pregunta: ¿y qué pasaría con aquél que se negara a trabajar? Se puede aplicar presión social, por ejemplo, condenar al individuo en cuestión al ostracismo. En casos drásticos la comunidad podría verse obligada a expulsar a alguien.
Sin embargo, la gente necesita trabajar. La gente tiene una verdadera necesidad creativa. Fijaos en la cantidad de gente que pasa horas arreglando su coche, o su moto, o cuidando su jardín, haciendo prendas de vestir, creando música. Todas están actividades creativas pueden ser muy entretenidas. A menudos se las considera aficiones más que trabajo, pero es que se nos ha enseñado a considerar el trabajo un tormento que no hay más remedio que aguantar.
En esta sociedad el trabajo es efectivamente un tormento, y naturalmente lo odiamos. Eso no quiere decir que seamos vagos por naturaleza sino que no nos gusta que nos traten como si fuéramos máquinas, obligados a hacer un trabajo en su mayor parte desprovisto de significado, para beneficio de otro. El trabajo no tiene porqué ser así, y si estuviera controlado por la gente que lo desempeña, desde luego no lo sería.
Por supuesto hay trabajos que es necesario hacer, y hay pocas formas de hacer que la recolección de basura sea una ocupación divertida. Todo el mundo debería ocuparse de ello cuando te tocara el turno y sería labor de todos controlar que nadie se escaqueara.
Otro punto importante es señalar que el desempleo es sólo un problema creado por el capitalismo. En un mundo más razonable no habría paro. Todo el mundo tendría menos horas de trabajo porque sólo se producirían los artículos necesarios. Si nos deshiciéramos de la parásita clase dirigente, nos liberaríamos de gran parte de la presión económica que nos obliga a trabajar.
Si todavía no estás convencido
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