Baseball

George Herman Ruth fue uno de los atletas más aclamados de su tiempo. Aún hoy sigue siendo el más grande jugador de béisbol, una leyenda en la cultura norteamericana.

Ruth empezó su carrera profesional de béisbol como pitcher de los Boston Red Sox (Medias Rojas de Boston). Antes de la venta a los Yankees, Ruth ganó 89 partidos durante seis temporadas. Babe Ruth consiguió su primer récord de jonrones en 1920 cuando pegó 54 en la temporada. Después desafió a los críticos que decían que el récord no se podía romper, y bateó 59 jonrones al año siguiente. Eran números impensables para la época. Al final de su carrera, Babe Ruth había bateado 714 jonrones, una marca que duraría muchos años y se convirtió en una leyenda del juego.

Cuando tenía siete años, George Herman Ruth fue confinado en la Escuela Industrial St. Mary de Baltimore por hurto repetido. El padre Gilbert de la escuela lo liberó más tarde para que lanzara en la Liga Internacional de los Orioles de Baltimore y persuadió al manager-propietario de los Orioles, Jack Dunn, a convertirse en el guardian de Ruth, adoptando a Ruth como su "Babe".

En 1914 Ruth fue adquirido por los Medias Rojas, enviado a Providence, regresó a Boston luego de salir airoso en 22 juegos. Ganó 18 juegos para el club de liga mayor en 1915, siguiendo después con 23 victorias en 1916, y lanzó por completo el juego más largo en la historia de Serie Mundial ese otoño, un partido de 14 entradas para ganar a los Dodgers 2 a 1. Babe se hizo primero jardinero en 1918 (aunque todavía lanzaba bastante como para tener 13 y 7 en 1918 y 9 y 5 al año siguiente).

Abandonó el montículo en 1919, sin contar cinco apariciones de camafeo en los próximos 14 años, ganando cada una de ellas, como el único hombre que ha lanzado más de 1,000 entradas y tiene un promedio de bateo de por vida por encima .300 (.304).

En 1918 Ruth encabezó la liga en cuadrangulares (con 11) para la primera vez de una cantidad récord de 12 ocasiones. Harry Frazee, propietario de los Medias Rojas y productor teatral ahogado en deudas se vio obligado a venderlo a los Yankees ese diciembre.

Jugando ahora sus juegos en su hogar en el acogedor Polo Grounds, que los Yankees compartían con los Gigantes, Ruth transformó el juego al batear 54 cuadrangulares; el resto de la Liga Americana tuvo apenas 315. Nadie se ha acercado a su promedio de slugging de .847, excepto él mismo al año siguiente, cuando registró la marca de .846.

Los fanáticos se precipitaban para verlo en su primer año en Nueva York, produciendo la primera asistencia de más de un millón en la historia del beisbol y espoleando a los Yankees a construir un superestadio en 1923, el mítico Yankee Stadium, que se conoció en el futuro como "La Casa que Ruth Construyó".

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