Brujeria Y Tipos De Magia Ensayo

“TIPOS DE MAGIA, BRUJERIA Y QUIEN LA PRACTICA”

TEMA: MAGIA Y BRUJERIA

HIPOTESIS: La magia (negra o blanca) y la brujería existen, y el porqué no es aceptada en sociedad.

OBJETIVO: Demostrar que la magia negra,magia blanca y brujería existen y demostrar que esta puede llegar a ser buena y mala dependiendo de como se use,y dependiendo si la gente la use con el debido respeto que se merece.

METODOLOGIA: Para investigar este trabajo,buscare información por medio de revistas,entrevistas ,libros e internet.

1.1_MARCO HISTORICO: HISTORIA DE LA MAGIA

La magia blanca se diferencia de la magia negra porque su propósito nunca es dañar, al contrario que la magia negra que implica sufrimiento y dolor a otras personas. La división entre estas dos magias se remonta a la Edad Media. En Esoterismos, Magia Blanca.

La historia de la magia se remonta ha miles de años atrás en casi todas las culturas se ha practicado la magia de una u otra forma. Desde los chamanes, adivinos, oráculos.

La Iglesia católica nunca aceptó la práctica de la magia, la condenaba y perseguía. La inquisición perseguía a personas que no consideraba católicas a las que tachaba de brujos para condenarles. La iglesia católica fomento la creencia de la magia como algo demoníaco que solo servía para dañar.

La magia blanca es aquella que usa las corrientes de la naturaleza para lograr sus propósitos. El uso de la magia blanca se asocia a propósitos puros, no con el objetivo de causar daño.

En magia blanca abundan las represenaciones a través de hechizos para potenciar deseos, lograr un amor, conseguir un trabajo, ganar más dinero, evitar el mal de ojo, mejorar la salud. Son deseos frecuentes para los que se realizan, hechizos, conjuros, rituales de magia.

Estos rituales siempre suele usar objetos cotidianos como velas, monedas, elementos alegóricos a lo que se desea lograr. Si es un amor habrá velas o algo rojo que simboliza la pasión. Si es para pedir abundancia puede haber monedas o arroz que simbolizan la prosperidad.

El poder de la fe es inmenso, muchas personas haciendo un ritual de magia blanca han sentido que ahora si podrían triunfar (antes también solo que no confiaban) y eso les ha dado la fuerza para conseguir sus objetivos

La magia blanca tiene mucho de potenciador de deseos, de afecto placebo. Si una persona está pasando un mal momento y a través de un ritual piensa ahora ya todo le saldrá bien, se está enfocando en otra dirección, está pensando en positivo y eso seguramente hará que se sienta mejor.

Los hechizos de magia blanca para atraer un amor o los amarres, solo expresan el deseo de lograr el amor de alguien. Quienes creen que un amarre o conjuro cambiará lo sentimientos de alguien se verán decepcionados.

La magia blanca no busca cambiar el deseo de nadie, ir contra la voluntad de una persona sería causarle un prejuicio. ningún amarre cambia los sentimientos de nadie(afortunadamente), y no hace falta un conjuro para que alguien te quiera. Solo ser tal cual eres y darte a conocer.

Si quieres a alguien que no siente lo mismo por ti, tendrás que respetarlo, de otra manera no sería amor. No te obsesiones, verás que cuando menos lo esperes llegará el amor sin necesidad de magia alguna.

1.2-HISTORIA DE LA BRUJERIA

Cuando pensamos en brujas y brujería seguramente aparece en nuestra mente la escena del acto primero de Macbeth: tres viejas arpías, desdentadas y chismosas, lanzando conjuros y maldiciones alrededor de un caldero humeante, donde se cuece un líquido viscoso y maloliente. Esta es, al menos, la historia que nos quieren hacer creer. Sería interesante no olvidar que es una imagen difundida por la Iglesia, la gran enemiga de la Brujería. Si pudiéramos ver por dentro algunos de los conventículos brujeriles que funcionan hoy en día, posiblemente nos sorprenderíamos...

Y es que la brujería no ha muerto, ni mucho menos. Al contrario, goza de una excelente salud, gracias.

Los Orígenes.

Los estudiosos coinciden en afirmar que los orígenes del Culto (mal llamado brujería por los paganos cristianos) se remontan a tiempos prehistóricos, cuando el hombre veneraba el cielo y la luna, las estrellas, el sexo y los antepasados. Todo poseía un espíritu, un alma que podía ser benevolente u hostil según las circunstancias. Dos grandes ideas o concepciones de la divinidad se hicieron comunes en todas las religiones: una de ellas sería la referente a la creación de Vida, la otra sería el miedo a la Muerte. Este miedo generó la necesidad de creer en una vida más allá de la muerte, y con ella se personificó un dios tenebroso, masculino, señor de la guerra y de la muerte. El Dios Cornudo pintado en la cueva de Ariège en Francia, el Lug de los celtas, el Pan griego, el Satanás de los cristianos. Y con él nació una representación femenina,diosa de la fecundidad, fuerza creadora y regeneradora. La Afrodita griega, la Asarté fenicia, la Ma frigia. La compañera del Cornudo, que se aparea con él para dar forma al mundo. Eros y Tánatos. Durante el Paleolítico la figura del macho predominó sobre la diosa, pues el hombre prefería matar a los animales que multiplicarse. Pero con el Neolítico la mujer, hasta entonces una simple bestia de carga y de placer, empieza a cobrar importancia. La mujer descubre el secreto de la Agricultura, el arte de tejer, de confeccionar cestos y vasijas, y creando poco a poco una sociedad matriarcal que durar aproximadamente hasta el séptimo mileno antes de Cristo, cuando los hombres realizan una auténtica revolución cultural, someten a las mujeres y "casan" a las antiguas diosas con los nuevos dioses guerreros. El Cornudo vuelve a reinar.

La evolución

Las viejas diosas madres (latín mater=materia) han sido vencidas, pero no derrotadas. Pese a que simulan agachar la cabeza continúan al acecho, aparentemente a la sombra de sus maridos, y se presentan ante los hombres como una deidad bienhechora, creadora y preservadora de vida, a la que los hombres y las mujeres suplican que interceda por ellos ante su poderoso marido. Calladamente, el culto de las diosas-madres continuó con más fuerza que nunca. Incluso cuando el mundo cambió, y llegaron a los altares de las ciudades dioses monoteistas, como Atón, Ahura-Mazda o Jehová, las clases populares campesinas

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