CARACTERÍSTICAS GENERALES DEL NIÑO Y LA NIÑA HASTA LOS 6 AÑOS. FACTORES QUE INTERVIENEN EN SU DESARROLLO

TEMA 1.

CARACTERÍSTICAS GENERALES DEL NIÑO Y LA NIÑA HASTA LOS 6 AÑOS. FACTORES QUE INTERVIENEN EN SU DESARROLLO. ETAPAS Y MOMENTOS MÁS SIGNIFICATIVOS. EL DESARROLLO INFANTIL EN EL PRIMER AÑO DE VIDA. EL PAPEL DE LOS ADULTOS.

1.- introducción         1

2.- características generales del niño y la niña hasta los 6 años         1

3.- principales factores que intervienen en el desarrollo         1

• La actividad        1
• La interacción social        2

4.- etapas o momentos más significativos         2

• Desarrollo cognitivo        2

• Periodo sensoriomotor        2
• Periodo preoperacional        3

• Desarrollo físico        3
• Desarrollo socio-afectivo        3

5.- el desarrollo infantil durante el primer año de vida         4

• Desarrollo físico y psicomotor         4
• Desarrollo neurobiológico        5
• Desarrollo de la inteligencia         5
• Desarrollo sensorial        6
• Desarrollo social y afectivo        6
• Lenguaje        7

6.- el papel de los adultos         7

7.- conclusión         8

8.- biblografia        8

1.- INTRODUCCIÓN:

El tema que nos ocupa es de gran importancia para comprender el desarrollo de la persona en todos sus aspectos. La etapa que comprende desde el momento del nacimiento hasta los seis años de vida no es un mero período de transición hasta la escolaridad obligatoria, sino que más bien posee un alto valor psicopedagógico en sí misma y como tal debe ser estudiada.

El ser humano tiene una gran capacidad de cambio y transformación. A esta capacidad de cambio se le han dado distintas interpretaciones. Desde la perspectiva innatista se afirma que el desarrollo está en el hombre desde su nacimiento (genético); mientras que desde el punto de vista ambientalista, el entorno es el origen de toda transformación. Ambos consideran a la persona como sujeto pasivo de sus transformaciones.

Actualmente se considera a la persona como sujeto activo de un proceso de construcción y adquisición de sus logros y transformaciones.

2.- CARACTERÍSTICAS GENERALES DEL NIÑO Y LA NIÑA HASTA LOS 6 AÑOS:

Toda elaboración mental realizada por un niño le afecta globalmente, e incluso corporalmente, y no existe ningún acto corporal a su vez, que no afecte a todo el niño, incluida su mente.

Cada niño o niña tiene un modo particular de sentir y actuar, su originalidad incontrovertible que lo hace totalmente distinto de otros, irrepetible, único.

A lo largo de la vida de un mismo sujeto y dependiendo de factores tales como la historia personal, el contexto social, la edad, etc., se dan diferentes formas de concebir la realidad y de relacionarse con el medio físico y los demás. A este proceso físico de enriquecimiento progresivo de las posibilidades individuales es a lo que denominamos desarrollo.

El niño, desde el momento de nacer, dispone de posibilidades de intervenir activamente en su entorno. El tipo, la intensidad o las formas de intervención pueden ir variando a lo largo de su desarrollo personal, pero le acompañarán en toda su vida.

El niño dispone de la capacidad de recibir y originar placer. Esta potencialidad infantil no solo no debe ser negada por diversos medios de ocultación, inhibición o represión, sino que debe enriquecerse y ampliarse.

3.- Principales FACTORES QUE INTERVIENEN EN EL DESARROLLO:

La posición constructivista sitúa la clave del desarrollo en la interacción entre herencia (Piaget) y ambiente (Vygotsky). Veámoslas:

• La actividad: Por un lado tenemos las actividades auto estructurantes, que serían aquellas en las que el niño/a planifica, ejecuta y reflexiona en torno a una acción o conjunto de acciones determinadas. Esta actividad no sólo aporta información concreta acerca del medio sobre el que se actúa, sino que incide directamente sobre las estructuras internas de conocimiento del niño (esquemas de acción o pensamiento). Son las actividades en las que el niño/a interviene en el medio pero que, simultáneamente, es modificado por el propio medio.

Para Piaget el niño es un ser activo, curioso que se interesa por todo lo que le rodea y por él mismo. De manera espontánea o guiada entra en interacción con su medio (siempre social y físico) a través de un doble proceso de asimilación-acomodación en búsqueda de una situación de equilibrio cada vez más estable, para desequilibrarse otra vez en contacto con el medio y volver a reequilibrarse en una continua evolución o desarrollo.

• La interacción social: Por otra parte, Vygotsky plantea que cuando hablamos de “el medio”, no solo podemos referirnos a su dimensión física y natural, sino que, y en especial en el ser humano, hemos de considerar la gran relevancia que juega la interacción socio-cultural en nuestra relación con el medio. El niño desde su nacimiento se incorpora a un mundo social que se caracteriza básicamente por la existencia de procesos interactivos. En estos procesos, los distintos sujetos que en él intervienen juegan siempre un papel activo.

Muy interesante, para explicar estos procesos interactivos y sociales, resulta el concepto enunciado por Vygotsky de “Zona de Desarrollo Próximo (ZDP). Conviene diferenciar entre lo que un niño es capaz de hacer y aprender por sí solo y lo que es capaz de hacer y aprender con el concurso de otras personas. La distancia que separa estos dos puntos que Vygotsky llamó ZDP delimita el margen de incidencia de la intervención educativa (la enseñanza) para poder generar el desarrollo en el niño. Lo que el niño aprende en colaboración con otras personas puede ser capaz de realizarlo más adelante de forma independiente.

Por tanto, el factor que para Vygotsky influye directamente en el desarrollo del niño es el aprendizaje, que al pasar del nivel social al individual generará nuevas ZDP para poder seguir desarrollándose gracias al proceso de aprendizaje.

4.- PARTICULARIDADES EN LA EVOLUCIÓN DEL NIÑO: ETAPAS O MOMENTOS MÁS SIGNIFICATIVOS.

• DESARROLLO COGNITIVO: En su desarrollo normal, el niño y la niña hasta los 6 años ha de pasar por dos estadios evolutivos distintos según la descripción realizada por Piaget:

• Periodo sensoriomotor (0-2 años): Dominan en el niño las actividades relativas a los sentidos y al movimiento del propio cuerpo; conductas reflejas, conductas voluntarias como consecuencia de los primeros esquemas de acción, coordinación de los esquemas de acción cada vez más complejos y explicativos de su medio (conservación del objeto), relación medios fines, desarrollo de la intencionalidad, comprensión de la causalidad, comprensión del espacio y desarrollo de la imitación. Estos logros se realizan a través de 6 subestadíos:

• Subestadío 1: Ejercicio de los reflejos innatos (0-1 mes): En el momento de nacer el bebé tiene una serie de reflejos que hacen posible su supervivencia. Estos reflejos irán adaptándose a los cambios de forma que el esquema inicial se enriquece. Todos los reflejos no tienen la misma evolución, suelen evolucionar aquellos que tienen una función utilitaria, los demás se pierden o se mantienen de forma inalterada durante toda la vida.
• Subestadío 2: Primeras adaptaciones y reacciones circulares primarias (1-4 meses): En este estadío lo más característico es la formación de hábitos. El origen de los hábitos es que el bebé hace algo de forma NO intencional y le resulta agradable, con lo que lo repite hasta lograr el mismo efecto. Piaget las denominó circulares.
• Subestadío 3: Las reacciones circulares secundarias (4-8 meses): El niño aprende a adaptar sus movimientos a los objetos de su entorno e incorpora nuevos objetos en sus reacciones circulares primarias. Las acciones se coordinan hacia la consecución de una meta inmediata.
• Subestadío 4: Coordinación de los esquemas secundarios aplicados a las relaciones medios/fines (8-12): Lo característico de este periodo es la aparición de la intencionalidad. Esta característica es necesaria para reconocer la inteligencia propiamente dicha. Así las acciones se orientan hacia la consecución de una meta no inmediata. La conducta tiene un objetivo claro, con lo que los esquemas de conocimiento se integran en estructuras coordinadas y móviles.
• Subestadío 5: Reacciones circulares terciarias (12-18 meses): Introduce variantes importantes a la acción (diferente a la inicial), aparición de nuevos esquemas más ricos y flexibles; hay intencionalidad en las acciones y la imitación es más precisa.
• Subestadío 6: Invención de nuevas combinaciones de esquemas a partir de sus repercusiones (18-24 meses): Aparece la representación; las acciones o problemas pueden resolverse en el plano simbólico y no solo en el práctico. Aparece una organización más lógica de las acciones. La inteligencia opera cada vez con más representaciones adelantándose a los efectos. Los progresos se detectan en todos los planos. Los procesos de imitación se realizan sin la presencia del modelo. Aumento de la competencia lingüística.

• Periodo preoperacional (2 a 6 años): Durante esta etapa se consolida la función simbólica en sus diferentes manifestaciones. En el plano intelectual, las representaciones permiten al niño distanciarse de situaciones inmediatas y anticiparse a situaciones nuevas, aumentando considerablemente su capacidad de organizar el medio que le rodea. Las imágenes mentales de las que dispone el niño están aún lejos de equipararse a los conceptos propiamente definidos; Piaget habla de preconceptos.

A partir de los 4 años el niño/a alcanza un progresivo grado en su capacidad de organizar el mundo que le rodea. Puede centrarse ya en dos dimensiones sucesivas tales como la longitud y la anchura, permitiéndole conservar algunas cantidades a pesar de los cambios perceptivos. El control de su pensamiento y juicios se da por regulaciones todavía no lógicas, aunque gradualmente comienza a construir las bases para su armazón lógico a base de regulaciones intuitivas ligadas a la percepción (etapa intuitiva).

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