Ciudadanía

CUIDADANÍA

La ciudadanía es todo aquel conjunto de derechos que tienen las personas como sujetos y los deberes que de ellos se derivan, todo ello ha ido transformándose paralelamente con el desarrollo de la sociedad, primando fundamentalmente en los últimos tres siglos, distinguiéndose varias etapas como la ciudadanía civil, vinculada a la libertad y los derechos de propiedad, además de la ciudadanía política, ligada al derecho al voto y al derecho a la organización social y política, como también la ciudadanía social, la cual se relaciona con los sistemas educativos y el estado de bienestar. También se entiende como ciudadanía a lo relacionado con la condición de haber nacido o de vivir en una ciudad o la aptitud básica y la condición jurídica para ejercer los derechos políticos de determinado país.

Por consiguiente, la ciudadanía ha estado ligada a las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, así como la libertad para organizarse, el voto, la propiedad y la participación en asuntos públicos, ya que ellas han accedido más tardíamente que los hombres a ser reconocidas como miembros activos de la sociedad, es por ello que aún existen mujeres que soportan mayor grado de violencia, reciben los salarios más bajos y cuentan con menos recursos que los hombres.

Cabe resaltar, que al hablar de ciudadanía se debe ahondar en el derecho mínimo a un bienestar y seguridad económica y así mismo del compartir al máximo el patrimonio social y a vivir la vida de acuerdo con los estándares imperantes en la sociedad a partir del reconocimiento de la igualdad de condiciones, respetándose entre hombres, mujeres, niños y discapacitados para el buen desarrollo de las relaciones sociales, ya que en la actualidad todos los países del mundo consideran ciudadanos a los varones y mujeres que han nacido dentro de los limites de su territorio.

Al hablar de la ciudadanía implica tener en cuenta el concepto de lo público, que es todo aquello perteneciente al estado, donde todo ciudadano tiene el derecho de gozar de sus servicios, es decir, que los miembros de la sociedad puedan hacer uso de los componentes y espacios públicos para el beneficio común o colectivo.

El proceso de la construcción de lo público implica pensar al ciudadano como la persona capaz, en cooperación y coordinación con otras y otros, de crear o transformar el orden social para satisfacer las perspectivas individuales y colectivas dentro de un marco de dignidad humana, apareciendo el orden social como una creación agrupada de mujeres y hombres que, a partir de la planeación, contribuyen con los demás con su organización, para que todos se conviertan en actores sociales de un país o nación, estableciéndose así un tejido social que según comenta Tocqueville en su texto sobre la democracia en América, “saber organizarse es la ciencia maestra

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