DIA DE LA AMAZONIA ECUATORIANA

EXALTACION POR EL DIA DE LA AMAZONIA

Dignas autoridades presentes.

“Gigante llanura de misterio que oculta vida, deslumbra belleza, y florece esperanza”, eso es Orellana, eso es la Amazonía Ecuatoriana.

El 12 de febrero, Orellana rinde pleitesía la Región Amazónica. En esta justa conmemoración están las provincias de Sucumbíos, Orellana, Napo, Pastaza, Morona Santiago y Zamora Chinchipe. Región por demás importante en la vida nacional por el aporte económico que brinda por los incuantificables recursos naturales que posee, pero principalmente por la inmensa biodiversidad que palpita en sus entrañas.

Esa es nuestra región amazónica situada a pocos kilómetros de Quito pero que hasta hace poco se extendía como una llanura ignota y exótica. Hoy lo vemos como el gran centro de acopio de riquezas naturales que generan el progreso para todo el país, pero que sin embargo, aún se encuentra olvidada. Muchas obras se han construido pero no son suficientes para la inmensa superficie que representa esta región. Orellana es un reto para los hombres y mujeres que en ella viven y nos pide a gritos trabajar por su desarrollo y por los pueblos desprotegidos, con la fe y el espíritu vigoroso y emprendedor que caracteriza a sus habitantes. Trabajar por un desarrollo sustentable a través del aprovechamiento de sus recursos naturales, en la habilitación de sus tierras mediante una planificación que se pueda cumplir, alejando la mentira, el engaño y la demagogia. Esta región ha dejado de ser un mito. Hoy nos corresponde aunar esfuerzos para buscar otras alternativas de desarrollo buscando siempre el mejoramiento de las condiciones de vida de la población, fortaleciendo las iniciativas y legando a nuestros descendientes un mundo apto para su supervivencia.

El Ecuador, ha sido amazónico desde siempre y lo será por siempre, no por haber tenido una salida al gran río Amazonas, sino por pertenecer a toda una eco región que traspasa fronteras y límites internacionales, que se muestra única para la humanidad y el mundo, por toda su mega biodiversidad.

En esta fecha la comunidad ecuatoriana exalta dos episodios de la memoria patria: la llegada de Francisco de Orellana y gente nativa de Quito al río Amazonas, en 1542, y la incorporación oficial de las islas Galápagos al Estado ecuatoriano en 1832.

Para perpetua rememoración de esos hechos, durante la presidencia de Jaime Roldós Aguilera, en 1980, se estableció la celebración del Día de la Amazonía y de Galápagos, festejo que también permite relevar la importancia geopolítica, económica, turística y científica de esas regiones que forman nuestro patrimonio territorial.

A la Gobernación de Quito y a Francisco de Orellana está ligado el hecho de encontrar, surcar las inmensas aguas y conocer la desembocadura del río Marañón o de las Amazonas en el océano Atlántico.

Todo ocurrió tras un titánico viaje que Orellana inició en Guayaquil en 1541 para incorporarse a la expedición de Gonzalo Pizarro que iba rumbo al llamado País de la Canela y el mítico Dorado. Por eso, el episodio que protagonizó Orellana y la gente quiteña que formó la expedición de Pizarro, otorga validez a los ancestros amazónicos de nuestra república.

La región Amazónica la forman las provincias de Sucumbíos, Orellana, Napo, Pastaza, Morona Santiago y Zamora Chinchipe. Es una fecunda porción que forja el desarrollo de la patria. Los huaorani, shuar, achuar, sionas, secoyas, záparas, kichwa y otras nacionalidades indígenas, los colonos y nuevas familias de allí cumplen un papel preponderante en favor del país.

Bien se podría gloriar Babilonia de sus muros,

Nínive de su grandeza,

Atenas de sus letras,

Constantinopla de su imperio,

que Quito las vence por ser la llave de la cristiandad y por conquistadora del mundo, pues a esta ciudad pertenece el descubrimiento del gran río de las Amazonas…

Iniciada la conquista española, movida por su incansable y ambiciosa búsqueda de la “tierra canela” y el “Dorado”, en el año de 1541, un grupo de jerarcas militares serviles de la monarquía española, comandados inicialmente por Gonzalo Pizarro, y posteriormente comandados por Francisco de Orellana, que sometieron a miles de nuestros aborígenes pobladores originarios de territorios ecuatorianos, inician una expedición por las selvas vírgenes, que concluye el 12 de febrero de 1542 con el descubrimiento del Río Amazonas. La historia refiere que para llegar al gran río mar, los expedicionarios tuvieron que navegar muchos días por el río Napo; de la misma manera refiere la historia que inicialmente el río mar se llamó Río San Francisco de Quito, en relación al sitio desde donde partió la expedición.

Fue un acontecimiento suscitado meses más tarde al descubrimiento del gran río mar, que motivó su cambio de nombre, por relación a un ataque que los expedicionarios sufrieran de una tribu de mujeres guerreras llamadas ICAMIABAS. Desde entonces Francisco de Orellana denomina al gran río mar, como el Río Amazonas, dejando sentado su nombre en las capitulaciones que hiciera para ante el Rey.

Luego de mantener un largo conflicto territorial con la República del Perú, por una basta porción de territorio que llega hasta las orillas del río Amazonas, que ni protocolos ni tratados internacionales a esa época pudieron dirimir, la Cámara Nacional de Representantes del Ecuador, el 5 de agosto de 1980, expide una ley que cambia en todas las leyes, reglamentos, cuerpos legales, textos de historia, geografía y cívica, la denominación de Región Oriental u Oriente, por Región Amazónica, considerando que ya las Asambleas Constituyentes de 1944 y 1946 declararon al 12 de febrero como Día del Oriente Ecuatoriano e insertaron esta fecha en el calendario cívico nacional. Desde entonces, el 12 de febrero de cada año, celebramos cívicamente en el territorio nacional, el Día de la Amazonía Ecuatoriana.

La Amazonía es bosque, el bosque es vida, la Amazonía no es simplemente una despensa de recursos naturales renovables y no renovables, que se puede acabar. La Amazonía es belleza, la Amazonía es riqueza, la Amazonía es patrimonio natural y cultural, al que lo debemos cuidar.

Orellana, el “Último Paraíso”, es mucho más que madera..!, Orellana provincia petrolera siente a diario cómo se desangra y acaba la Amazonía, en nombre del desarrollo del país. Sus autoridades, su autoridad mayor, los Orellanenses luchamos por defender la integridad de este pedazo de naturaleza, con acciones significativas que se graban

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