ETICA DE BIENES

ETICA DE BIENES

Se les da este nombre a las doctrinas que afirman la existencia de un valor fundamental, llamado bien supremo, hacia cuyo logro deben hallar se orientados los esfuerzos humanos; refiere el mérito de las acciones a la relación que las mismas guarden con un último fin de la vida, frente al cual los demás son solo medios. Su bien característico reside en el logro del fin a que aspiran.

ETICA DE FINES

La ética de fines no podría confundirse con la filosofía de valores ya que entre ambas posiciones median hondas diferencias, cuando los griegos hablaban de los bienes, aludían unas veces a lo que actualmente denominamos valores y otras, a las virtudes; mas nunca poseyeron una idea clara del valor, ni distinguieron este concepto de la noción de bien establecida por la filosofía de nuestra época. Las principales variantes de la ética de los bienes se dividen de acuerdo con el bien de cada una de ellas considera como el más elevado, las direcciones más importantes son el eudemonismo, idealismo ético y el hedonismo.

Esta última es la más común que deriva de la palabra endemonia que significa felicidad; según Aristóteles es un bien supremo la felicidad porque constituye un fin que ya no tiene el carácter de medio.

Según el idealismo, la finalidad última no es el logro de la dicha, sino la práctica del bien. Por otra parte el eudonismo ostenta según Hartmann una tendencia individualista hondamente acentuada, tal individualismo no es incompartible con la doctrina del amor al prójimo, pues esta última se refiere a la vida presente y a los bienes terrenales.

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