El Perro De Casandra

Había una vez en un pueblo llamado Lindo Azul una pareja de reyes que vivía en un palacio lleno de riquezas. Ellos solo tenían una hija la cual se llamaba Casandra. Ella era una niña muy bonita, alta, de ojos claros, piel blanca y muy parecida a su madre. Casandra al ser hija única, solo tenía la compañía de su perrito llamado Toby con el cual jugaba todos los días y tenía su casita en la pieza de ella, prácticamente eran muy amigos. Un día Casandra y su perrito junto con sus padres salieron a recorrer el pueblo cuando de pronto Toby se suelta de la correa y arranca persiguiendo un gatito que andaba en la vereda frente a un almacén. Casandra se desesperó y lloraba por su perrito ya que lo buscaba y no lograba encontrarlo. Pasó toda la tarde y no se sabía nada del pobre Toby.

Joaquín, un niño que estaba jugando en la plaza con sus amigos se percató del llanto de algo que estaba detrás de los arbustos, él sin miedo, se acercó y se dio cuenta que era un perrito con la patita herida y con un collar con el nombre de Toby. Finalmente Casandra lloraba desconsoladamente al no haber encontrado a Toby y cuando estaba volviendo a su casa con una profunda pena, aparece Joaquín llevando a Toby entre sus brazos cubierto con una manta y en su patita llevaba una venda para evitar el sangrado. Casandra corre en busca de su perrito y dándole las gracias a Joaquín quienes prontamente terminan siendo muy Buenos amigos.

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