Ensayo sobre la vivienda

Para diseñar una vivienda, lejos del proceso de proyectar o programar las actividades también se hace implícito entender cómo se llega a los conceptos, a transmitir una idea, ideas que mueven al proyectista o arquitecto, todo esto es parte de un proceso de aprendizaje complejo y realista dentro del cual para acércanos a respuestas adecuadas en nuestros proyectos es necesario conocer y ver hechos ya realizados. Pero necesariamente ¿este proceso implica que logremos proyectar de la mejor manera?

Podemos asociar el concepto de vivienda a muchas casas, que por su transcendencia, han logrado ser tomados como hitos y referentes en nuestro modo de proyectar. Por mencionar a algunos tenemos a:

-Casa Utzon del arquitecto Jorn Utzon que fue pensada como la casa de campo afín a las actividades del usuario, por lo general actividades de descanso y actividades deportivas exteriores, las intenciones están asociadas estilo de vida del arquitecto y su familia como casa de descanso; esta casa fue pensada para ser accesible por ser bajo costo económico además de tener el valor agregado de la conceptualización de la materialidad del lugar. Su distribución está orientada con respecto a un eje horizontal y busca mantener presente como valor agregado el uso del material del lugar.

-Casa Barragán del arquitecto Luis Barragán, que también cumplió los roles estudio y residencia en la ciudad Distrito Federal de México. Las intenciones de esta casa inicialmente fueron de residencia para su familia y el. Los espacios inicialmente fueron otros cuando se proyectó y una serie de decisiones en la programación cambiaron las áreas y actividades. La configuración inicial espacial se refiere a las necesidades y están más asociadas al criterio del arquitecto que a actividades cotidianas. El valor agregado de esta radica en la individualidad del programa, en la que las costumbres de la familia determinan la distribución.

-Casa Lange de Mies van Der Rohe, que actualmente es un museo de arte contemporáneo, inicialmente fue proyectado con la intensión de ser una casa tradicional pero con la modernidad de la época. El arquitecto inicialmente proyectó a esta casa con grandes terrazas y el uso de materiales tradicionales como el ladrillo, pero doto de aspectos estructurales modernos. El valor agregado de la casa radica en la contemporalidad del pensamiento del usuario y el arquitecto. El pensar en lo moderno y tradicional a la vez

Así, entendiendo que inicialmente podemos señalar a las intenciones como directrices de diseño en el programa arquitectónico para determinar espacios áreas y funciones, lo que realmente mueve a un arquitecto es el carácter propio, el valor agregado, que por entenderse como lo que hace única y especial a una casa, es el asociar el usuario con el programa de manera estrecha y no solo por cumplir una necesidad. La arquitectura reside en cuanto de nosotros está dentro de lo que proyectamos, cuanto de nuestra manera de entender una costumbre se puede plasmar en la determinación de la envolvente y el espacio arquitectónico, y la forma que tenemos de entender el modo de vida de uno, las costumbres, el habitar. Finalmente podemos decir que la arquitectura es más asociada al habitar que al solo programar

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