Homosexualidad

Homosexualidad

Existen muchas teorías acerca de los orígenes de la orientación sexual de una persona. La mayoría de los científicos en la actualidad acuerdan que la orientación sexual es más probablemente el resultado de una interacción compleja de factores biológicos, cognitivos y del entorno. En la mayoría de las personas, la orientación sexual se moldea a una edad temprana. Además, hay pruebas importantes recientes que sugieren que la biología, incluidos los factores hormonales genéticos o innatos, desempeñan un papel importante en la sexualidad de una persona.

¿Es la homosexualidad una enfermedad mental o un problema emocional?

Los psicólogos, psiquiatras y otros profesionales de la salud mental concuerdan en que la homosexualidad no es una enfermedad, un trastorno mental ni un problema emocional. Más de 35 años de investigación científica objetiva y bien diseñada han demostrado que la homosexualidad, en sí misma, no se asocia con trastornos mentales ni problemas emocionales o sociales. Se creía que la homosexualidad era una enfermedad mental porque los profesionales de la salud mental y la sociedad tenían información tendenciosa.

Conforme al sexo entre animales del mismo género parece ser un hecho universal y los resultados así lo han concluido, señalando que ocurre entre más de 1500 especies diferentes, desde gusanos a sapos, de todo tipo de pájaros a insectos, de ovejas a murciélagos o de delfines a orangutanes, por señalar algunos de los casos más conocidos.

Por ejemplo, un grupo de biólogos en la isla hawaiana de Oahu, descubrió en el año 2009 que luego de que la población de albatros venía disminuyendo durante años frente a la escasez de machos, casi un tercio de la población entera de esta especie en la isla tenía comportamientos homosexuales. Esa población se constituyó por innumerables parejas de dos albatros hembra, las cuales se comportaban como cualquier otra pareja de albatros. Pero lo sorprendente es que desde entonces, el número de albatros en la isla ha aumentado enormemente, estos “albatros lesbianas”, por llamarle de algún modo, consiguieron aprovechar al máximo los pocos machos que había y formando estos lazos homosexuales lograron volver a ampliar su población. Exactamente lo mismo ha sucedido con algunas especies de primates, pingüinos y delfines, lo cual resulta sumamente interesante.

España es el país donde la homosexualidad es más aceptada, según un estudio de la compañía Pew Research. El 88% de los encuestados españoles en este estudio creen que la sociedad debe aceptar la homosexualidad, contra un 11% que cree que no (era el 82% en el último estudio, en 2007, y sí, hay un 1% indeciso, curioso o a saber). Es la cifra más positiva de todos los países estudiados: nos siguen de cerca Alemania (87%), República Checa (80%), curiosamente

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