La Juventud Obrera

*LA JUVENTUD OBRERA DEL TALLER A LA FÁBRICA*

CIPRIANO LÓPEZ AGUILAR

Desde hace mucho tiempo nos hemos dado cuenta que las familias han buscado que sus hijos siempre aprendan algo con un fin de que ello se integren al mundo laboral y que logren una vida mejor remunerada.

Las lecturas de “Adolescente aprendiz y el aprendizaje de las corporaciones” Nos dicen que durante la edad medieval hay nuevas formas de impartir un conocimiento en donde el trabajo en conjunto de la ciencia comienza a formar una nueva relación en cuanto a la formación de los aprendices.

La relación mutua entre aprendices y maestros, estos dos participaban eran personas que observaron que mediante el trabajo se adquirían conocimientos y habilidades de la profesión, se decía que el trabajo y el aprender no tenía ninguna separación, ya que no había una escuela para el trabajo, el mismo trabajo es la escuela, más que nada en los talleres donde se impartían los oficios eran para los aprendices como la escuela misma.

Para poder estar en un taller se realizaban contratos los cuales podrían ser escritos u orales y tenia que ser hechos con dos testigos, la duración era a discreción del maestro de tres a cinco años.

El aprendiz debía pagar por la enseñanza recibida además del rendimiento se convertía en propiedad del maestro el cual podía venderlo o alquilarlo si fuera necesario, contaba con los derechos del aprendiz

La comunidad estaba obligada a enseñarlos si su maestro moría. Así como estipulaba sus derechos que le otorgaba el maestro. Aunque muchas veces los tratos a estos aprendices eran pésimas en algunos caso tenían que aceptar no tenían de otra. Por otro lado también se fijaba el número de aprendices con que cada maestro podía contar.

Asimismo estaba precisadas las edades en que el muchacho podía comenzar el aprendizaje y el tiempo que debía dedicarle, tanto para perfeccionarse en la práctica del oficio. Junto a compañeros de más edad y con los medios propios del maestro, el joven se esforzaba en ir adquiriendo lentamente el conjunto de conocimientos técnicos y prácticos necesarios para dominar el oficio que pensaba ejercer más tarde.

Para concluir su aprendizaje tenía que realizar un trabajo final llamado obra maestra el cual en nuestros días seria como un examen final el cual tenía que poner en practica todo lo que había aprendido era como una manera de graduarse o finalizar sus estudios.

Por otro lado los padres de familia del el adolescente le confiaban a un vecino o a un pariente que le servía de maestro, estaba destinado a continuar más tarde el negocio o el oficio paterno, o bien a suceder, por su matrimonio, a un suegro o en otra rama profesional. Todavía hoy algunos hijos de grandes industriales o de grandes comerciantes, confiados por sus padres a empresas.

Hoy en día

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