La Tapada Del Cuche

LEYENDA DE LA TAPADA DEL CUCHE

Originaria de San miguel Tepezontes

Cuenta la historia que en San Miguel Tepezontes era conocido como un pueblo de brujos por que se practicaba la magia negra, por algunos habitantes que llegaban a adquirir ciertos poderes que hacían de ellos diferentes transformaciones de animales, tal es el caso de la famosa “tapada del cuche”.

Y según relatos de nuestros antepasados esta historia se ha venido trasladando de generación en generación hasta nuestro tiempos, en la cual se decía: que pasada las seis de la tarde hasta en horas de la madrugada en ese lugar salía una enorme tunca que arrastraba el cuero y lo cual no dejaba pasar persona alguna porque de alcanzarlo o de oponerse con esta enorme tunca quedaba marcado con ciertas heridas en el rostro y en el cuerpo porque era una fuerza sobrenatural que acompañaba esa tunca, cuentan además que de su ocio resaltaban dos enormes colmillos que eran con los que atacaba y sus ojos enrojecían de tal forma que parecían dos brasas encendidas, todo esto sucedía muy a menudo, especialmente atacaba a los tunantes a esas personas que le gustaba trasnochar, aquellos jóvenes que regresaban de algunas parrandas y en estado de ebriedad aquellos que venía de ver a sus novias y que tenían que regresar a su hogar y tenían que pasar obligadamente por la “Tapada del Cuche” que era una especie de una calle angosta, pedregosa, donde no había energía eléctrica en ese tiempo, por lo que la persona que se convertía en la tunca (la bruja) era una mujer de aspecto joven, muy bella y que se aprovechaba de la situación para cometer sus fechorías, los habitantes del pueblo decidieron enfrentar a la tunca pero con armas corto punzantes, tales como: corbos, los cuales iban curados por personas que de alguna manera practicaban la magia blanca y que de alguna forma había que contrarrestar ese embrujo de magia negra, algunos contaban que para curar los corbos tenían que usar algunas hiervas, puros, ajos y unas oraciones.

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Esa noche que se decidieron a enfrentar la tunca no esperaba la sorpresa que los pobladores tenían preparada para ella, desenvainando sus corbos y arremetieron con varios machetazos contra la tunca, la que al verse herida y sangrienta tuvo que huir entre los árboles, al día siguiente contaba la gente que se trataba de una mujer muy bella que practicaba la magia negra, lo sorprendente fue que su madre le curaba las heridas a su hija, y cuando los del pueblo se acercaron a la casa a preguntarle de la mamá de la joven que se convertía en tunca, ella nunca supo, que responder, e incluso hasta la misma madre se preguntaba que como es que se había herido su hija, ni la hija se lo podía decir ya que por la profundidad de las heridas

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